Cerca de 8.000 médicos y 500 estudiantes de Medicina podrán participar el 30 de mayo en las elecciones del Sindicato Médico del Uruguay (SMU), que se realizan cada dos años para definir la integración del Comité Ejecutivo y de tres comisiones (Fiscal, Arbitral y la Directiva de la Colonia de Vacaciones). Esta vez compiten cinco listas médicas, dos menos que en las elecciones de 2017, cuando eran siete.

El Comité Ejecutivo del SMU tiene diez cargos médicos y tres estudiantiles. En el período que termina, la Agrupación Fosalba retuvo la presidencia, con cuatro cargos; Médicos por el Cambio tuvo dos, en tanto Médicos Independientes, Gremialismo Auténtico, Unión Gremial Médica y la agrupación Médicos Asalariados Solidarios (MAS) tuvieron un cargo cada una. Dos de los tres cargos de estudiantes fueron retenidos por Estudiantes Independientes, y uno por la Asociación de Estudiantes de Medicina (AEM). Este año, los estudiantes compiten con cuatro listas: 1958 AEM, el Frente de Participación Estudiantil-AEM, Estudiantes por el Cambio y Estudiantes Independientes.

Fosalba

Aspira a mantener su predominio. En diálogo con la diaria Gustavo Grecco, presidente del SMU y aspirante a la reelección, destacó los logros de la gestión de su agrupación. Enumeró que en la negociación colectiva del sector público y del privado se logró “un incremento del salario real de los médicos”. En cuanto a la reforma laboral, dijo que se pasó de 600 a 1.300 cargos y funciones de alta dedicación, que se logró reducir el número de pacientes por hora y que se consolidó la estructura gremial del SMU, “con sustento en sociedades científicas y los núcleos de base que han ampliado notoriamente su participación”. En alusión directa al Sindicato Anestésico Quirúrgico, Grecco expresó que “se dio una dura batalla contra los poderes corporativos dentro de la medicina”.

Entre los asuntos pendientes, señaló reconvertir la colonia de vacaciones, recuperar la sede del SMU, y profundizar y mejorar el Sistema Nacional Integrado de Salud (SNIS). Recordó que cada año electoral el SMU hace una ronda con los candidatos a la presidencia de la República, y reprobó que hasta ahora las propuestas de los más de 20 precandidatos “hablan poco de salud”.

Las otras agrupaciones le critican a Fosalba su cercanía con el gobierno. “Cuando dicen que somos oficialistas o no, no nos ponemos ese sello. Tenemos capacidad de propuesta; cuando encontramos eco para que se materialice lo hacemos, y cuando no, confrontamos”, contestó Grecco.

Médicos por el Cambio

Esta agrupación nació hace dos años y obtuvo dos cargos en el Comité Ejecutivo del SMU. Es liderada por Rodrigo Perna, cirujano que aspira a quedarse con la presidencia del sindicato. “Es una elección que puede ser histórica: la Agrupación Fosalba gobierna hace prácticamente 100 años el sindicato y parece que tendríamos la chance de ganarle”, dijo a la diaria. Recordó que se opuso al convenio tripartito que se firmó en octubre, así como a la recategorización de los actos anestésico-quirúrgicos, porque en ambos casos hubo una rebaja salarial, aseguró. Perna integra la Sociedad de Cirugía del Uruguay y subrayó que “jamás les pasaría por encima” a estos profesionales en una negociación salarial. Propone “recuperar la tolerancia y la fraternidad entre las diferentes expresiones médicas”, y que tengan “posiciones unificadas y fuertes ante el gobierno de turno”.

Perna criticó la gestión de ASSE –dijo que paga menos que el sector privado– y al SNIS, porque a su entender “no es un sistema, no es integrado y por supuesto no tiene una calidad de salud”, porque se apoya en los aportes laborales que caen cuando aumenta el desempleo, por lo que “da pérdida”. Dijo que en su agrupación hay médicos “de todos los partidos políticos” y que está “contra Fosalba, que es claramente vinculada a la izquierda; por ahí muchas veces nos quieren endilgar algo vinculado a la derecha, pero no van a encontrar nada en ningún lado”, sostuvo.

Gremialismo Independiente

Resulta de la unión de Médicos Independientes y de Gremialismo Auténtico, que habían competido en 2017. Gonzalo Ferreira, que encabeza la lista al Comité Ejecutivo, explicó a la diaria que es una “alianza electoral independiente de los partidos políticos” y que tiene la ventaja de reunir blancos, colorados y frenteamplistas. Critica que los médicos se hayan “resignado” a no movilizarse en los últimos años y a “ser dirigidos por una agenda que en muchos aspectos nos es ajena”. Propone lograr laudos para quienes trabajan en las emergencias móviles, en servicios no asistenciales y en institutos de medicina especializada. Una de sus preocupaciones refiere a la seguridad de quienes trabajan en emergencias móviles, y por eso sugiere “impulsar el agravamiento de pena por agresión a personal de salud”.

Criticó que al SNIS le faltan muchas cosas, que el sector privado tiene mejores condiciones, que hay que mejorar la complementación e integrar al Hospital de Clínicas.

MAS

Liderada por Daniel San Vicente y secundada por Luis Alberto Ney Castillo, la agrupación propone rebajar la cuota sindical, los salarios más altos de funcionarios del SMU, eliminar las tarjetas corporativas y los “viajes superfluos”, además de mejorar las condiciones laborales e impulsar el laudo equitativo (todos los grupos están de acuerdo con esos dos últimos puntos). Reprueba por completo la gestión de Fosalba.

Desde las Bases

Nació hace dos años y se postula como “independiente de los poderes políticos de turno”. Propone una campaña de afiliación y aumentar la participación de bases, núcleos y sociedades científicas en el SMU. Rodrigo Suárez, pediatra, lidera la lista al Comité Ejecutivo. Reconoció las mejoras alcanzadas, pero fue crítico con algunos aspectos, por ejemplo que a los cargos de la Unidad de Negociación del SMU acceden las listas “amigas” de Fosalba. Pidió que se acceda por concurso a los cargos y las funciones de alta dedicación, porque “en el sector privado se los terminan dando a familiares y conocidos” y son usados para cubrir guardias, y no para la atención transversal.