La anunciada reunión entre los líderes de los partidos con representación parlamentaria se dio este martes en el Palacio Legislativo con el objetivo de incentivar el “diálogo democrático”, según el presidente del Frente Amplio (FA), Fernando Pereira, para así fomentar los encuentros interpartidarios y limar asperezas luego de meses que han estado caracterizados por la tensión en los cruces entre dirigentes del gobierno y la oposición.

El encuentro, impulsado por el FA, convocó al secretario general del Partido Colorado (PC), Julio María Sanguinetti; al presidente del Directorio del Partido Nacional (PN), Pablo Iturralde; al presidente de Cabildo Abierto (CA), Guillermo Domenech, y al líder del Partido Independiente (PI), el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres.

“Todos comprendemos que vivimos en una democracia plena, que supone un diálogo interpartidario profundo”, sostuvo Pereira luego del encuentro. De acuerdo al dirigente, los líderes de los partidos entienden que estas instancias son “la forma de avanzar en dirección a que no sucedan cosas que suceden en otros países de América Latina”, y así “evitar agravios y descalificaciones” en el intercambio político.

Esto, sin embargo, no supone “evitar ni las diferencias, ni las críticas, ni los apoyos, ni la falta de apoyos”, sino que “el debate democrático se conduzca dentro de los canales en los que se ha conducido en la última etapa histórica del Uruguay”, sin “pasar determinadas líneas”.

De todas formas, Pereira aclaró que “este no es un ámbito que venga a sustituir al Parlamento”, que va “a seguir su vida”, mientras que “las organizaciones políticas” harán lo propio, “pero en el caso de que se entienda que se están pasando líneas que rompan la convivencia democrática”, que los partidos tengan este “ámbito” y la certeza de que “se pueda convocar con comodidad”.

Pereira dijo entender que se está “en un momento de alta judicialización de la política”, y si bien consideró que “no quiere decir que la justicia no tenga que entrar en determinadas oportunidades cuando se cree que se han cometido delitos” dentro de la política, “hacer de la justicia la forma de laudar los conflictos entre partidos es un dato negativo en el que hay que trabajar”, reflexionó.

Iturralde valoró la “actitud” de Pereira y espera que “se pueda sostener en el tiempo”

Aunque mencionó las rispideces que se generaron luego del balotaje de 2019 y recordó los caceroleos que se dieron al inicio de la pandemia, a instancias del FA y del PIT-CNT, Iturralde valoró la “actitud” de Pereira en convocar a todos los partidos para este cónclave, que calificó como “nueva y positiva” y dijo que espera que “se pueda sostener en el tiempo”. Entre sus críticas, también trajo a colación los incidentes que se dieron en el Cerro, tanto en la campaña por el referéndum contra la LUC como contra el presidente de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Robert Silva.

Parafraseando al histórico dirigente Hugo Batalla, el blanco expuso que “todos somos culpables y responsables” de las crispaciones. “A veces todos levantan el nivel de enfrentamiento pero lo que parece claro es que tenemos que contribuir entre todos” en evitar eso, indicó. “Tenemos que tratar de tener un discurso conciliador y que tengamos claro que la democracia es reconocer que el otro puede tener razón, es aceptar que el otro ganó. Me voy contento porque lo que se plantea en el FA es una actitud que me conforta mucho”, expresó.

Con relación a las intervenciones de los senadores nacionalistas Graciela Bianchi y Sebastián da Silva, que Pereira anteriormente cuestionó, Iturralde sostuvo que “el PN es un partido de hombres libres y todos pueden comunicar sus puntos de vista”, no obstante lo cual dijo que se habla “mucho” al respecto: “nos damos nuestras opiniones sobre lo que opina uno y opina el otro. Eso es importante hacerlo y siempre lo hacemos”.

Precisamente, Iturralde señaló que este lunes habló con Bianchi sobre la reunión que tendría lugar hoy: “Las formas y los agravios son parte de las cosas que nosotros hablamos permanentemente”, añadió.

Sanguinetti condenó los “excesos gremiales” en el ámbito educativo

Para Sanguinetti la instancia de hoy fue “esencialmente un diálogo” entre partidos, y ese fue “el espíritu” con el que el expresidente de la República asistió a la reunión, en el entendido de que desde las “militancias” y las distintas “perspectivas” se puede contribuir a mejorar la calidad del debate de ideas.

Según Sanguinetti, la crispación política se ha visto reflejada “en algunos episodios”, fundamentalmente “los notorios excesos gremiales en el territorio de la educación, que si bien no son del ámbito estrictamente político son la consecuencia natural del debate político”. Para el dirigente colorado son episodios que se deben “aislar para que no distorsionen el debate político”, y citó el ejemplo de las pintadas en la casa de Robert Silva: “pintar la casa de un jerarca es algo muy grave, desde el punto de vista simbólico e institucional”, evaluó, y en ese sentido sostuvo que los partidos políticos deben “tratar de evitar que esos procesos de radicalización perturben la vida democrática”.

En tanto, en el Parlamento “el debate debe tratar de no personalizarse, de no ir al ataque personal, y hay episodios que han ocurrido de un lado y de otro”, opinó Sanguinetti. En esa línea, dijo que la reunión de este martes debe funcionar como “una pausa, de algún modo una exhortación a un debate lo más elevado posible”.

Lo que no tiene una pausa, sin embargo, son las redes sociales, donde se ha acusado a legisladores de difundir noticias falsas para alimentar la discusión. En ese sentido, Sanguinetti entendió que “las nuevas tecnologías son una herramienta poderosa tanto para el bien como para el mal”, y como ejemplo de las “falsedades” distribuidas en las redes mencionó “el debate de la LUC, por ejemplo, cuando se dijo que se privatizaba la educación”.

Domenech pidió no generar las “condiciones” que dieron lugar a la “guerra” en Uruguay hace medio siglo

Por su lado, Domenech dijo que “afortunadamente” Uruguay continúa transitando por un camino “donde los líderes políticos, los partidos, pueden sentarse alrededor de una mesa a discutir los problemas del momento, cosa que no es común dentro del concierto particularmente americano”.

En ese sentido, expuso que en el país sigue habiendo partidos políticos que, aunque defensores de sus ideas, son capaces de dialogar, lo que “contribuye a generar en el debate político una controversia de ideas sin bajar al campo del agravio personal, que es lo que ha practicado durante estos dos años y medio CA, [que] en ningún momento ha llevado la contienda política al campo de las diferencias personales”.

Asimismo, hizo referencia a la “guerra” que vivió Uruguay “muy recientemente”, y pidió no generar las “condiciones que dieron lugar a enfrentamientos de ese tipo en la década del 60 y del 70, mucho menos rebajemos la posibilidad de la confrontación política al terreno del agravio personal. Debemos evitarlo de toda forma”.

Para Mieres, las “salidas de tono” se dan en “la cúpula política”

Mieres, en tanto, indicó que un sistema político “fuerte” se logra con partidos “fuertes”, y sostuvo que tener la capacidad de dialogar para “evitar procesos de escalamiento y de situaciones de confrontación” es “bueno”. Personalmente, consideró que “el clima social, la ciudadanía”, a diferencia del “micromundo de las redes sociales, es de tranquilidad, muy lejos de cualquier grieta”, y planteó que es en “la cúpula política” donde quizá “hay salidas de tono”.

Según el ministro de Trabajo, “siempre” hay momentos donde “la cosa se pone tensa”. A modo de ejemplo, dijo que en el Senado hubo “momentos difíciles” cuando se puso en marcha la investigadora sobre Ancap: “hubo momentos de confrontación y tampoco ahí había ninguna amenaza a la democracia”, pero “nunca está de más generar este tipo de gestos que ayudan a fortalecer los valores que Uruguay ha cultivado y tiene que seguir cultivando”.

CA se desligó de responsabilidad por la falta de avances en la ley de financiamiento de los partidos

Sobre el proyecto de ley sobre financiamiento de los partidos políticos, que está a estudio de una comisión especial en la cámara baja, Iturralde dijo que lo ven con buenos ojos, pero como contrapartida pidió también trabajar "por el consenso" la reforma de la seguridad social. "No se puede decir que lo resuelva el gobierno, son cosas importantes para los consensos políticos", expresó.

Por su parte, Pereira dijo estar “bastante preocupado” por el tema y llamó a “encontrar acuerdos entre los partidos”, puesto que el tiempo “es relativamente limitado” ya que será “difícil debatirlo cuando empieza una campaña”.

Sanguinetti, en tanto, confirmó que “se habló de la ley” en esta instancia y que los partidos están “empeñados en lograr el mejor acuerdo” para generar “instrumentos que tienen que contribuir a la transparencia de la vida política”.

Según ha trascendido, este proyecto está aún trancado porque CA no dará los votos hasta no se conforme la nueva integración de la Corte Electoral donde, según el resultado de la última elección, correspondería que el partido liderado por Guido Manini Ríos debería tener un ministro y el PC perder uno de los dos que tiene.

Domenech descartó esto, y explicó que CA “incluso hasta por razones del número de representantes” no puede “trabar ninguna iniciativa”, y marcó que la discusión sobre el proyecto pasa por “si el financiamiento de los partidos políticos tiene que ser un financiamiento exclusivamente estatal o debe aceptarse también que haya total o parcialmente un financiamiento privado, ahí está la gran diferencia de ideas entre los partidos”.

“Nosotros no negociamos cargos por principios”, sentenció Domenech, y aseguró que CA ha “tolerado” que “la Corte Electoral tenga una integración que consideramos no es democrática porque no representa el espectro político tal como el resultado de la última elección”, y que si bien “no es responsabilidad de CA que eso haya sucedido”, no tienen “atada” su representación en la Corte “a la aprobación de la ley de financiamiento”.