A menos de dos semanas de las elecciones internas, la Mesa Política del Frente Amplio (FA) analizó este lunes si adhiere a la movilización convocada por el PIT-CNT para el próximo jueves 27 de junio. Según supo la diaria, aunque este lunes no definió formalmente su posición, es esperable que en las próximas horas la fuerza política manifieste su adhesión a la movilización de la central sindical.

Por un lado, en el FA están a la espera de que el PIT-CNT defina su plataforma de reivindicaciones, pese a que la central sindical ya adelantó que la manifestación, que incluye un paro parcial de actividades, tendrá como eje central conmemorar la huelga general que llevó adelante el movimiento sindical en rechazo al golpe de Estado del 27 de junio de 1973.

Asimismo, el PIT-CNT se movilizará “en defensa de la democracia y el respeto de los derechos individuales”. La convocatoria se hizo después de que la diaria informara que el exjefe de seguridad presidencial Alejandro Astesiano dispuso, con conocimiento del presidente Luis Lacalle Pou, un seguimiento contra el presidente del PIT-CNT, Marcelo Abdala.

Por otro lado, en el FA está en discusión si “adherir” o “convocar” a la movilización, en el entendido de que la primera opción supone un menor grado de involucramiento. Según supo la diaria, este lunes, antes de la Mesa Política, el Secretariado Ejecutivo del FA también trató el tema y “nadie” propuso no adherir, aunque “hubo un intercambio”.

Una fuente de Asamblea Uruguay comentó a la diaria que existe “preocupación” por la proximidad de la movilización con el cierre de la campaña electoral. De hecho, el FA tiene previsto hacer su último acto político el día anterior, el miércoles 26, en el Palacio Peñarol. En ese sentido, la preocupación está en “los esfuerzos que se puedan poner para convocar en serio para el 27 [de junio]”. No obstante, desde el sector apuntaron que “el FA va a terminar adhiriendo”.

En dos oportunidades, el Secretariado del FA evaluó la posibilidad de que la fuerza política convocase por sí misma a una movilización “en defensa de la democracia y las instituciones”. Pero esa iniciativa, que propuso el Partido Comunista (PCU) y tuvo el apoyo del Partido Socialista, no prosperó porque otros sectores frenteamplistas entendían que el partido no podía “ir más lejos” que la propia central sindical. El Nuevo Espacio también planteó, antes e independientemente de la central sindical, organizar y convocar a una movilización para el 27 de junio.

Juan Castillo, representante del PCU en el Secretariado, dijo a la diaria que el FA “debería sumarse” porque “es importante defender los valores democráticos, [que es] una cosa muy profunda y muy cara para todo el Frente Amplio”. Según Castillo, en lugar de una adhesión a la movilización del PIT-CNT, el sector hubiera “preferido que el Frente Amplio convocara a movilizar”, pero “eso no fue posible”.

Desde el Nuevo Espacio señalaron a la diaria que el sector está a favor de sumarse a la movilización de la central sindical, sobre todo, como una forma de “alertar” sobre el “deterioro institucional”. “Separando una cosa de la otra, porque no es lo mismo un golpe de Estado, pero sí alertando sobre el deterioro institucional y la responsabilidad del Poder Ejecutivo, en particular del presidente de la República, en algo que no es un hecho menor”, señalaron, en referencia al seguimiento de Astesiano a Abdala.

“La desigualdad ha aumentado”

Por otra parte, la Mesa Política del FA recibió este lunes a los economistas Daniel Olesker y Braulio Zelko, quienes informaron directamente al presidente de la fuerza política, Fernando Pereira, y los integrantes de la Mesa Política, sobre los últimos datos sobre desigualdad en Uruguay.

En particular, se trató un informe publicado recientemente por la consultora Exante que marca que durante 2023 el ingreso promedio por hogar se ubicó en 91.000 pesos, aunque con asimetrías según los distintos quintiles. Por ejemplo, en el primer quintil, que constituye el 20% de los hogares más pobres, el ingreso promedio por hogar se ubicó en 27.681 pesos, mientras que, en el otro extremo, en el quinto quintil, se ubicó en 206.045 pesos.

El análisis de Exante concluye que, si bien el poder adquisitivo de los hogares, en conjunto, aumentó con relación a 2019, “el patrón de caída y recuperación fue heterogéneo y sólo los hogares del quintil más alto mostraron en el promedio del año pasado ingresos reales mayores que en 2019”.

“Esto significa que la desigualdad ha aumentado”, resumió Olesker en la rueda de prensa. El exsenador del Partido Socialista dijo que los números revelan un proceso que es “exactamente al revés de lo que había sucedido en los 15 años de gobierno del Frente”, cuando “todos los hogares habían aumentado su ingreso, pero en sentido inverso”. En los hogares de menores ingresos, sostuvo, hubo un incremento proporcionalmente mayor, “reduciendo sustantivamente la desigualdad”.

Olesker dijo que el principal motivo detrás de esto es “la caída del salario real” que se produjo durante el actual período de gobierno. Afirmó que el poder adquisitivo disminuyó tanto en 2021 como en 2022, cuando, en paralelo, existió un “extremo crecimiento económico en el país”.

Este mismo lunes, Pablo Roselli, economista de Exante, señaló en X que no es posible atribuir “de un modo sustancial” los resultados del análisis de la consultora a las políticas económicas, dado que “los hogares se vieron impactados por dos shocks globales”, en referencia a la emergencia sanitaria y “la inflación mundial de 2022”. Además, apuntó que “los ingresos de los hogares habían comenzado a caer en 2017”.

Consultado al respecto, Zelko dijo en la rueda de prensa que “la pandemia evidentemente fue un impacto relevante de escala global”. No obstante, sostuvo que “la mayoría” de los países de la región “lograron mejorar los niveles de pobreza anteriores y lograron cortar un poco con ese salto en la desigualdad que muchos países experimentaron” a causa de la pandemia.

Zelko, que es asesor de Fuerza Renovadora, señaló que “80% de los hogares de menores ingresos todavía mantiene niveles de ingresos a 2019”, y advirtió que, si bien actualmente “estamos en niveles de empleo superiores a la pandemia”, en el último año se ha registrado un “deterioro de la calidad del empleo”.