Este martes durante más de diez horas se desarrolló la comparecencia en el Senado del ministro del Interior, Luis Alberto Heber, en régimen de comisión general, una instancia en que el jerarca –con el respaldo principalmente de los legisladores del Partido Nacional (PN)– defendió la gestión de seguridad, relativizó el aumento de los homicidios en las últimas semanas y brindó información sobre los grupos de narcotraficantes que operan en Uruguay. El Frente Amplio (FA), que promovió la convocatoria, cuestionó las políticas y los resultados del gobierno en seguridad, al tiempo que acusó al ministro de vivir en una “realidad paralela”.
En las horas finales de la sesión y tras el pedido de cuartos intermedios, tanto Heber, acompañado de la cúpula del Ministerio del Interior (MI), como el senador del FA Enrique Rubio, que ofició de convocante, dieron sus pareceres sobre la sesión. Para el ministro se “mostró a la oposición cuál es la estrategia” que se está desarrollando, además de que “se brindó información como nunca antes en la historia del Parlamento”. Por ello, consideró, no son válidos los cuestionamientos del FA sobre que no hay un plan –“se podrá compartir o no, pero existe”, planteó–, y aseguró que con su exposición “quedó demostrado que en nuestro país no hay una violencia expandida”.
Desde la oposición, se apuntó que “una vez más las expresiones del Poder Ejecutivo se caracterizaron por negarse a una mirada integral de la violencia y por atacar la gestión del Frente Amplio y la figura del exministro Eduardo Bonomi”. Se marcó que tras la pandemia, “la cantidad de homicidios” retomó un crecimiento al “aumentar en la segunda mitad de 2021 y con mayor fuerza en los primeros cinco meses de 2022”.
“El ministro y el gobierno deben hacerse cargo de este tema. No expusieron plan de acción alguno y sólo plantearon acciones puntuales relativas al cierre de bocas de venta de droga. [El ministro] tampoco reconoció que estamos sufriendo una expansión de la violencia que afecta a toda nuestra sociedad, con lamentables consecuencias para el futuro de todos los uruguayos, e ignoró la gran diferencia que existe entre las promesas electorales realizadas y los escasos resultados obtenidos”, concluyó el FA en su declaración.
“¿Una situación de descontrol? Es menos que en 2020”
La sesión del Senado para recibir a Heber en régimen de comisión general comenzó a las 10.00. La instancia –de similares características a una interpelación pero sin eventuales consecuencias políticas– sirvió para que el jerarca explicara la estrategia para paliar el aumento de los homicidios registrado en las últimas semanas, aunque la discusión derivó en cruces y acusaciones entre el oficialismo y la oposición sobre diversos temas, como el combate al narcotráfico y la situación carcelaria.
Al comenzar la sesión, Rubio calificó a la actual gestión como “errática” y con un “rumbo incierto”. A su turno, durante su hora y media de intervención Heber hizo énfasis en la comparación de cifras de delitos entre la administración de este gobierno y la del FA.
Según indicó, en 2004, antes de que el FA asumiera su primer gobierno, se producían 7.000 rapiñas al año, y cuando lo dejó en 2019 la cifra había aumentado a 30.636, lo que equivale a 338% de aumento. También repasó que los homicidios en 2004 estaban en 200 y pasaron a 393 en 2019, es decir, 96,5% de aumento.
Heber admitió que las cifras del primer trimestre de 2022 muestran un aumento, al reconocer que se pasó a “96 homicidios frente a 72 en 2021”, pero matizó al decir que en 2020 en ese mismo período –cuando en enero y febrero gobernaba el FA– hubo 101 homicidios y en 2019 se registraron 83. “¿Esta cifra lleva a la oposición a decir que estamos frente a una situación de descontrol? Es menos que en 2020”, cuestionó el jerarca.
Información sobre 45 clanes narcos
Luego el ministro dio paso al director general de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas, Alfredo Rodríguez, quien se encargó de detallar la estrategia de inteligencia que tiene el MI. En este sentido, informó que en Montevideo y el Área Metropolitana hay “45 clanes familiares” dedicados al narcotráfico, “sin perjuicio de los abastecedores o de las organizaciones que están por encima”. Precisamente, para brindar más detalles sobre estas organizaciones criminales fue que en un momento las autoridades pidieron que la sesión pasara a ser secreta.
Por otro lado, Rodríguez destacó “el aumento en las incautaciones de drogas” en los últimos meses, “especialmente de pasta base de cocaína, alcanzando récords históricos en un solo cargamento”, y también “un aumento de indagados, formalizados, condenados y de bocas desarticuladas, alcanzando la cifra récord en el año 2021 de 1.152 bocas desarticuladas”.
Así las cosas, explicó que “este aumento” provocó “pérdidas económicas significativas a las organizaciones criminales”, lo que a su vez generó “endeudamientos en los diferentes niveles de la cadena de distribución”. “Esto ha llevado a que haya disputas por territorio”, indicó en relación con el aumento de los homicidios, y agregó que existen “testimonios de algunas víctimas que han sido violentadas”, incluso con “disparos de armas de fuego” para “que vayan a comprar a determinado centro de distribución y que no compren en la competencia”.
Luego retomó la palabra el ministro Heber, quien aprovechó la oportunidad para “reconocer públicamente la figura de la fiscal [de Estupefacientes] Mónica Ferrero, que ha sido una gran colaboradora y ha sido impulsora y dirigido muchas de las investigaciones” en la materia, y recordó que le pidió presupuesto al presidente para “la creación de otra fiscalía” de las mismas características, porque los funcionarios actuales “están llenos de trabajo”.
Después mencionó la primera pregunta que le había hecho Rubio, que era si consideraba que se han cumplido los compromisos programáticos asumidos en la campaña electoral, y respondió que “no” porque “falta mucho más”. “No creo que se hayan cumplido los compromisos, creo que vamos en el buen camino”, a pesar del “mal mayo”, evaluó.
“Un mundo paralelo”
Durante un cuarto intermedio que hubo sobre el mediodía, Rubio dio una rueda de prensa en la que dijo que Heber tuvo “una actitud negacionista” durante su presentación. A su entender, el gobierno y el FA ven “realidades totalmente diferentes”, y en este sentido, cuestionó que Heber percibe “un mundo paralelo”.
Con respecto a las cifras expuestas por Heber, Rubio reconoció que “es posible que fueran peores” los números del gobierno del FA, o “que hubiera un pico en ese momento”, pero “en realidad hubo una tendencia que arranca en el año 89 tanto en homicidios, como en hurtos, como en rapiñas, y no paró de subir”. “Si usted compara con el pico que hubo en determinado momento, le da que tuvo resultados importantes, pero en realidad está comparando con el momento más alto [los últimos años de la anterior administración], no con el promedio; y segundo, no está teniendo en cuenta el efecto de la pandemia en estos años”.
Para Rubio, “tenemos un problema muy pesado que viene de una enorme cantidad de años y que se fue agravando, y donde la droga sin duda fue un acelerador”, y sentenció que “eso requiere políticas públicas integradas con mucha inversión en los sectores más deprimidos y donde está la base en la que se crea la situación”. Estos proyectos permitirían una salida “a toda la gurisada que viene de varias generaciones de familias que tienen prácticas delictivas”. Para ello, aseguró que “tienen que intervenir otros ministerios”, porque “si se tiene una visión exclusivamente policial y centrada en las bocas de pasta base” se estará “siempre en el mismo problema”.
Del “fracaso” al “corredor olímpico”
Tras el cuarto intermedio del mediodía, senadores del oficialismo y la oposición intercambiaron posiciones en un tono más elevado, al nivel de una interpelación. El primero en tomar la palabra fue el frenteamplista Mario Bergara, quien aseguró que “la actual política no está dando resultados, está fracasando”, y que “el tratamiento de este tema requiere de compromiso y de mesura”, ya que “lo que está en juego es la vida y la seguridad de las personas y el goce de los derechos individuales y colectivos”.
“Lamentablemente quienes hoy gobiernan no supieron diferenciar la campaña electoral de la acción gubernativa y siguieron de largo con el casete puesto. No estuvieron ni están, en nuestra opinión, a la altura del enorme desafío que asumieron. Han dedicado más energía a echarle todas las culpas al FA que a entender las causas profundas de la inseguridad y sus nuevos desarrollos”, dijo.
Luego, habló sobre cifras: “En los cinco meses de este año se produjeron 171 homicidios; esto implicó un crecimiento de 46% en relación con el mismo período de 2021, pero también supera en 17% y en 9,6% los registros de 2019 y 2020. Es decir, incluso contra el registro de cuando no teníamos ni LUC [ley de urgente consideración] ni pandemia, estamos peor”. “Señor ministro, su política está fracasando, tome nota de la realidad y corrija el rumbo”, concluyó Bergara.
Por su parte, el nacionalista Jorge Gandini dijo que la sesión debió haber terminado luego de la exposición de las autoridades del MI, porque “fue tan contundente, tan sólido y tan explícito entre la sesión abierta y la secreta” que “dio suficientes respuestas a todas las interrogantes”. No obstante, dijo tener “cierta frustración” porque había “un diálogo de sordos” en el Parlamento. “Después de todo lo que se ha explicado, el senador interpelante salió a la prensa y dijo que el ministro vive en un mundo paralelo, como si no hubiera escuchado nada”, manifestó. En referencia a Bergara, señaló que hizo “una exposición que leyó completamente, o sea, que preparó antes de escuchar al ministro”.
Por otro lado, Gandini dijo que “el primer punto” del plan del gobierno “fue confiar en la Policía” y que ese “fue el quiebre, el clic”. “Dejaron de ser sospechosos los policías. Los delincuentes pasaron a ser delincuentes y la Policía, los defensores del orden público”, agregó.
Ante estas aseveraciones desde el PN, así como ante las del senador Sergio Botana, hubo legisladores del FA que pidieron la palabra para reprochar el mensaje de que su fuerza política no respaldó a la Policía, y recordaron las mejoras salariales y de equipamiento durante los últimos gobiernos.
Gandini también criticó a la anterior administración, principalmente al exministro del Interior: “[Eduardo] Bonomi batía cada año su récord, como un corredor olímpico. Cada año había más hurtos, más rapiñas, más violencia doméstica, más abigeatos y más asesinatos. Eso ha ido cayendo, es objetivo, no se puede discutir: hoy hay menos hurtos, menos rapiñas, menos violencia, menos abigeatos. ¿Hay más asesinatos en este último mes? Sí, pero no se puede juzgar por eso”.
Idas y vueltas por la pandemia
Otro de los frenteamplistas que tomó la palabra fue el senador Óscar Andrade, quien dijo que entre el oficialismo y la oposición existe “una diferencia enorme con respecto a la valoración de los delitos y la pandemia”. “En Uruguay durante 20 meses no hubo un solo incidente en las tribunas de los estadios porque no hubo fútbol, y no hubo incidentes en los conciertos porque no hubo conciertos, y no hubo incidentes en cumpleaños de 15 porque no hubo cumpleaños de 15, y hubo 3.800.000 personas [refiriéndose a los turistas] que no ingresaron a Uruguay y no fueron robadas acá”, dijo. En referencia a quienes hicieron teletrabajo, agregó: “El auto lo tenían en el garaje, difícilmente les robaran el auto”.
Andrade aseguró que estas son cosas de “abrumador sentido común”, pero “para la opinión de las autoridades, los datos de los delitos tenían que ver con pura gestión”. Sin embargo, aseguró que “es un absurdo pensar que antes estaba todo bien y ahora está todo mal, lo mismo al revés, maniqueo, no nos ayuda en la discusión”.
Ante la insistencia del FA en la valoración de la baja de delitos en pandemia, Heber manifestó sobre el final de la sesión: “Nos oponemos a que se siga discutiendo en blanco sobre negro. Aquellos dicen que no hay ningún mérito de la Policía, todo por la pandemia, y los otros que no incidió la pandemia y es todo apoyo moral y político a la Policía. Ni una cosa ni la otra”. Planteó que “la pandemia sí incidió” y que “nunca” dijo “lo contrario”, pero con eso no saca “méritos al movimiento policial, porque ahí sí nos empezamos a enfrentar gratuitamente”, expresó acerca de la postura del FA.
Heber añadió que “el dinamismo de la Policía ha seguido pospandemia, abatiendo el delito, porque siguió [la caída] en rapiñas, hurtos y también en homicidios, aunque en algunos meses lamentablemente ha crecido, como en mayo”. Nuevamente acerca de la incidencia de la pandemia, subrayó que “incidió, pero no en todas las cifras, porque hay una nueva estrategia; no desmontamos lo que se hizo antes, hay otra versión, una evolución”.
Manini: “números inaceptables” y “manzanas podridas”
A su turno, el senador de Cabildo Abierto Guido Manini Ríos expresó: “Los números actuales del delito son sencillamente inaceptables”. Igualmente, matizó al decir que “los números de delitos anteriores a esta administración eran mucho peores”. “Pero todos ellos son inaceptables y hay que trabajar muchísimo para mejorar esa realidad”, indicó.
En esa línea, dijo que la sesión tenía “algo de surrealismo” porque “aquellos que indudablemente fracasaron estrepitosamente en la conducción de seguridad en los tres períodos de gobierno que tuvieron, con las mayorías parlamentarias necesarias para implementar los cambios que quisieran, hoy se erigen poco menos que como instructores, como profesores de lo que hay que hacer para cambiar una realidad que realmente es compleja”.
El líder cabildante consideró que “ha habido una secuencia de políticas equivocadas” en seguridad pública que “viene seguramente de antes de los gobiernos frenteamplistas”, y expresó que en su partido “a veces no coinciden” con “lo que se está haciendo” hoy día. Sobre este aspecto, consideró que “hay que hacer cambios en los protocolos carcelarios” y que “los presos deben trabajar todos, obligatoriamente”. Por último, dijo que se debe crear “una cárcel de máxima seguridad en la cual estén recluidas en condiciones de aislamiento aquellas manzanas podridas que pudren al cajón”.
Argimón a Della Ventura: “Usted es una atrevida”
Durante la discusión parlamentaria hubo varios cruces entre legisladores. Uno de los destacados tuvo como protagonistas a la frenteamplista Amanda Della Ventura y la nacionalista Beatriz Argimón, vicepresidenta y quien preside las sesiones del Senado. Cuando la opositora hablaba acerca de los femicidios, Argimón la interrumpió para decirle que estaba fuera de tema. “¿Quiere que le repita por qué estamos acá?”, le dijo la vicepresidenta. “¿Usted quiere decir, señora presidenta...?”, comenzó a responder Della Ventura, a lo que Argimón se le adelantó: “Ojo con lo que va a decirme”. “La pregunta es para todos, si matar a mujeres no son homicidios”, retrucó Della Ventura. Esa consulta provocó la ira de la vicepresidenta: “Usted es una atrevida, disculpe que se lo diga. No me falte el respeto y respete mi trayectoria. Siga con lo que tiene que decir y esté dentro del tema”.