Previo a la Marcha del Silencio, referentes de la cultura, el movimiento estudiantil, el deporte y la ciencia reflexionaron sobre lo que significa la memoria y la impunidad, convocados por la diaria.
Elena Zaffaroni, integrante de la Asociación de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos, dijo que la impunidad es una de las experiencias “más dolorosas, duras y más extendidas” que le han tocado vivir en relación a lo que han sido las denuncias que han hecho todos estos años contra los “tremendos crímenes de la dictadura”. “La impunidad es eso; se derrama sobre la sociedad, destruye la confianza en los valores fundamentales y no nos permite crecer ni como individuos ni como sociedad”, aseguró.
Con relación a la memoria, Zaffaroni dijo que es la “herramienta” que ha abierto una “luz en este trabajo”, que “no es sólo por no olvidar, sino para que esa experiencia tan dura de nuestro país no se perdiera como si nada, como si no la hubiésemos vivido, sino que, por el contrario, “fuera una enseñanza”. “Que fuera una historia transmisible, que se entendiera los valores, la importancia de la justicia, de no tolerar lo intolerable. Eso ha estado en los hombros de todos nosotros, de toda la sociedad, y ese es otro inmenso valor que tiene la memoria, que la construimos entre todos”.
Por su parte, el científico Gonzalo Moratorio afirmó que la memoria es la capacidad de “almacenar recuerdos”. En ese sentido, sostuvo que como seres humanos la memoria “nos define, nos dice de dónde venimos, qué hicimos, quiénes somos”. Aseguró que su “mayor miedo es perder la memoria”.
En tanto, el escritor Roy Berocay afirmó que la impunidad implica que todos aquellos que “violaron los derechos humanos, que abusaron de víctimas, secuestraron niños, se salgan con la suya”, por eso cree que, de alguna manera, es una “victoria de la oscuridad”.
Iliana da Silva, periodista de Canal 12, dijo que la memoria histórica sirve para “entender el presente” pero que también es una “garantía para que algunas situaciones y hechos dolorosos como los que ocurrieron en la dictadura no vuelvan a repetirse”: “También es una construcción colectiva: hay muchos actores de la sociedad que tienen que participar en esa construcción de la memoria histórica”. En estos tiempos, en que hay algunos actores políticos que quieren instaurar “otros relatos”, cree que la memoria “es una herramienta contra el olvido”.
La artista Eli Almic dijo que la impunidad es “gente que mató, torturó, y que esa gente se murió y hay una parte de la historia que nunca la vamos a saber”, algo que le genera “mucha impotencia”, pero “mucho más a las familias de esas personas que ya no están”.
Amira Fagúndez, militante de la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay, expresó que la memoria es parte de la “reconstrucción histórica” del pueblo y que para “sentar las bases de nuestro futuro” es necesario saber de “dónde venimos”. Por eso es “necesario” saber “dónde están cada uno y cada de nuestros detenidos desaparecidos y no olvidarlos”.
Por su lado, el músico Fernando Cabrera dijo que la impunidad es “cuando una persona, un individuo, o por supuesto una institución o un Estado por medio de una inmensa prepotencia, se ríen en la cara de todo el resto de la comunidad o colectividad que desarrolló un acuerdo”. “Son personas que violan ese acuerdo y no son ni juzgadas ni condenadas; eso es impunidad”, añadió.
La basquetbolista Sabina Bello sostuvo que la memoria sirve para “reconocer nuestra historia” y también para “mantenerla viva”: “Me parece muy importante seguir luchando por seguir teniendo presente nuestra historia, y más ahora que hay intentos de retroceder”.
Por último, también fue convocado el activista Yamandú Plada, quien consideró que la impunidad es dejar “sin resolver” la responsabilidad de las atrocidades que sucedieron en el pasado reciente y su “respectiva justicia”. “Impunidad es dejar una herida abierta y profundizarla con indiferencia”, concluyó.