El presidente de la República, Luis Lacalle Pou, condenó “enérgicamente” los “hechos en desarrollo en Bolivia protagonizados por un sector de sus Fuerzas Armadas, que atentan contra su orden democrático y constitucional”, y expresó su solidaridad con el “legítimo gobierno” del presidente Luis Arce, luego de que integrantes de las fuerzas militares de ese país irrumpieran este miércoles en la casa de gobierno en la capital de ese país, La Paz.

El gobierno de Bolivia denunció en un comunicado las “movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército boliviano, que atentan contra la democracia, la paz y la seguridad del país”, e hizo “un llamado a la comunidad internacional y a la población boliviana a hacer respetar los valores democráticos y respaldar al gobierno, constitucional y legítimamente elegido por la voluntad soberana del pueblo boliviano”.

Desde la cancillería uruguaya emitieron un comunicado en el que señalan que Uruguay condena “enérgicamente los intentos de desestabilización democrática e institucional producidos en Bolivia y apela a respetar el orden constitucional establecido legítimamente en ese país”.

Asimismo, el Ministerio de Relaciones Exteriores recordó “la obligación de las instituciones del Estado al respeto irrestricto de los compromisos asumidos en el ámbito interamericano relativos a la defensa de la democracia y la vigencia del Estado de Derecho”.

Las tropas tumbaron una puerta del palacio presidencial y tanquetas ocuparon la plaza Murillo, en el centro de la capital. Juan José Zúñiga, comandante del Ejército boliviano, había dicho que detendría al expresidente Evo Morales, quien supo ser aliado de Arce y hoy es rival político dentro del oficialismo, en caso de que insista en postularse a la presidencia en 2025.

Según consignó el medio boliviano Los Tiempos, Zúñiga dijo a la prensa que “va a haber un nuevo gabinete”: “Se va a cambiar ministros, pero no puede seguir así nuestro Estado, haciendo lo que le da la gana. Estamos mostrando nuestra molestia, es deber, obligación que sus Fuerzas Armadas otra vez recuperen esta patria, basta de empobrecer la patria y humillar al Ejército”.

En tanto, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), el excanciller uruguayo Luis Almagro, afirmó que no tolerará “ninguna forma de quebrantamiento del orden constitucional legítimo en Bolivia”. “La Secretaría General de la OEA condena de la forma más enérgica estas acciones del Ejército boliviano, el mismo deberá someterse a la autoridad civil como manda la Carta Democrática Interamericana”, apuntó el jerarca, y expresó su “solidaridad” con el presidente de Bolivia.