Mientras se discute el proyecto de ley de eutanasia en la Cámara de Senadores para su aprobación, la consultora Nómade publicó este miércoles una encuesta sobre las percepciones ciudadanas en torno a la eutanasia, realizada entre finales de setiembre y principios de octubre de este año, con 1.216 personas consultadas.

El informe constata que el 65,4% de las personas encuestadas expresó que está a favor del proyecto de eutanasia, mientras que el 13,4% mostró una postura de desacuerdo y el 14% se mantiene neutral.

En cuanto a la orientación política, Nómade tomó el voto del último balotaje presidencial y reveló que entre quienes eligieron la fórmula del Frente Amplio, Yamandú Orsi-Carolina Cosse, el 78,3% está de acuerdo con el proyecto, frente al 52,5% de la fórmula del Partido Nacional, Álvaro Delgado-Valeria Ripoll.

Otro aspecto que le consultaron a las personas encuestadas fue sobre el conocimiento del proyecto de ley, en el cual también se mostró que la mayoría sabía sobre la iniciativa, con el 78,8%. En cambio, el 21,2% declaró desconocer el proyecto de ley.

Nómade observó que la pregunta sobre el conocimiento del proyecto presentó particularidades. El rango etario de 35 a 59 años mostró un conocimiento mayor, con el 85,2%, y una mínima diferencia se observó en las personas mayores de 60 años, con el 85,2%. Los jóvenes de 18 a 34 años mostraron un conocimiento inferior, con 64,7%. Asimismo, respecto a los niveles de acuerdo con el proyecto por tramos etarios, se vio que el apoyo disminuye en tramos de mayor edad.

Respecto al lugar de residencia, Montevideo fue la zona en la que la población estaba más informada sobre el proyecto de ley, frente a quienes viven en el interior del país. El desconocimiento en el interior es de 26,5%, mientras que en Montevideo es de 14,1%.

Además, Nómade analizó argumentos a favor y en contra de la iniciativa: quienes la respaldan se orientan a “los valores relacionados con la libertad individual, la posibilidad de elección y la empatía hacia el sufrimiento ajeno”, mientras que quienes respondieron estar en contra manifestaron preocupación por el “mal uso” o excesos que puedan darse en el marco de la ley.