Mañana se conmemorará el Día Mundial de la Diabetes y este es un año especial. Las personas con diabetes están más expuestas a las infecciones, que son más difíciles de tratar debido a las fluctuaciones de los niveles de glucemia. Esta situación coloca a los diabéticos como un grupo vulnerable ante la covid-19 y, tal como indican los informes epidemiológicos del Ministerio de Salud Pública (MSP), conforman el segundo grupo de riesgo dentro de las personas con comorbilidades, luego de las personas con afecciones cardiovasculares.

“Las primeras publicaciones sobre la pandemia en China e Italia revelaron que las personas con diabetes y otras enfermedades no transmisibles tenían un mayor riesgo de gravedad y mortalidad por covid-19, que se demostró que está especialmente asociado con la hiperglucemia”, escriben los autores de una investigación internacional de la Fundación Internacional de Diabetes (FID). En América Central y América del Sur hay una prevalencia de diabetes de 9,4%, lo que equivale a 31,6 millones de personas con esta enfermedad. En ese sentido, la FID realizó un estudio en 18 países miembros de la fundación en la región, entre los que participó Uruguay a través de la Sociedad de Diabetología y Nutrición del Uruguay, para indagar sobre las políticas de salud pública para combatir la covid-19 mientras se protege a las personas con diabetes, además de explorar los principales desafíos y preocupaciones que enfrenta esta población durante esta crisis de salud global.

Para realizar el estudio, a través de correo electrónico y un grupo de Whatsapp, se compartió una encuesta con 12 preguntas con los representantes de 40 organizaciones de diabetes. Las primeras cuatro preguntas eran para identificar a la organización y a quien respondía, así como al país y el tipo de ciudad (costera, capital o interior); las cuatro siguientes indagaban acerca de la presencia de políticas para combatir la covid-19, orientaciones de distanciamiento social, políticas para proteger a las personas con diabetes y soluciones, como subsidios a medicamentos, suministros y exámenes para ellas. Otra pregunta se refería a la presencia de datos oficiales sobre la infección y la mortalidad de las personas con diabetes durante la pandemia, y las dos siguientes, a los principales desafíos y temores de las personas con diabetes con respecto al coronavirus. Por último, se incluyó un “marcador de posición” para detallar la información del país sobre cómo la pandemia estaba afectando a las personas con diabetes.

Para analizar las respuestas, los investigadores dividieron a los países en dos grupos entre los que compartían similitudes en relación a los desafíos y los temores reportados. En el grupo 1 colocaron a los países que reportaron un mayor número de dificultades y temores: Argentina, Chile, Costa Rica, Ecuador, Ecuador-interior, Ecuador-costa, Nicaragua, Puerto Rico, República Dominicana y Venezuela. En el grupo 2 estaban Bolivia, Brasil, interior de Brasil, Cuba, Guatemala, Honduras, Paraguay, Perú y Uruguay. 

Nicaragua fue el único país que no reportó políticas públicas para enfrentar la pandemia ni recomendaciones para el aislamiento social. Brasil interior, Cuba y Honduras no reportaron desafíos o temores relacionados con la escasez o la falta de medicamentos y suministros médicos, o dificultades para acceder a los servicios de salud. 

Los países que informaron escasez o falta de medicamentos y suministros médicos fueron Argentina, Ecuador interior, Ecuador-costa, Guatemala, Nicaragua, Uruguay y Venezuela. Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, las tres zonas de Ecuador, Nicaragua, Paraguay, Perú, Puerto Rico, Uruguay y Venezuela informaron de dificultades para acceder a los servicios de salud. La mayoría de los encuestados expresó preocupación “acerca de las consecuencias en la economía” y “el aumento del precio de los productos de primera necesidad fue el más citado”.

Sólo 37% respondió que sus países participantes implementaron una política para proteger a las personas con diabetes al momento de entregarles medicamentos y suministros, ya fuera en el hogar (16%) o en cantidad suficiente para dos o tres meses (21%). “Esto significa que al 63% restante sólo se le aconsejaba quedarse en casa (42%) o ni siquiera eso (21%)”, agrega el documento. Los autores afirman que “la ausencia o debilidad de las políticas de protección” para este grupo poblacional “genera miedo”, y que por esa razón todos los encuestados manifestaron como uno de los principales temores el hecho de tener covid-19 y no recibir el tratamiento adecuado o “infectarse mientras van al hospital” o “a una cita con un médico”.

“Las posibles consecuencias de estos temores en las poblaciones con diabetes pueden ser catastróficas, aumentando la ya alta incidencia de complicaciones crónicas y exacerbándolas para entrar en una situación metabólica aún más riesgosa si se infectan por el SARS CoV-2”, indican los autores. En esa línea, recomiendan implementar “la telesalud”, “la teleconsulta” y una serie de medidas que han sido exitosas en diferentes países, como el “monitoreo, pruebas, rastreo, aislamiento y tratamiento, que funcionan especialmente dentro de una estructura de salud y un sistema de datos bien organizados e integrados, con disponibilidad de pruebas de covid-19 y profesionales de la salud capacitados”. 

Prevalencia de la diabetes en Uruguay

  • 0,8% entre personas de 15 a 24 años
  • 7,6% entre personas de 25 a 64 años

Fuente: Segunda Encuesta Nacional de Factores de Riesgo de Enfermedades No Transmisibles (MSP, 2013).

En Uruguay

El 30 de octubre el MSP publicó su último informe epidemiológico sobre la situación de la covid-19 en el país, que señala que, del total de 3.082 casos acumulados hasta esa fecha, 1.162 (37,70%) presentaban comorbilidades de base. La más frecuente fue la cardiopatía (17,03%) y la segunda fue la diabetes (6,13%). Entre quienes requirieron hospitalización, 16,4% tenía diabetes (y 43,5% afecciones cardiovasculares). Entre los 58 fallecidos por covid-19 hasta el 30 de octubre, 17 tenían diabetes.

Respecto del estudio, Javier González, gerente general de la Asociación de Diabéticos del Uruguay (ADU), organización que participó en el relevamiento, sostuvo en diálogo con la diaria que “sin lugar a dudas” en el mundo y en Uruguay se está constatando el riesgo particular que implica para los diabéticos el SARS-Cov-2. Desde el punto de vista de las acciones que se han implementado para proteger a este grupo de población, González comentó que “hubo y existe un debe” desde el punto de vista laboral. Mientras se determinó desde el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social que los mayores de 65 años podrían ausentarse de sus puestos de trabajo y pasar a los seguros especiales o seguros totales “para tratar de evitar el contagio”, no se aplicó la misma medida para los diabéticos. “Muchas personas con diabetes nos llamaban preguntando cuál era la cobertura que podían tener para poder certificarse por dicha condición y no había una cobertura, salvo que el médico interpretara que por tener diabetes y estar descompensado era aconsejable que pasara al seguro por enfermedad”, relata el gerente general de ADU.

De todas formas, González destaca que desde el punto de vista del acceso a medicamentos “la mayoría de las opiniones y las experiencias que están próximos a la institución no solamente fueron buenas, sino que fueron mejores a situaciones anteriores a la covid-19” porque en varios servicios de salud se otorgó a los pacientes medicación suficiente para más de un mes. Para González esa “fue una muy buena medida”. Sin embargo, hay aspectos para investigar sus impactos a futuro que se relacionan con las consultas virtuales o telefónicas que recibían las personas con diabetes sin estar descompensadas, a las que en realidad les correspondía consultas rutinarias presenciales para evitar futuras descompensaciones. 

Hacia el 14 de noviembre

Este año la FID decidió enfocar la conmemoración en el personal de enfermería, en su rol de acompañamiento, información y educación en diabetes, contó González, y agregó que el personal de enfermería “debe tener una capacitación continua en educación en diabetes que le permita acompañar desde el rol del equipo multidisciplinario de la salud”. En ese sentido, la ADU diseñó un curso de “capacitación básica” en diabetes que se está desarrollando durante todo noviembre –fue declarado de interés ministerial por el MSP– en el que están participando entre 100 y 150 personas.

Mañana la ADU participará en una actividad organizada en conjunto con el MSP y el Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (CAMBADU) en la que habrá distintos puntos gastronómicos en que socios de CAMBADU ofrecerán postres aptos para diabéticos a un valor diferencial “como una forma de iniciar un camino de sumar apoyo para la concientización y la prevención de la diabetes”. La ADU se encargó de otorgar a los socios 12 recetas estudiadas y evaluadas. Dijo que esta es una experiencia muy buena para la adhesión y el compromiso en la prevención de la enfermedad y sus complicaciones, porque “el pilar del tratamiento de la alimentación es el que más motivación provoca al individuo”, comentó.

Trabajos que continúan

“En los últimos años hemos realizado campañas de defensa que tienen que ver con la accesibilidad al tratamiento adecuado”, cuenta el gerente general de la ADU. A fines de 2019, la asociación logró que el anterior gobierno incluyera la bomba de insulina al Plan Integral de Asistencia en Salud (PIAS) y en setiembre de este año se concretó la decisión, con la creación del protocolo de inclusión y “la entrega del sistema de bomba de infusión de insulina con los insumos correspondientes”. “Cerramos la primera etapa, que es la inclusión integrada al PIAS, con muchísima felicidad”, y para la ADU la etapa siguiente es “tratar de potenciar y empoderar aún más a los equipos de salud” y contar con equipos multidisciplinarios que trabajen el tema diabetes.

Otro de los proyectos en los que trabaja la ADU es la generación de un Registro Nacional Sanitario de Personas con Diabetes, a partir de la iniciativa “Compromiso por la diabetes 2020-2025”, que fue firmada por varios de los candidatos a la presidencia de la República, entre ellos el presidente, Luis Lacalle Pou. “Hemos tenido conversaciones con distintos protagonistas de la salud pública, que nos han transmitido que se mantiene un acuerdo total con la realización de dicho registro, pero formalmente no hemos tenido lo que se necesita desde el punto de vista del gobierno para su inicio”, expresó González.

Artículo: “Covid-19 impact on people with diabetes in South and Central America (SACA region).
Publicación: Elsevier (julio de 2020).
Autores: Mark Uglara, Douglas Villarroel, Patrícia Vieira de Luca, Simone Bega, Bruna de Souza, Ronaldo Pineda y Viviana Giampaoli.