El Mirador Desca, un proyecto desarrollado en conjunto entre el Área de Estudios de la Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH) y la Unidad de Métodos y Acceso a Datos de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de la República (Udelar), presentará los últimos datos sobre el porcentaje de ocupados y la brecha que hay entre quienes viven en situación de pobreza; a su vez, informarán sobre el aumento de la pobreza en niños, niñas y adolescentes, además de la suba de asentamientos e inequidad que hay en la educación entre afrodescendientes y quienes no lo son.

Esto será el 8 de diciembre en la INDDHH y contará con la presencia de la vicepresidenta, Beatriz Argimón, y del presidente del organismo, Marcos Israel. Según datos publicados en el sitio web del Mirador Desca, existe una “menor cobertura” en prestaciones de la seguridad social, sumado a que son las edades que predominan en los asentamientos, por lo que se “presenta una situación compleja que es necesario priorizar”. Señalaron que “si se combinan estas informaciones podemos decir que los niños, niñas y adolescentes son más pobres y reciben menos apoyo y prestaciones de la seguridad social”.

“Si comparamos con las prestaciones contributivas que reciben otras franjas etarias (jubilaciones y pensiones), la desigualdad es más notoria, y eso se refleja en el desempeño que los distintos grupos muestran de acuerdo a su edad para todos los derechos”, agregaron.

Los primeros puntos

En el estudio se presenta la cantidad de ocupados que viven en hogares en situación de pobreza, es decir, personas que, si bien tienen un trabajo remunerado, no superan la línea de pobreza. Este indicador, según indica el informe al que tuvo acceso la diaria, presenta una leve mejora de 2020 a 2021, pasando de 7,7% a 6,8% respectivamente, pero debe atenderse a las situaciones de Rivera y Cerro Largo, que duplican estos porcentajes (14,7% y 14,4%, respectivamente). El departamento que les sigue es Salto con 9,2% y 8,7% para Treinta y Tres.

Por otra parte, el estudio refiere al aumento de la pobreza en niños, niñas y adolescentes, que fue difundido por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según este organismo, la pobreza se ubicó en 10,7%, poco menos que en el segundo semestre de 2021, cuando se ubicó en torno a 11%, aunque en el cálculo interanual hubo una suba, ya que en el primer semestre del año pasado la pobreza llegó a 10,2%. En definitiva, a mitad de este año, son unos 380.000 uruguayos los que no alcanzan a reunir los ingresos necesarios para cubrir una canasta básica de alimentos.

El informe se basa en los menores que viven en hogares donde alguno de los integrantes es beneficiario de la Tarjeta Uruguay Social o de la Asignaciones Familiares-Plan de Equidad. Según el estudio, en el primer punto, la cantidad de niños, niñas y adolescentes –de hasta 17 años– desciende en comparación con 2020, puesto que el año pasado se registraron 143.983, y anteriormente eran 147.983.

Mientras tanto, en el segundo caso, el año pasado se registraron 317.220, mientras que en 2020 eran 328.229.

Otros datos

El indicador también mide el porcentaje de personas en viviendas ubicadas en asentamientos irregulares. En conclusión, apunta el informe, “a mayor edad, menos porcentaje de personas viviendo en asentamientos irregulares”. Por ejemplo, según los datos de 2019, entre las personas de cero a cinco años 6,7% está en esa situación, mientras que de 18 a 29 años hay 5,1%, y de 65 años o más, 2,1%.

Por otro lado, referido a las diferencias en la seguridad social según el sexo, las mujeres mayores de 60 años que no perciben jubilaciones ni pensiones y que no participan en el mercado de trabajo son el triple que los varones. Además, de 2020 a 2021, se redujo la cantidad de varones y aumentó la de mujeres, pasando de 4,9% a 4,6% en los hombres, y de 14,6% a 14,9% en las mujeres.

A su vez, se refiere a la situación de los afrodescendientes, donde se presenta una serie de casi diez años en la que sistemáticamente se refleja la brecha entre personas afrodescendientes y no afrodescendientes. Por ejemplo, en la educación, donde se mide el porcentaje de personas de 21 a 23 años que no culminaron la educación media básica, en 2019 hubo una diferencia de 12 puntos: 35,8% (afrodescendientes) y 23,7% (no afrodescendientes).

Sobre el derecho a la vivienda de los afrodescendientes, se presenta una serie de 13 años en donde se puede observar una alta brecha. Según se desprende de los datos de 2019 con los que cuenta el Mirador, 10,8% de personas afro no pueden acceder a una vivienda, mientras que 3,7% de no afrodescendientes tampoco pueden hacerlo.

Hay más presos que plazas disponibles habilitadas

El Mirador pone foco en la densidad penitenciaria. Para eso, el indicador muestra el porcentaje de personas privadas de libertad en relación a la cantidad oficial de plazas disponibles habilitadas en el sistema penitenciario. Por ejemplo, en 2021 se registra un porcentaje de 122,8%, mientras que en 2020 eran 20 puntos menos: 108,8%. Juan Miguel Petit, comisionado parlamentario para el Sistema Carcelario, dará sus opiniones al respecto en el evento que se celebrará en la INDDHH.