En Montevideo Music Box suele haber recitales, pero en la noche del miércoles, si bien sonaron bombos, platillos y algo de barullo, el recinto fue la sede de un acto de la lista 404 (Aire Fresco) del Partido Nacional (PN), fundada y liderada por el hoy presidente Luis Lacalle Pou. En el evento hicieron uso de la palabra el ministro de Desarrollo Social, Martín Lema, y el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, posible precandidato a la presidencia –aunque no lo hizo oficial, sus principales dirigentes ya lo dan por hecho–.

“En la política es difícil tener amigos; sin embargo, la 404 es un grupo de amigos, y los amigos de los amigos de los amigos”, dijo la senadora Graciela Bianchi, en una especie de ida y vuelta cortito en el que pasaron varios dirigentes al escenario, antes de que el evento empezara oficialmente.

Más adelante habló Lema, durante casi 20 minutos. Subrayó que el gobierno es “valiente, pragmático y humanista”, y dijo que así fue que abordó la pandemia, “con esa voluntad de construcción de identidad país basada en la libertad”. Luego dijo que el gobierno, ante la crisis hídrica, también fue “pragmático”, porque tomó medidas “para la población en general”, como la exoneración impositiva del agua embotellada, “y también suministró y garantizó la compra de más de 66 millones de litros de agua para poblaciones vulnerables que podían llegar a tener dificultades de acceso”.

El ministro agregó que “hay ganas de seguir construyendo país” y “hay equipo” para hacerlo. Además, destacó a Delgado porque “es extraordinario cómo hace funcionar una cantidad de aspectos de gobierno, pero aparte con luz propia, con sus características, con su forma y su tenacidad”. Lema también dijo que Delgado “es un gran generador de puntos de encuentro y de un Uruguay unido”.

Calentando los motores de la campaña

Al final, llegó el turno de Delgado, quien señaló que es un momento que aún no es electoral pero “ya todo el mundo empieza a calentar motores”, subrayó que la 404 está cumpliendo 15 años “y es la columna central del PN y del gobierno”. Entre todos los agradecimientos para los dirigentes que asistieron al evento, Delgado nombró a los exfrenteamplistas Darío Pérez y Valeria Ripoll, que estaban sentados en primera fila. Mirando a Ripoll, Delgado dijo que “tomó una decisión muy valiente”, de militar y tratar de “incidir desde el PN”.

Más adelante, Delgado se metió de lleno en el discurso político. “Es increíble, ¿no? Pero este gobierno en tres años y medio tuvo cinco crisis: la pandemia, la guerra de Ucrania y Rusia, que elevó el precio del petróleo, la sequía en el verano, la sequía en el invierno, la crisis hídrica y la situación cambiaria en Argentina... vaya el efecto que genera, particularmente en el litoral. Y para todas estas situaciones el gobierno y el presidente tuvieron tres actitudes: primero, dar la cara. Miren que en el mundo hay muchos que cuando vienen las crisis se esconden y nombran voceros”, sostuvo.

Delgado agregó que él o el presidente Lacalle Pou “todos los días” salían a la televisión “a decirle la verdad a la gente; lo bueno y lo malo, pero la verdad”. Sostuvo que eso les generó “un crédito importante de credibilidad, que es lo más importante que tenés que generar con la gente cuando estás gobernando”. Luego subrayó “la valentía” que tuvo el gobierno y también “la necesidad por hacer”, porque en el mundo “varios gobiernos utilizaron la pandemia como excusa para no hacer lo que había que hacer o para subir impuestos”.

“Acá, nosotros tratamos la pandemia, hicimos lo que había que hacer y además bajamos impuestos”, dijo, y se ganó una de las tantas oleadas de aplausos de la noche.

El secretario de Presidencia señaló que le interesa decirlo en esos términos porque el 1º de marzo de 2020 el actual gobierno no recibió “un país floreciente”, ya que “después de 15 años de viento de cola, de mayoría propia y de bonanza económica” de las tres administraciones del Frente Amplio (FA) recibieron un país “con el déficit fiscal más alto en los últimos 30 años”, además de “una inflación y deuda crecientes”. “Con Rodrigo Ferrés [prosecretario de Presidencia, presente en el acto] nos tocó hacer la transición con el equipo que se iba, y en la medida en que íbamos viendo la realidad, los números, a uno le iba preocupando el país que venía, pero era el momento de hacerse cargo; la gente nos votó para hacernos cargo”, subrayó.

Preguntas y más preguntas

Delgado les preguntó a los presentes si alguna vez pensaron “cómo hubiera sido el Uruguay de estos tiempos si en estas cinco crisis en vez de estar un gobierno del PN, encabezado por Lacalle Pou, con una coalición de gobierno, hubiera estado gobernando el FA”. “Esa es la pregunta que nos tenemos que hacer, porque ante el viento de cola es más fácil gobernar, uno tiene plata y distribuye, pero el problema es cuando empezás a batallar con enemigos invisibles como la pandemia. Pero aun así, hicimos lo que había que hacer”, insistió.

Además, hizo énfasis en que el gobierno “ordenó la casa”, que es “un concepto mucho más grande que económico, porque quiere decir ser humanamente eficiente”. “Ser creíbles y responsables en lo económico, generar crecimiento, pero a su vez con equidad y protección social”, sostuvo.

Finalizando su discurso, Delgado dijo que “a partir del crecimiento y de poner la casa en orden” se debe ir “al otro proceso, a una agenda de desarrollo, superadora, corrigiendo cosas que hay que corregir, porque no hay que perder nunca la humildad”. “Si hay alguna cosa para corregir, la vamos a corregir. ¿Todo está bien? No, pero todo está mucho mejor. Y en realidad le toca hoy a la oposición, al FA, tener que empezar a responder las preguntas que son naturales: ¿qué va a hacer el FA con el plan Arazatí?; ¿qué va a hacer el FA con el plan Avanzar?; ¿qué va a hacer el FA con las AFAP?; ¿qué va a hacer el FA con la reforma de la seguridad social?; ¿qué va hacer el FA con la parte de la [ley de urgente consideración] LUC que habilita un régimen más rápido de adopciones?; ¿qué va a hacer el FA con la libertad financiera?; ¿qué va hacer el FA con la posibilidad del no huelguista a trabajar si quiere trabajar?”, fueron algunas de las muchas preguntas que hizo Delgado.

Antes de terminar, Delgado les pidió a los militantes de la 404 “que vayan y recorran cada barrio de Montevideo, cada municipio, cada casa, y toquen cada timbre” para contarle a la gente lo que hicieron. “[Para que] Le digan a la gente que lo que prometimos lo cumplimos, a pesar de las excusas que no utilizamos. Y ojalá la gente a la que le hablamos sienta que valió la pena cambiar en 2019 y que vale la pena renovar de nuevo la confianza. Para eso siempre cuenten conmigo”, finalizó.