El intendente de Artigas, Pablo Caram, reconoció y justificó el trabajo infantil en las plantas tabacaleras en el departamento. En entrevista con el programa Desayunos informales, de Canal 12, el jerarca expresó que es “normal” que los niños trabajen en esos lugares: “En el tabaco trabaja el núcleo familiar: el hijo, la nuera, algún nieto, trabajan en el predio”, y opinó que “es mucho mejor ver a un gurí trabajando que con el celular”.

Ante el planteo de los periodistas de que el trabajo infantil constituye una violación a los derechos de niños, niñas y adolescentes, Caram dijo que esa idea “es un defecto”. El intendente se refirió a su experiencia personal y dijo que cuando él era niño y “terminaba las clases”, su padre lo hacía trabajar. “Nunca fue una deshonra y ahora me encanta”, apuntó.

Frente a que los periodistas reiteraron referirse a los derechos de las infancias y a que no deberían trabajar, el intendente consideró que por eso “estamos con una cantidad de gurises drogados, que es lamentable”. “El trabajo dignifica, otra cosa no”, agregó.

Caram sostuvo que los jóvenes que trabajan en las plantas de tabaco tienen “13, 14 o 15 años”. Además, admitió que desconoce si se cumple con la ley, como los permisos del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) y el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. “Hasta ahí no sé. Se ven niños, es normal”, señaló. A su vez, dijo que corresponde a esos organismos comprobar si se cumple con las disposiciones necesarias.

Consultado sobre si es el único lugar donde trabajan niños en Artigas, el intendente señaló que hay casos de productores agropecuarios “que llevan a los hijos”. “El trabajo, al ser escaso, si queda en el núcleo familiar, es mucho mejor”. “Si un gurí travieso agarra y empieza a plantar, ¿le vas a decir que no?”, apuntó.

Ante las declaraciones de Caram, no demoró en haber repercusiones. El senador del Frente Amplio Óscar Andrade se pronunció al respecto en su cuenta de X, ex Twitter. El legislador frenteamplista escribió que en la “villa” donde creció “siempre fue costumbre vieja, no terminabas de dejar la túnica y la moña y ya hacías la cosecha, durazno, uva y manzana. Niños y mujeres cobrabámos la mitad”, y agregó que el lugar de las niñas y niños “no es estibando en una cámara ni en una plantación”. “Vergüenza dan”, expresó.

Por su parte, el ministro del Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, manifestó, a través de su cuenta de X, su “radical rechazo” a las expresiones de Caram, que calificó de “inadmisibles”. Asimismo anunció que, junto con el inspector general del Trabajo y de la Seguridad Social, Tomás Teijeiro, dispuso el envío de un equipo de inspectores de condiciones ambientales de trabajo y de condiciones generales de trabajo, coordinado con el INAU, a los establecimientos de producción de tabaco en Artigas.

En declaraciones para El País, luego del revuelo que generaron sus afirmaciones, Caram ratificó sus dichos. Dijo que se “malinterpretaron” y que hubo “una confusión” que adjudicó al “desconocimiento de la realidad de lo que es el interior profundo”. Sostuvo que “en cualquier grupo de familia de un chacrero los hijos trabajan”. “No me arrepiento. Yo no dije que trabajaban a sueldo, trabajan para ayudar a sus padres y distraerse, en el medio rural no hay mucha actividad”, añadió.