A 121 años de su muerte, el Partido Nacional (PN) homenajeó este miércoles al mediodía a Aparicio Saravia. En la plazoleta ubicada en Millán y Luis Alberto de Herrera –donde hace un año el orador principal fue Álvaro Delgado, entonces candidato blanco a las elecciones–, el discurso central estuvo a cargo del diputado Martín Lema, que rememoró el gobierno de Luis Lacalle Pou y su “saravismo”, apuntó a 2029 y criticó a la actual administración frenteamplista por mentirle a la gente en campaña electoral.

“Cuando nos toca gobernar, vaya si se demuestra saravismo, que es el equivalente a demostrar patriotismo”, dijo Lema al referirse al gobierno anterior. Ese saravismo, consideró, se demostró al afrontar diferentes crisis –como la pandemia, la sequía o la suba de precios por conflictos internacionales– con “coraje, rebeldía, determinación”, sin abandonar el “eje libertario de Saravia”. El diputado recordó una serie de “transformaciones por la patria” llevadas adelante por el gobierno de Lacalle Pou: obras de infraestructura, la inauguración del Hospital del Cerro, el aumento de la cobertura del Fondo Nacional de Recursos, entre otras medidas “saravistas y patrióticas”, hasta llegar a la “baja de impuestos”, aspecto por el que apuntó al gobierno.

“A los uruguayos no se les miente. Y nosotros mostramos que era cumplimiento y no un eslogan de campaña”, dijo Lema, quien expresó el “rechazo a la mentira recurrente que ha establecido el Frente Amplio”. “Si no lo decimos, no seríamos blancos; porque si no lo decimos, legitimamos el engaño: a la gente se la engañó en campaña electoral. Se decía que no se iban a subir impuestos, se subieron”, aseveró el diputado.

Lema también reivindicó la vocación de gobierno de su partido: “Oposición responsable, sí; pero queremos ser gobierno”, afirmó. El diputado aseguró que ya piensan en 2029 porque, “por el bien de Uruguay, tenemos que volver a gobernar”. No obstante, retomó la idea del carácter saravista y dijo que también se demuestra ahora, en el “rol en el que la gente nos puso, que es el de custodia”, es decir, para señalar los errores del gobierno. “No ser gobierno no nos impide tener el deseo de que Uruguay se siga desarrollando”, sostuvo Lema. El excandidato a intendente de Montevideo dijo que cuando cuestionan que el gobierno “tiene un rumbo contramano”, pueden “ayudar para evitar choques”, pero pretenden “que el gobierno encamine y direccione la gestión”.

“El programa de gobierno, es decir, el contrato y la oferta que les presentaron a los uruguayos, lamentablemente, termina siendo un engaño. Porque el que votó creyendo y en el acto de buena fe que eso se iba a cumplir, esa expectativa y esa esperanza se está convirtiendo en frustración”, afirmó el diputado. En oposición, aseguró, “nosotros reivindicamos la verdad”, y deslizó una hipótesis sobre por qué perdieron las elecciones: “Diciendo la verdad, puede pasar que se pierdan elecciones”. En ese sentido, señaló que, si el costo de decir la verdad es perder una elección, “estamos dispuestos”. Y agregó: “A lo que no estamos dispuestos es a perder la dignidad de tener que mentir para buscar ganar las elecciones”, lo que, apuntó, ha sido el modus operandi al que ha recurrido el Frente Amplio.

“No estamos dispuestos a que se esté mintiendo a la gente en forma gratuita. Hay que interrumpir los relatos falsos, como lamentablemente se vienen haciendo”, aseveró hacia el final de su discurso.

En una línea similar, antes que Lema habló el diputado Pedro Jisdonian. Al citar la conocida frase de Saravia, “la patria es dignidad arriba y regocijo abajo”, aseguró que dignidad se tuvo en el gobierno anterior y es la que hoy falta. “Esa dignidad que no se tiene cuando en la campaña electoral se prometen cosas y después no se cumplen. Esa dignidad que no se tiene cuando está comprobado que hay incompatibilidades con los cargos y siguen atornillados, justamente para no abandonar el poder”, apuntó.

“No somos los blancos enamorados del poder por sí mismo. Somos, sí, nosotros, celosos defensores de la justicia, de la ley y, sobre todo, de la libertad”, afirmó Jisdonian. Es por eso, continuó, que el gobierno “tiene en el Partido Nacional a su más celoso guardián”. El diputado también señaló las “inconsistencias” del gobierno respecto de lo prometido en campaña y se refirió al ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, quien –según dijo– en su actividad en el ámbito privado nunca “habló de gravar alguna ganancia que pudiera haber en el exterior”, como se propuso en el proyecto de ley de presupuesto. En ese sentido, cuestionó: “Me gustaría saber cuál fue el cambio: ¿fue el MPP el que lo cambió, o fue él quien, estando en el gobierno, cambió totalmente su forma de pensar?”.