Tal como adelantó la diaria, este viernes el Poder Ejecutivo recibió a representantes del consorcio Aguas de Montevideo con el motivo de poner sobre la mesa la posibilidad de renegociación del proyecto Neptuno.
Por el gobierno estuvo el secretario de Presidencia, Alejandro Sánchez; el ministro de Ambiente, Edgardo Ortuño, y el presidente de OSE, Pablo Ferreri. La llegada de todos se vio acompañada por activistas del Foro Intersocial de Acción por el Agua y la Vida, que en protesta contra la planta potabilizadora que se instalaría en Arazatí, San José, golpearon botellas, llevaron carteles y cantaron. Muchos de ellos desde hace 17 días acampan en la plaza Independencia.
El objetivo del gobierno era plantear al consorcio congelar por 90 días la ejecución del proyecto para discutirlo a fondo y llegar a “un acuerdo”. “No tenemos más remedio que entrar a ver cómo alivianamos esas cargas que para nosotros son muy pesadas”, subrayó tras la reunión del primer Consejo de Ministros el presidente, Yamandú Orsi. Ahora, 15 días después, se acordó formalmente con Aguas de Montevideo que durante 90 días quedarán “congelados” los plazos establecidos en el contrato firmado por el anterior gobierno el 23 de enero, dando paso así a su renegociación.
En conferencia de prensa, Sánchez recordó este viernes que el actual Ejecutivo mantiene una “visión crítica” del proyecto, en un escenario donde se entiende clave “trabajar y analizar” distintas posibilidades para “garantizar el abastecimiento de agua potable para la población del área metropolitana de aquí a 2035”. Esta visión a largo plazo, según indicó el secretario de Presidencia, debe partir de una “estrategia” que implica “realizar obras” e “inversiones”.
Con esa visión general y entendiendo que el proyecto Neptuno “no resuelve el problema de fondo”, Sánchez dijo que el congelamiento por 90 días del contrato permite establecer con el consorcio una “mesa de trabajo permanente” donde serán analizados “aspectos jurídicos, aspectos económicos y aspectos técnicos”.
Sánchez resaltó que para el gobierno están arriba de la mesa “todos los escenarios”, entre ellos, que el proyecto “continúe con cambios”, que “no continúe” o que “se realicen otras obras”. En relación con esto último, el secretario de Presidencia reconoció que la represa de Casupá “es una prioridad” para la administración, por lo cual, en este caso “está arriba de la mesa”.
En cuanto a lo que ha sucedido con el aspecto contractual y de cumplimiento de plazos desde el 23 de enero, Sánchez comentó que “no hay ninguna obra que se haya llevado adelante”. Detalló, sin embargo, que, de acuerdo a lo previsto en el “corto plazo” –de no haberse congelado la ejecución del contrato–, deberían “comenzar con algunas acciones de cateo de suelo” para la concreción de algunos de los trabajos planificados.
La situación financiera
Adelantando algunos de los temas centrales de la renegociación, Sánchez dijo que se considera que el modelo de financiamiento del proyecto “es altamente costoso”. En ese sentido, subrayó que se quiere “encontrar una solución que implique otro modelo de financiamiento”. Debe recordarse que está previsto el pago de más de 800 millones de dólares, partiendo de un costo informado por el consorcio proponente que ronda los 250 millones de dólares. La diferencia emerge del interés que se deberá abonar a través de las diferentes entregas establecidas en el plazo de 17 años.
La renegociación del financiamiento del proyecto se llevará adelante en una situación económica de OSE que, según se ha reconocido, es compleja, algo que volvió a resaltar Sánchez. Indicó que se han identificado al momento un “conjunto de dificultades” sobre las que se viene trabajando junto al Ministerio de Economía y Finanza.
Sánchez subrayó que se pretende que OSE “efectivamente pueda cumplir con su función”, pero además “jerarquizar y potenciar” su rol en “los tiempos que corren”. “OSE no puede seguir siendo la cenicienta de las empresas públicas, para nosotros es una empresa muy importante a la cual hay que potenciar con capacidades técnicas, con recursos humanos, y por supuesto, resolviendo sus problemas financieros”, concluyó.
La represa de Casupá
Sánchez dijo que ya se ha “comenzado a trabajar” en el objetivo de construir la represa de Casupá. Recordó que, al asumir, la administración de Luis Lacalle Pou recibió los estudios técnicos para comenzar su construcción, pero “descartó” el proyecto. El secretario de Presidencia informó, por tanto, que se “están actualizando” esos estudios y además el Ministerio de Ambiente se encuentra trabajando en la “aprobación ambiental”.