Esta semana se comenzaron a dar los primeros movimientos tras el ingreso del proyecto de ley de Rendición de Cuentas enviado por el Poder Ejecutivo al Parlamento. Este martes la bancada de diputados del Frente Amplio (FA) se reunió con el presidente de la fuerza política, Fernando Pereira, para discutir los puntos del proyecto que preocupan a la oposición y “cómo diagramar e informar la postura política sobre los contenidos”, según dijo a la diaria el coordinador de la bancada, Gustavo Olmos.
En líneas generales, los diputados frenteamplistas entienden que es “una Rendición de Cuentas que no da respuestas a un plan de reactivación” y que favorece “a los que ya están siendo beneficiados” mientras no ofrece “soluciones para los que han perdido el salario real”.
Según Olmos -y según un documento elaborado por los representantes del FA-, el gobierno hace un “uso discrecional” de los datos que se aportan. “El gobierno usa el punto de comparación que le conviene de acuerdo al tema; el empleo te lo compara con 2019, pero la pobreza te la compara con 2020”, explicó Olmos. Añadió que el oficialismo “dice que hay 35.000 personas que salieron de la pobreza” y es comparado “con el año 2020”, lo cual “es cierto”, pero al mismo tiempo “oculta que hay 66.000 que en 2019 no estaban”.
Lo mismo sucede con el gasto público, evaluó: “Si comparamos con el año pasado hay un incremento; si lo comparamos con 2019 no hay un incremento, sigue habiendo una ejecución por debajo de la que había y el incremento es menos que lo que el gobierno ahorró el año pasado de acuerdo a su propio criterio”, explicó el diputado.
“En el mejor de los casos el salario real va a ser el mismo que actualmente, cuando la economía va a haber crecido en 5.300 millones de dólares”, entendió el diputado, y sostuvo que en la apropiación de la riqueza generada “no participan los trabajadores, no hay el más mínimo derrame”.
Para Olmos este manejo de las cifras “es funcional al relato del gobierno” en busca de “fortalecer en la ciudadanía la percepción de que está haciendo las cosas bien a pesar de que las encuestas están diciendo que la gente mayoritariamente cree que las cosas están peor”. En el documento, asimismo, se citan encuestas de distintas consultoras respecto de la percepción de la ciudadanía sobre la realidad del país.
Dentro de este relato, según el coordinador de bancada, está también la idea “de que esta es una rendición de cuentas del crecimiento”, cuando en realidad “es una rendición en todo caso de un tímido rebote” en relación a “una realidad en la cual ha habido un recorte importante en áreas del Estado”.
Consultado por los puntos que más preocupan a la oposición, Olmos señaló “la derogación de la ley de medios” por “las implicancias que tiene”, al mismo tiempo que “hay varias medidas que apuntan a beneficiar a quienes no necesitan ser ayudados, o a quienes les está yendo muy bien”, por ejemplo, a “los productores de la industria cárnica”, a quienes “se les permite aumentar la devolución del IVA al gasoil”, y se trata de un sector “que está, tanto en volúmenes como en precios, viviendo un momento de gloria”.
Respecto de las iniciativas contenidas en la rendición que desde el FA comparten, Olmos señaló la introducción del hidrógeno verde como competencia de ANCAP, algo a lo que “hay que ponerle cabeza”.
Otro de los puntos de contacto con el gobierno son “los aumentos a militares y policías”, sostuvo, aunque matizó: “Lo que cuestionamos es la discrecionalidad que le da la rendición al Poder Ejecutivo para decidir a quiénes van, no se define acá que van a la tropa o a quien sea, sino que después el Poder Ejecutivo definirá quiénes se benefician de los aumentos salariales”.
Olmos valoró la instancia con Pereira, y recordó que uno de los puntos de autocrítica del FA tras perder el gobierno fue que “había una insuficiencia en la coordinación de la fuerza política con la bancada parlamentaria”; por lo tanto, “esta visita y participación de la presidencia del FA con la bancada discutiendo un tema relevante apunta a revertir eso”.
“La rendición de las excusas”
“La gente tiene un conjunto de dificultades que se expresan en las encuestas pero también cuando salimos a hablar con los uruguayos”, sostuvo el propio Fernando Pereira en rueda de prensa al salir de la reunión.
Hoy, a causa de que “el gobierno no asumió que tenía que invertir medio punto del PIB”, “100.000 uruguayos cayeron por debajo de la línea de la pobreza, esto fue falta de competencias”, dijo Pereira, y entendió que “no es que en esta crisis sanitaria todos la pasamos igual: hubo un sector de la sociedad que se enriqueció hasta lo absurdo y un sector de la sociedad que se alimenta en ollas populares”.
Además de criticar el manejo de los datos y el poco avance en materia salarial, Pereira marcó como la principal preocupación de la oposición que “se precisan recursos para la educación”, y dijo creer “que no es cierto que no vayan a dar recursos para la Universidad de la República [Udelar] durante la Rendición de Cuentas, no es posible haberle quitado el recurso de las becas y no colocarlo desde el Estado central”, señaló.
Al mismo tiempo, remarcó, a modo de ejemplo, que en el proyecto “se le destinan siete millones de dólares a la Intendencia de Paysandú para construir un edificio de la Universidad”, lo que calificó como “un mamarracho”, por entender que es “favorecer a un intendente departamental para que luego le dé a la Udelar un edificio que lo debería construir la Udelar con su presupuesto propio”.
Para Pereira, esta es “la rendición de las excusas” que busca “generar la idea de que con esto se están resolviendo los problemas del país y la verdad es que, cuando hablás con la gente, le faltan medicamentos, alimentos, salarios, trabajo”. Esos, según el dirigente, “son los temas en los que el gobierno tendría que prestar atención, no en armar un ring de boxeo, pero como el gobierno piensa que la discusión política es un ring de boxeo, entonces parece que dar trompadas es la solución”.
“El FA no se va a dejar llevar a empujones, ni a insultos ni a descalificaciones, cada noticia falsa la va a denunciar, le guste o no al gobierno”, agregó, y sostuvo que “para que haya diálogo siempre el gobierno tiene que ser respetuoso con la fuerza política más importante del país”.
Vacunas y pedidos de amparo
Consultado por el pedido del juez Alejandro Recarey para que el gobierno de respuestas sobre la compra y los resultados de las vacunas de Pfizer que importó durante la pandemia, Pereira aseguró que el FA siempre “exhortó a vacunarse” y no están “arrepentidos”.
Sin embargo, “si hay que dar información hay que darla toda, ¿por qué vamos a tener información guardada?”, se preguntó. “Parto de la base de que, en cierta medida, que el sistema político en su conjunto haya exhortado a vacunar es responsabilidad con el Uruguay, y esto fue no por voluntad de los partidos políticos sino porque nuestros asesores nos decían que esta era la mejor opción”, añadió, pero entendió que “si hay confidencialidad habrá que trabajarla de otra manera”.