La excandidata a la vicepresidencia por el Frente Amplio en 2019 Graciela Villar y la exministra de Salud Pública y expresidenta de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) Susana Muñiz fueron confirmadas este viernes como presidentas de las mesas departamentales del partido en Montevideo y Canelones, respectivamente.

En un acto que se llevó a cabo en La Huella de Seregni y que contó con la participación del coordinador del FA, Ricardo Ehrlich, y del presidente electo del partido, Fernando Pereira, Villar y Muñiz señalaron la importancia del trabajo con las bases y coincidieron en que lograr la victoria del Sí en el referéndum del 27 de marzo contra 135 artículos de la ley de urgente consideración (LUC) es el principal objetivo que tienen en el corto plazo.

Antes de dar la palabra a las nuevas presidentas departamentales, Ehrlich destacó que en 13 de los 19 departamentos la mesa quedó a cargo de mujeres y manifestó que es resultado de un trabajo que “implica luchas, trabajo, convencimiento, explicación y adopción de normativas por parte de una fuerza política”.

Cuando tomó la palabra Villar, señaló que la elección interna “ha marcado una gesta de carácter democrático y participativo que da cuenta del carácter de esta organización, que estuvo dispuesta a haber salido de un congreso donde hizo una síntesis de su propia autocrítica, cosa que ninguno de los partidos tradicionales ha hecho en este país, a plebiscitar frente a sus militantes”.

En este sentido, afirmó que “significa mucho en momentos en que se largan opiniones que atentan contra el concepto de democracia que tenemos los uruguayos y uruguayas”, y que “estar aquí con el respaldo de los frenteamplistas que fueron a votar en una elección complicada es suponer que tenemos el respaldo político necesario para elaborar en forma colectiva una estrategia que nos lleve a potenciar al FA como un actor privilegiado de la sociedad uruguaya en el vinculo directamente con la sociedad civil y con sus habitantes”.

Previamente, Ehrlich también había manifestado que en el partido existen “preocupaciones por saber manejar del lado de las autoridades nacionales la complejidad de las situaciones, con altura republicana y responsabilidad democrática a todo nivel”, tanto “en el control de las expresiones populares de preocupación, de protesta” como conformando “un clima acorde a los principios democráticos y republicanos en lo que tiene que ver con las declaraciones”. Indicó también que hay que distinguir “entre lo que es verdad y lo que es mentira, reiterando que la verdad es relativa pero la mentira es absoluta”, así como también la diferencia entre verdad, mentira y opiniones, que “son siempre bien recibidas pero son opiniones”.

Estas declaraciones hacen referencia a los dichos de la senadora del Partido Nacional Graciela Bianchi, quien el 28 de diciembre, en un Twitter Space en el que también participaron los senadores de Cabildo Abierto Raúl Lozano y Guido Manini Ríos, afirmó que hay militantes de izquierda “infiltrados” en el Poder Judicial y de “intencionalidad” por parte de los fiscales, así como que la Universidad de la República es una “usina de adoctrinamiento”. Manini, por su parte, dijo que “por supuesto” coincidía “totalmente” con lo dicho por Bianchi, y opinó que hubo “cosas que hemos visto [que] nos llevan a pensar que hay cierta intencionalidad” en la actuación de jueces y fiscales.

“Si hoy vivimos una profundización de las desigualdades producto de la aplicación económica y conceptual de un gobierno que piensa en los malla oro y no en el pelotón, eso en Montevideo tiene impactos superiores. Y como tiene impactos superiores, porque nos guste o no es el centralismo de la acción política, económica y cultural del país, es que tenemos el desafío de tener una fuerza política organizada a ese nivel”, señaló Villar.

Además, consideró que la capital debe “tender puentes con el área metropolitana, porque montevideanos y montevideanas van y vienen de un lugar al otro sin ver la frontera, simplemente a través de un ómnibus, y por tanto generan sinergias de carácter social, político y necesidades colectivas”.

A los militantes del partido les dijo que “los precisamos y estaremos junto a ellos mano a mano para el objetivo a mediano plazo que tiene esta fuerza política, que es consensuar las voluntades necesarias para la derogación de la LUC el 27 de marzo. Y esa será nuestra tarea: enfrentar, pero no enfrentar desde el punto de vista del combate, sino para enfrentar con el diálogo a la sociedad toda, para que nos escuchen en cada territorio por qué esos 135 artículos de la LUC encarnan la columna vertebral de un proyecto que atenta con destruir esto que construimos entre todos, un Uruguay reconocido internacionalmente por su amplitud, su respeto por los poderes públicos, el respeto de las diferencias y el combate a las desigualdades”.

Canelones

Susana Muñiz, por su parte, dijo que en Canelones se encuentran “casi todos los alimentos que se producen en Uruguay, y las formas de producción de Canelones están siendo amenazadas por otras formas de producción”, por lo que tener presencia en ese territorio “será fundamental”.

Además, consideró que en la Mesa Departamental “somos un equipo y ese equipo empieza a marchar rumbo a marzo, a esa campaña de anulación de 135 artículos de la LUC, que nos hace retroceder en derechos, convierte a Uruguay en un país más desigual”.

Por último, destacó el rol de los jóvenes frenteamplistas durante las elecciones internas, afirmando que “demuestra que esa fuerza política tiene mucha perspectiva de futuro”.