El italiano Gianni Tognoni, doctor en Medicina y en Filosofía que se ha consolidado como un especialista en políticas sanitarias, estuvo la semana pasada en Montevideo, invitado por autoridades nacionales a dar una charla sobre el derecho a la salud. Fue crítico con los procesos de judicialización que obligan al Estado a comprar fármacos de alto costo para algunas enfermedades; dijo que ese mecanismo sólo existe en Latinoamérica: “En Europa no pasa, si el medicamento no está en el listado no se puede obtener, no es un derecho”, declaró a la diaria. Para él, la acción de judicialización permite a las industrias vender sus productos a precios desmesurados porque hay un Estado que los adquirirá.
Tognoni hizo énfasis en el rol que debería tomar la ciudadanía, que considera que está llamada a discutir la contribución de la medicina; por un lado, hay que tener en cuenta la calidad de vida que permite, pero por otra parte se debe ver su rol ambivalente cuando pretende aportar poca autonomía a un costo excesivo. Afirmó que en algunos casos es habitual que los Estados inviertan mucho dinero en medicamentos que a veces logran extender la esperanza de vida un par de meses, pero a la vez provocan que no se apliquen otros tratamientos que tienen mayores beneficios.
El profesional entiende que “el Estado tiene que justificar la inversión en medicamentos. El cruce de la ciencia, los derechos de los ciudadanos y los derechos del mercado es un problema abierto. Cuando el derecho del mercado cruza el derecho de los ciudadanos hay que saber dónde posicionarse”, aconsejó. “La circulación global de los bienes con precios que hacen referencia solamente a los derechos económicos de los laboratorios y no toman en cuenta los derechos del usuario evidentemente sólo pueden producir inequidad por falta de accesibilidad”, concluyó.