“Es la primera vez que vengo. Es un lugar hermoso y a partir de hoy es mi lugar de trabajo”, dice Miriam Britos pocos minutos después de pisar su despacho en el edificio anexo del Palacio Legislativo. Britos nació en la ciudad de Artigas en 1974, con apenas siete años se subió por primera vez a un escenario a cantar y nunca más paró. Y así seguirá, ya que, incluso ahora que asumió como diputada por Artigas, bajo la bandera del Partido Nacional (PN), los fines de semana continuará presentándose en vivo.

La cantante cuenta que para varios de sus seguidores fue un impacto saber que ahora será diputada: le preguntaron si iba a dejar la música, pero en seguida los tranquilizó. “A muchos, evidentemente, les cayó mal, porque en mi público hay un abanico increíble: colorados, frenteamplistas, del Partido Independiente… Entonces, a muchos les chocó y me lo hicieron saber personalmente. Pero ese fue el primer impacto, después volvió todo a la normalidad, está todo OK”, dice.

Britos integra la lista 2525, del grupo Artigas Adelante, liderado por el exintendente de ese departamento Pablo Caram. Es la suplente del primer titular de la lista, Emiliano Soravilla, que fue electo diputado pero hace una semana renunció a su banca para asumir como intendente de Artigas, luego de ganar en las departamentales de mayo. El despacho de Britos es el que pertenecía a Soravilla, y ahora no quedaba ningún adorno, ni siquiera una amatista tamaño familiar que descansaba sobre el escritorio.

El grupo Artigas Adelante sufrió un cimbronazo luego de que Caram y la exdiputada Valentina dos Santos –su sobrina– fueran condenados por la Justicia en el marco de la causa que investigaba maniobras mediante el cobro de horas extras en el gobierno departamental. Caram tenía la intención de ser candidato a diputado en octubre de 2024, pero tanto a él como a su sobrina la Corte Electoral los inhabilitó a ejercer cargos públicos en el transcurso de sus condenas, por lo tanto, su deseo quedó trunco. Así fue que Soravilla encabezó la lista de la cámara baja. A su vez, el grupo intentó hasta último momento que Dos Santos, ya cumplida su condena, fuera la candidata a la intendencia, pero el directorio blanco mantuvo la inhabilitación para que se presentara bajo el lema del PN. Entonces, Soravilla tomó la posta otra vez y, al ganar, quedó Britos en su banca.

“El tiempo pone a cada cual en su lugar”, cantaba la hoy diputada en “Que te duela”, una de las canciones del disco Explosiva, de 1996, que grabó junto con Grupo Mogambo antes de empezar su carrera solista. El swing que desprende esa canción no pega con las frías paredes de madera de los despachos del anexo. “Vamos a traer algo que haga alusión a lo que tenemos allá”, dice Britos mientras toma contacto con su nueva oficina. Agrega que también deberá conocer a sus compañeros de bancada, porque nunca militó ni estuvo “en la burbuja de la política”. Ya instalada, Britos dialogó con la diaria en su primera entrevista como flamante diputada.

Entraste oficialmente a la política en el segundo semestre de 2024, al integrar una lista del PN. ¿Qué fue lo que te impulsó?

Llegaron a mi casa con la propuesta. Desde hace 40 años mi función es subirme a los escenarios y llevarle alegría a la gente. Siempre dije que los artistas no debíamos involucrarnos en las cosas que generan tanto fanatismo, como la política, la religión y el fútbol; es muy complicado. Siempre fui neutra, creo que eso también fue un poquito la clave del éxito, de haber permanecido tanto y seguir en la música. Pero hoy por hoy, con 51 años, tengo experiencia de vida, y cuando Emiliano llegó con esta propuesta me hizo ruidito en la panza, las famosas maripositas. Lo estudié en familia, porque todo lo hacemos siempre en familia. A partir de ese momento consideré que en la política puedo hacer mucho, es una herramienta muy importante. Entonces, le dije que sí, pero con mucha conciencia, analizando absolutamente todo lo que se podía venir, incluso lo negativo que podía generar en mi carrera artística.

Imagino que se te acercó Soravilla con la propuesta porque ya tenías cierto contacto con los blancos en Artigas.

Artigas es una ciudad muy pequeña, todos nos conocemos. Evidentemente, conozco de toda la vida al equipazo que hay, pero no tenía ningún vínculo con la política. Siempre fui blanca, pertenezco al PN, pero nunca milité ni me involucré.

¿Vas a seguir con la música mientras seas diputada?

Sí. Hubo una dualidad de sentimientos con mis seguidores, con la gente que organiza eventos y con mi familia, pero vamos a poder conciliar todo. Durante la semana, sabemos que vamos a tener que estar por acá, en la capital, y los fines de semana, en los escenarios.

¿Estás analizando algún proyecto de ley que quieras presentar?

Por supuesto que hay muchos proyectos hermosos a los que me gustaría ponerles mucha energía y garra. Por ejemplo, en lo artístico. Las necesidades son las mismas aquí que en cualquier otra parte del mundo. Entonces, nos vamos a dedicar a poner lo mejor para que muchas cosas se puedan llevar a cabo. Los artistas estamos muy desamparados, y hay miles y miles de artistas en Uruguay. En Artigas hay veintipico de bandas, es demasiado para ser un departamento con esa población [77.487 habitantes, según el censo de 2023]. Entonces, desde este lugar me gustaría poder hacer algo por mis colegas.

¿Cuál es el principal problema que se debe solucionar?

Que estemos amparados. Yo, como cantante, durante toda mi vida tuve que aportar [para la jubilación] por otro lado, porque por lo que hago no existe. Entonces, hay que facilitarle la vida a la gente.

Así que aportabas por un trabajo “estándar”.

Totalmente, lo hice durante mucho tiempo: estaba como secretaria en una empresa minera en Artigas; mi esposo y mis cuñados se dedican a eso. Viste que en Artigas nos identifican la piedra, el fútbol y la música.

Comentabas que siempre fuiste blanca. ¿Qué fue lo que te atrajo del PN?

Primero, fue por mi familia, venimos de ahí, es nuestra línea; después, evidentemente, sigo a las personas: si algo me suena bien, por ahí voy. No es que sea fanática, son las personas: lo que hacen, lo que generan y lo que me transmiten.

¿Qué te transmitió Luis Lacalle Pou como presidente?

Prolijidad. Un tipo muy genuino, que hizo mucho por el país. Vuelvo a lo artístico: para salir a trabajar en lo mío hacemos muchos kilómetros en el ómnibus, pero no siempre tuvimos ómnibus, alquilábamos mucho, allá por 2001, cuando arranqué como solista. Este camino nos hizo conocer la realidad de nuestro país, y te puedo decir que existe un antes y un después, si hablamos de la estética del país, y eso, evidentemente, se adjudica todo a la persona de la que me pediste la opinión. Realmente existe un antes y un después, nuestro país está quedando lindo, está muy prolijo, y siento orgullo de ser uruguaya.

¿Lacalle Pou tiene que ser el candidato del PN en 2029?

Por supuesto.

¿Pensás que con él pueden ganar la elección?

Está todo perfilado para que sí, sin lugar a dudas.

En la interna blanca, ya sea públicamente o puertas adentro, algunos le han cargado parte de la culpa de la derrota en el balotaje a Valeria Ripoll, la compañera de fórmula de Álvaro Delgado. ¿Qué pensás al respecto?

Valeria Ripoll es una mujer con mucha fuerza y con un bagaje político increíble. Me transmite que es una mujer auténtica y que sabe mucho de lo que dice y hace. Me parece fantástico que esté en la línea nuestra, me encanta.

¿Cómo viviste todo lo que sucedió con la exdiputada Dos Santos, a quien, luego de cumplir su condena, el PN no dejó presentarse como candidata a la Intendencia de Artigas?

Hubo un laudo judicial... Me da mucha pena todo lo que pasó, porque mi ciudad cambió muchísimo cuando estuvo. Después de que ya no estuvo, quedó una ciudad apagada, oscura, con cero obras, cero todo. Me dio mucha pena porque en Artigas nos conocemos, sabemos quién es quién. Hubo una intención de poder volver, pero tampoco se le permitió, entonces, entró el escribano Emiliano Soravilla, que es fantástico, un tipo increíble.

¿Te considerás feminista?

No, una persona normal. Me gusta resaltar el trabajo de la mujer pero de una forma normal, sin fanatismo, porque el fanatismo no es bueno: te encasilla y dejás de ver la realidad como realmente es. Me gusta que la mujer, cuando hace algo, lo haga de la mejor manera posible para poder brillar y salir adelante, para hacerle ver al mundo que somos capaces de absolutamente todo y que podemos estar a la altura.

¿En el ambiente de la música no sentiste en algún momento que por ser mujer te menospreciaban o quizá tenías menos oportunidades que los hombres?

Cuando grabé profesionalmente por primera vez, en 1988, la música tropical era considerada de clase social baja. Un término que escuché muchas veces fue “música negrera”... En lo personal, nunca lo sentí, porque siempre fui esto que ven, muy genuina y natural. Siempre traté de ir por la vida de una forma muy honesta, haciendo lo que amo. Entonces, desde que tengo conocimiento siempre me han respetado, me gané el cariño de la gente. Te puede gustar o no lo que hago, pero jamás sentí que me hicieran bullying o me despreciaran. Pero soy consciente del género que hago; la cumbia, la charanga, hasta el año 90 y pico se tocaba en boliches, eventos o fiestas privadas de clase media-baja, y en un momento cambió todo, por 1996. Gracias a Dios, el género hizo un giro importante y la música tropical se empezó a ver con otros ojos, y empezamos a llegar a otros lugares en los que nunca antes se había tocado. Hoy por hoy estamos en los mejores boliches y las mejores fiestas. Con mucho orgullo te puedo decir que, si vamos a una fiesta privada, el momento top es cuando suena un cumbión. Hubo una evolución.

¿Cómo ves al gobierno del Frente Amplio (FA) en estos primeros meses?

Es todo muy reciente, hay mucha expectativa. Ojalá que sea un buen gobierno, por el bien de todos los uruguayos.

¿Y sobre los 15 años de gobierno del FA, antes de Lacalle Pou, tenés alguna opinión?

Hace un par de meses se fue [José] Mujica, un líder del FA que me parecía fantástico. Es evidente que tuvieron cosas muy acertadas y cosas que no, pero pasa en todos los gobiernos. Cuando estuvo Tabaré [Vázquez] fue increíble todo lo que hizo; era un tipazo, muy prolijo, me encantó.

Durante el gobierno de Mujica se aprobaron varias leyes conocidas como parte de la “agenda de derechos”. ¿Estás a favor de la ley que despenalizó el aborto?

Correcto.

¿Estás de acuerdo con el matrimonio igualitario?

Sí, porque el amor no elige género: no importa si la persona a la que amás es de tu mismo género o no. Tengo amigos que han logrado llegar al matrimonio, tengo amigas de toda la vida que... Y me parece fantástico.

¿Qué opinas de la ley que regularizó la marihuana?

No estoy de acuerdo. En mi familia tengo una persona muy cercana, que no es de mi sangre, y desde la adolescencia mis papás sufrieron con todo ese tema. Me parece una aberración, una decadencia total y que la sociedad se destruye con todo ese tema. Es un no grande y rotundo.