Este martes el Parlamento votó el proyecto de ley para quitar por un mes el IVA al asado de tira. En el Senado el debate estuvo dominado por el clima caliente de campaña hacia el referéndum, con constantes alusiones sobre los “responsables” de la situación actual de la economía y los “ganadores” por las medidas del actual gobierno. La pandemia también estuvo presente, así como los repetidos términos de “palos en la rueda” y “malla oro”. Luego, en Diputados, la legislación se retrasó dos horas porque varios legisladores de la coalición habían pedido licencia y no había cuórum para votar el proyecto del gobierno.

En el Senado la senadora Graciela Bianchi dijo: “Nadie dice que este proyecto de ley vaya a resolver el problema de los más vulnerables”. Además, sostuvo que la situación económica “no es de catástrofe” y que debía responder ante las acusaciones del Frente Amplio (FA) sobre que “hay hambre”.

Ofició de miembro informante el blanco Sebastián da Silva, quien expuso en defensa del campo y sus aportes a la economía, mientras que analizó que hubo “una convulsión inflacionaria por la guerra” entre Rusia y Ucrania, “dos potencias” por sus recursos y producción, con efectos en el mercado interno. Además, planteó que el gobierno dará “asado de verdad”, no como en 2007 cuando el FA promovió una medida similar que también incluyó la falda, dando así “asado para pobres”.

Habrá un millón y medio de toneladas de asado de exportación que los frigoríficos volcarán al mercado interno, para vender a 230 pesos el kilo, indicó Da Silva. Desde el FA, Sebastián Sabini preguntó -y luego reclamó al informante de no haber respondido- cómo se llega a dicho precio, ya que si al valor de 350 pesos actual se le descuenta 10% de IVA queda en 318.

Frente Amplio: “No es ni una monedita”

El senador Daniel Olesker, así como Mario Bergara, expusieron desde el punto de vista económico las razones por las que entienden insuficiente la medida del gobierno, además de refutar la versión de que los precios internos suben por la guerra. Olesker dijo que desde mayo del año pasado aumenta la inflación interanual cada mes.

“Se podría haber hecho para más productos, por más tiempo y antes”, dijo el senador socialista. Calificó la medida como “marginal” y que “no tendrá casi efecto” en los hogares, ya que llega “después de una disparada” de los precios de los alimentos básicos: 60% el aceite, 37% el arroz, 22% los huevos y 30% la carne picada, repasó.

Para Bergara, si bien “cualquier monedita sirve” y por eso el FA lo votará, evaluó: “Esto no llega ni a monedita, es de una dimensión ínfima”. Llamó al gobierno a pensar “medidas más profundas” para incidir en los precios, y no “a dos días de una elección”.

A su turno, el senador Óscar Andrade dijo que esta medida “no le cambia la vida a nadie” y que, tras los anuncios del presidente, “se parió algo más chico que un ratón”. En tanto, Daniel Caggiani calificó el proyecto como “un cohetito de vieja” por su escaso impacto.

Cabildo Abierto: “Estas medidas se quedan cortas”

Guillermo Domenech y Guido Manini Ríos, que hablaron en nombre de Cabildo Abierto (CA), plantearon ampliar la medida de reducción del IVA a otros cortes de carne y alimentos de la canasta básica, por más tiempo. Sin embargo, Liliam Kechichian desde el FA consultó si había una propuesta formal al respecto y la vicepresidenta Beatriz Argimón —que preside la sesión— le aclaró que no.

“Tenemos la visión de que estas medidas se quedan cortas. Hacemos una propuesta” de ampliar el beneficio impositivo a cortes como la falda, la carne picada, el pollo y “distintos productos de la canasta básica”, dijo Manini. Señaló que “no se precisa ley”, sino llegar a “un acuerdo con grandes superficies [supermercados], que tienen que retribuirle al Estado los beneficios que este y más aún anteriores gobiernos [les dieron]”. Manini recordó palabras “de un importante empresario que anunció que se le concedía permiso para 30 nuevos supermercados”, en referencia a Francisco de Narvaez, argentino dueño de la cadena Ta-Ta, que se reunió a principio de año con el presidente en la Torre Ejecutiva.

“Todos esos beneficios deben ser distribuidos en este momento de excepcionalidad. Una canasta de productos determinada para los más postergados, con un tope máximo de precios. Sólo que no tengan ganancia esas grandes superficies, ni que donen ni que pierdan. Para que el pueblo más humilde pueda subsistir por seis meses hasta que pase el invierno”, manifestó el líder de CA.

“Entendemos que el Estado debe estar presente en circunstancias que pueden ser dramáticas para la sociedad”, indicó Domenech.

Jornales solidarios

Este martes también se aprobó el proyecto para extender la continuidad del programa Oportunidad Laboral, también conocido como jornales solidarios, hasta el 31 de mayo. La propuesta había sido aprobada previamente por el Congreso de Intendentes, que definió “utilizar los fondos remanentes” del programa para darle continuidad por dos meses más, luego de cumplido el plazo previsto para su finalización (31 de marzo).

El proyecto dispuso que los beneficiarios del programa, durante febrero, marzo, abril y mayo, perciban 6.250 pesos nominales mensuales y el “referido monto se abonará por seis jornales efectivamente trabajados en la quincena”. Previamente, el monto mensual que recibían los beneficiarios era de 12.500 pesos.