El ministro de Relaciones Exteriores, Mario Lubetkin, volvió a referirse este jueves a la reunión que mantuvo el martes con su par argentino, Pablo Quirno. Ambos cancilleres conversaron sobre las recientes protestas en Colón, provincia de Entre Ríos, por la posible instalación de la planta de hidrógeno verde de la empresa HIF Global en Paysandú, limítrofe con la ciudad argentina.

En una rueda de prensa, Lubetkin sostuvo que coincidió con el canciller argentino en la necesidad de evitar un conflicto similar al que tuvieron los entonces presidentes Tabaré Vázquez y Néstor Kirchner por la instalación de la planta de celulosa Botnia (actual UPM). Esto supone que “nunca más pase el bloqueo de puentes”, afirmó el canciller uruguayo.

Según Lubetkin, Quirno planteó que existe “preocupación” entre los ciudadanos de Colón por “lo que ellos llaman ‘ecología visual’”, en el sentido de que el proyecto en consideración pueda “afectar al turismo” de la ciudad argentina.

“Ahora lo que hay que hacer es construir y generar serenidad, porque creo que una buena parte de la información que genera la tensión en nuestros vecinos no es correcta”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores.

Las conversaciones por este tema continuarán en las próximas; se prevé que el canciller argentino haga una visita a Uruguay. “Estamos de puertas abiertas, en el marco de nuestra soberanía y nuestros derechos”, afirmó Lubetkin, y agregó que desde el gobierno uruguayo se están haciendo “las cosas de una forma muy cristalina, muy profesional”.

Nicolás Olivera: “La cordura tiene que primar”

Por su parte, el intendente de Paysandú, el nacionalista Nicolás Olivera, señaló este jueves en una entrevista con Desayunos informales que el proyecto de HIF Global, que fue anunciado por el gobierno anterior, es “la mayor inversión de la historia hasta ahora de Uruguay”.

Con respecto a las protestas que hubo en Colón, Olivera consideró que “es natural lo que está pasando” por “la incertidumbre que puede generar eso”. En cualquier caso, coincidió con Lubetkin en que la situación que se vivió en su momento por la planta de Botnia “estamos llamados a no repetirla nunca más”. “Las cancillerías están haciendo lo suyo, y la cordura tiene que primar”, afirmó.

Sobre el cuestionamiento en torno a la “contaminación visual” que supondría el proyecto de HIF Global, Olivera dijo que “la empresa ha presentado simulaciones y, según lo que dicen, eso se estaría atenuando a partir de cortinas de árboles”, con lo que “quedaría prácticamente anulado ese tema”.

El intendente de Paysandú dijo que en esto “tiene que primar el derecho del pueblo uruguayo, y de los sanduceros, a proveernos bienestar a partir de inversiones que no afecten el medioambiente”, dijo.

Olivera señaló que está previsto que antes de fin de año el Poder Ejecutivo tome algunas decisiones con relación al proyecto. En junio del año que viene, en tanto, la empresa debería hacer el cierre financiero, con los permisos, las autorizaciones y la viabilidad económica del proyecto, para entonces buscar fondos para el proyecto. Se estima que para “2030 deberían estar produciendo”, apuntó el intendente de Paysandú.