La comisión especial bicameral de seguimiento del sistema carcelario recibió el jueves, por última vez, al saliente comisionado parlamentario para las cárceles, Juan Miguel Petit, quien entregará su último informe la próxima semana y el 18 de setiembre asumirá como nuevo director de la Institución Nacional de Derechos Humanos (INDDHH).

El propio Petit valoró la instancia para poder darle un cierre a su relación con la comisión, que funcionó durante los diez años de su gestión como una “caja de resonancia” de los planteos que hacía desde su puesto. “Ha sido una de nuestras contrapartes y referencias permanentes”, destacó el jerarca en rueda de prensa.

Petit comentó que fue una “reunión muy linda”, en la que los parlamentarios le señalaron “cosas muy positivas” de su trabajo. “Lo agradecí muchísimo, pero lo considero exagerado”, aseguró. En la comisión, el jerarca adelantó algunos de los puntos que informará la próxima semana, cuando remita su informe anual del sistema carcelario, correspondiente al año 2024. “Continuamos con una serie de recomendaciones y algunas reformas legales que tienden a aceptar la idea del reformismo penitenciario no como algo aislado, como un acto de gobierno o de un periodo, sino como una actitud de Estado”, apuntó.

La idea, añadió, es que la privación de libertad “tiene que ser algo que no sea mera contención y mero castigo y aislamiento”, porque “la persona vuelve a la sociedad”. Para Petit, las personas presas “tienen que tener un proyecto de vida”. “Tienen que tener acceso a derechos y a posibilidades que les permitan ser ciudadanos que vivan en paz con los demás”, subrayó.

El reformismo penitenciario, dijo también, no puede “resignarse” a los “aspectos oscuros que puede tener la naturaleza humana”, como la violencia y el daño a otras personas. “Debe creer que siempre es posible la rehabilitación y la búsqueda de otras formas”, remarcó.

El jerarca aseguró que tiene “mucha confianza” en que en este periodo se puedan llevar adelante políticas que vayan en esa dirección. En ese sentido, contó que la comisión está trabajando en un texto de acuerdo que marque puntos de guía para generar una política de Estado con acuerdos interpartidarios.

Para Petit, es “muy importante” que cada bancada política tenga sus “propias ideas” e “identidades”, pero que haya una “ruta compartida”. “A eso apunta el documento”, aseguró.

Esta elaboración está en proceso y se estima que esté pronta en las próximas semanas. En esa dirección, dijo que el documento “alentará” un “clima reformista”. “Tiene que ser una actitud permanente ante lo que significa este fenómeno tan peculiar como lo es la privación de libertad. Se trata de pensar que se puedan establecer cada vez mejores mecanismos de humanización y de pacificación”, remarcó.

Consultado por los puntos de acuerdo sobre los que trabaja la comisión, el comisionado dijo que el grupo ya tiene un borrador y que los ejes apuntan a coincidencias “bastante marcadas”. Dijo, ante eso, que se buscará incluir aspectos vinculados a la fomentación de las medidas alternativas a la prisión, al trabajo en la salud mental de los reclusos, las adicciones y el trabajo postpenitenciario. Comentó que se buscará “adecuar la dosimetría penal”, para que “no haya un excesivo uso de la prisión”, además de trabajar en programas en cárceles chicas y “hacer posible la educación”, porque la tasa de analfabetismo en las cárceles es alta.

“Es muy importante estar de acuerdo con ese mapa para después ir a cada punto concreto ya con acciones, con programas, normas y recursos”, valoró.

“Lo que yo he visto de la ley de Presupuesto es alentador”

Petit fue consultado por el proyecto de ley de presupuesto quinquenal, enviado por el Poder Ejecutivo la pasada semana y que se comenzará a discutir este viernes con la visita del ministro de Economía y Finanzas, Gabriel Oddone, a la comisión de Hacienda integrada con Presupuestos de la Cámara de Diputados.

El jerarca dijo que vio la ley y que los recursos destinados a las cárceles son “alentadores”. “El articulado que presentó el Ministerio del Interior es alentador en cuanto a muchas medidas que son muy interesantes”, aseguró, y auguró que “esto no termina acá”, en tanto conoce que en las próximas Rendiciones de Cuenta el sistema carcelario recibirá más presupuesto.

“Es un proceso lento y cíclico que se alimenta de lo hecho antes. Cada gobierno se basa en lo que vino anteriormente. A veces uno puede distinguir y otras veces se mezclan, y ese es el momento en que encontramos eso de que somos todos partes de un mismo país. Todos aportamos y, al final, si el resultado es bueno, es de todos”, señaló.

Entre otros aspectos, el proyecto de presupuesto incrementa los recursos en varios programas vinculados al sistema de privación de libertad y las medidas alternativas a la cárcel. En el Instituto Nacional de Rehabilitación se crean 1.000 cargos para el programa Gestión de Privación de Libertad.

También se destinarán 50 millones de pesos para 2026 y 45 millones de pesos anuales a partir de 2027 para el financiamiento de programas destinados a la reinserción social de la población privada de libertad y la disminución de la reincidencia, y se reasignan 25 millones de pesos a la evaluación de programas destinados a la reinserción social de la población sujeta a la supervisión de medidas alternativas a la privación de libertad.