Respecto del nuevo impuesto que propuso la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, para reemplazar la tasa de inflamables en los combustibles, recientemente declarada inconstitucional por la Suprema Corte de Justicia, Lacalle Pou opinó que se trata de “un impuesto traído de los pelos”. Advirtió que el artículo 300 de la Constitución de la República “le permite al Poder Ejecutivo, en un plazo bastante breve, presentar un recurso ante el Parlamento, justamente cuando entiende que alguna norma, en este caso tributaria, afecta a la población y carece de sentido”.
El artículo 300 establece que “el Poder Ejecutivo podrá apelar ante la Cámara de Representantes dentro de los 15 días de publicados en el Diario Oficial, fundándose en razones de interés general, los decretos de los gobiernos departamentales que crean o modifican impuestos”. Una vez presentada, la apelación del gobierno nacional “tendrá efecto suspensivo”.
Si bien aclaró que por el momento sólo es “un ejercicio imaginario”, dado que el nuevo impuesto todavía no fue aprobado por la Junta Departamental de Montevideo, donde el Frente Amplio tiene mayoría, sostuvo que, en caso de aprobarse, “tenemos la herramienta” y “la vamos a aplicar por sentido jurídico”.
Según Lacalle Pou, el impuesto -según Cosse, de 0,20 centésimo de peso- “va a contramano” de la política del Poder Ejecutivo en torno a los precios de los combustibles. “Esto va a contramano. El gobierno baja impuestos y la Intendencia de Montevideo sube impuestos”, manifestó.