El ministro del Interior, Carlos Negro, se reunirá este miércoles con Sergio Solé, el jefe de la Policía de Río Negro, quien se encuentra en la mira del Partido Nacional (PN) por participar de una reunión de la agrupación departamental de gobierno del Frente Amplio (FA) de Río Negro y por declaraciones públicas realizadas este martes.

Según informaron fuentes del ministerio a la diaria, el encuentro ya estaba previsto antes de las declaraciones públicas de Solé, que recrudecieron las críticas nacionalistas al jerarca departamental, y la charla servirá para que Negro tome una decisión. Según dijeron las mismas fuentes a la diaria, aún no hay una postura definida.

Este martes, el presidente del Directorio del PN, Álvaro Delgado, se reunió con la diputada nacionalista de Río Negro, Mercedes Long, quien fue la primera en señalar la actividad y cuestionar el accionar de Solé. Delgado dijo en rueda de prensa que ya de por sí la participación del jefe en la actividad frenteamplista es “absolutamente inadmisible”, pero eso ahora es “sólo un aspecto del tema”. “Sólo eso ameritaba que el ministro tomara la decisión que tiene que tomar”, apuntó el dirigente, que comentó que “ahora se agrega un hecho nuevo”, en referencia a los dichos de Solé.

Las declaraciones del jerarca policial se dieron este martes en el programa Encarando la mañana, de la radio local FM Impacto de Fray Bentos. Solé envió un mensaje a la radio cuando el diputado nacionalista Pablo Abdala hablaba sobre la polémica, que fue leído por el periodista. En el mensaje, Solé repasaba algunos de los episodios que se vivieron en la administración del expresidente Luis Lacalle Pou, como los vinculados con el narcotraficante Sebastián Marset, las explicaciones de ese caso en el Parlamento y la ruptura de un documento público en Torre Ejecutiva. También hay señalamientos por la gestión del intendente de Salto, Carlos Albisu, en Salto Grande, y las irregularidades en la Intendencia de Artigas.

“Espero que le pregunten a Abdala sobre este tema: me acabo de enterar de que algunos blancos entienden que no violé ninguna norma, pero parece que [sí] falté a la ética. ¿Es la misma vara ética con que midieron a los que mintieron en el Parlamento? ¿A los que entraron por el garage de la Torre Ejecutiva? ¿[A] los que rompieron documentos en el piso 11? ¿[A] los que se robaron la mitad de Artigas? ¿[A] los que se metieron 30 ediles en Salto Grande? etcétera, etcétera”, leyó el periodista.

Abdala dijo que no debatiría con él en “público”, pero sí añadió rápidamente: “Yo debato con el ministro y debato con mis pares en el Parlamento. Ahora, el señor Solé lo único que hace con estas cosas es darnos más argumentos”. El jueves, la Comisión de Seguridad de la Cámara de Diputados se reunirá y Abdala, que fue subsecretario de Interior en la pasada gestión, adelantó en esa misma entrevista que es posible que la comisión resuelva citar a Negro si no existe una decisión en línea con la visión nacionalista.

Delgado dijo también que la situación era “inadmisible” antes de estas declaraciones y “ahora es intolerable”. “Alguien que pierde todo tipo de profesionalismo, que ya no da garantías a gran parte de la población de Río Negro, no puede durar ni un minuto más en el cargo”, dijo el presidente nacionalista.

En el plano jurídico, para el líder blanco, a Solé le aplican “todas las normas y todos los principios éticos” de “cualquier policía en actividad”, a pesar de la posición del FA, que señala que el jefe es un expolicía que está jubilado, y por lo tanto no es “funcionario policial”.

En un comunicado, la mesa política del FA sostuvo que el artículo 77 de la Constitución, el señalado por los nacionalistas, se “aplica exclusivamente a funcionarios policiales en actividad”. Según el FA, el PN hace una interpretación “errónea”, ya que “ignora la condición de 'en actividad' que la norma exige”. La fuerza política sostiene que la sanción prevista en la carta magna “sólo puede aplicarse a una persona que mantiene una relación laboral activa como funcionario policial”.

“Le aplica la misma restricción que a cualquier policía en actividad, porque de hecho está en actividad”, dijo Delgado, aunque señaló que la situación “ya escaló del plano jurídico”. “Ahora se dedicó a agraviar políticamente y descaradamente al Partido Nacional, con insultos, agravios y descalificaciones. Un jefe de Policía así no da garantías a nadie”, lanzó. En ese sentido, dijo que esta situación hace “retrotraer a un país de hace muchísimos años”, “donde los jefes policiales respondían a un partido político”.

Blancos analizarán retirarse del diálogo por la seguridad si Negro no cesa a Solé

El próximo lunes, el Directorio del Partido Nacional tendrá su reunión ordinaria y analizará el desenlace de este episodio. Arriba de la mesa, según dijo el propio Delgado en rueda de prensa, está la posibilidad de que los nacionalistas se retiren del diálogo convocado por Interior para generar políticas para mejorar la seguridad ciudadana.

“Mientras el gobierno convoca a los partidos políticos a un diálogo por seguridad, una jerarquía policial se dedica a polemizar y agraviar al Partido Nacional. Eso es inadmisible. Ha demostrado total carencia de sentido de responsabilidad, ecuanimidad y, además, con sus ofensivas declaraciones de carácter político, el jefe de Policía de Río Negro degrada el uniforme de la Policía Nacional y debe ser destituido sin demora”, escribió, antes, en X.

Delgado dijo que se comunicó con Negro para pedirle el “cese” de Solé, ya que “no da garantías para nada, mucho menos cuando el ministerio está convocando a un diálogo por seguridad. Según declaró, el ministro le dijo que “estaba estudiando el caso”. “El lunes, si sigue en el cargo, se tomarán otras acciones”, señaló Delgado.

La diputada Long dijo, en tanto, que se trata de una “situación muy grave” que “no se puede permitir”. “Nunca se ha dado, no sabemos de otro caso que haya sido así”, comentó y coincidió con Delgado en pedir el “cese ya”.