Luego de ser aprobada en el Senado, la Rendición de Cuentas entrará este miércoles a la Comisión de Presupuestos integrada con Hacienda de la cámara baja, donde fue tratada en primera instancia. En esta etapa los diputados no podrán incorporar modificaciones, sino simplemente aceptar o rechazar los cambios que se le hicieron al proyecto en el Senado, y luego pasará al plenario de la cámara baja, con igual restricción, para quedar aprobado definitivamente.

En el plenario de Diputados el proyecto fue aprobado con 521 artículos, y en el Senado terminó con 666, es decir, 145 más. Entre los cambios implementados a la Rendición de Cuentas en el Senado, el más sonado fue el propuesto por Cabildo Abierto que prohíbe que exfiscales de Corte y letrados penales ejerzan la abogacía por un tiempo luego de su cese. El artículo en un principio fue el 630 y con los agregados pasó a ser el 636.

Allí se establece que “el fiscal de Corte y procurador general de la Nación y el fiscal adjunto de Corte estarán inhibidos por tres años, desde su cese, de intervenir en asuntos tramitados ante los organismos en los que cumplieron funciones, patrocinando o asistiendo a terceros”. En el caso de los fiscales letrados con competencia en materia penal, “estarán inhibidos por un año” desde su cese.

A su vez, luego de varios cambios, se estableció que los fiscales comprendidos en el artículo “que no hubieren configurado causal jubilatoria anticipada al momento de la desvinculación de sus cargos tendrán derecho a percibir por el tiempo de la inhibición un subsidio equivalente al 85% del total de haberes del cargo en actividad”.

El diputado y catedrático de derecho constitucional Eduardo Lust –excabildante– ya había adelantado que no votará este artículo cuando vuelva a la cámara baja, porque entiende que es inconstitucional.