Según la memoria anual de actividades de la Unidad de Información y Análisis Financiero (UIAF) del Banco Central del Uruguay (BCU) de 2023, que es la última disponible, entre 2019 y 2023 crecieron 18% los reportes de operaciones sospechosas. Se trata de informes que deben hacer el sector financiero y los profesionales cuando detectan transacciones presuntamente ilícitas, y según señala la propia UIAF en su memoria, “permiten desarrollar la tarea de investigación e inteligencia financiera” y son “un componente esencial del sistema nacional de prevención visto en su conjunto”.

Sin embargo, si se desglosa la información, se detecta una fuerte disparidad entre el sector financiero y el no financiero en materia de reportes. Mientras que los reportes del sector financiero crecieron 33% entre 2019 y 2023, los del sector no financiero (que incluye casinos, fundaciones, asociaciones civiles, partidos políticos, contadores, abogados, escribanos, inmobiliarias, entre otros) disminuyeron 46% en el mismo período.

Daniel Espinosa, asesor de la Secretaría Nacional para la Lucha contra el Lavado de Activos y el Financiamiento del Terrorismo (Senaclaft), dijo a la diaria que las autoridades están preocupadas por esta situación y que por ese motivo están manteniendo encuentros con el sector no financiero. Ya se reunieron con representantes de los abogados, de los casinos y de las inmobiliarias, y tienen previsto reunirse con los escribanos después de la Semana de Turismo. Este martes fue el turno del Colegio de Contadores, Economistas y Administradores del Uruguay. Cristina Freire, su presidenta, mantuvo una reunión con la titular de la Senaclaft, Sandra Libonatti, ambas acompañadas por sus equipos.

Según informó el colegio tras el encuentro, los profesionales relataron las capacitaciones que han tenido en esta materia y destacaron que “es importante estar en contacto y continuar trabajando en conjunto”. Libonatti, por su parte, explicó que se estuvo “hablando sobre las inquietudes que desde la Senaclaft tenemos respecto del trabajo que realizan los profesionales contadores, la efectividad del sistema en su conjunto, las dificultades que se les pueden presentar, y hablamos sobre la escasez de reportes de operaciones sospechosas, con el objetivo de conocer cuáles podrían ser las razones de esa situación”.

Espinosa contó que en la reunión se acordó hacer un taller o un conversatorio para analizar las causas de la disminución en los reportes de operaciones sospechosas. “Desde la Senaclaft queremos mejorar eso”, remarcó.