“Enorme saturación”, expresó a la diaria, en referencia a la capacidad de análisis y seguimiento de casos de covid-19, la médica de familia y comunidad y magíster en Epidemiología Jacqueline Ponzo, que trabaja en Canelones. “Hay demoras en la realización de hisopados y en la emisión de resultados”, afirmó, y señaló que tanto en la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) como en algunas mutualistas los atrasos alcanzan los “tres días o más”. El aumento de contagios en diciembre había causado una situación similar en el sistema de salud, pero luego habían logrado “una buena performance”, con demoras entre atención y entregas de estudios de entre 12 y 24 horas. Esa situación empeoró “sensiblemente la semana pasada con la acumulación de casos, y también con los brotes en el sistema educativo, donde cada caso demanda muchos test”, comentó la médica.
“Es muy complicada esa demora no sólo por la angustia del que espera, sino porque los contactos –aunque están avisados–, suelen seguir trabajando hasta que se confirma el positivo. Esto hace que se abran grandes ventanas de posible circulación del virus”, sostuvo Ponzo.
En relación con la cantidad de test que se informan en los reportes diarios del Sistema Nacional de Emergencias –que superan los 10.000 en los últimos días– Ponzo sostuvo que viene “bastante alta y sostenida”, pero que no se sabe nada sobre la cantidad de análisis que se solicitan por día ni sobre la capacidad de respuesta a esa demanda. “Lo que recibimos es el reporte de test procesados; el atraso distorsiona”, sostuvo. Además, señaló que “seguro” se están perdiendo “muchos” test que deberían hacerse y no se hacen “porque no contactamos a las personas, no las identificamos, porque las dificultades son muchas y si la persona puede quedarse en cuarentena, opta por quedarse y no testearse”.
Carlos Cardoso, de la Coordinadora Nacional de Instituciones de Asistencia Médica Colectiva (Conaiamc), había declarado este lunes al diario El País sobre estos atrasos. En diálogo con la diaria, expresó que “con el número de casos nuevos de covid-19 diarios no es posible cumplir con los plazos de entrega entre 24 y 48 horas. En una situación hipotética en que cada uno de los 13.000 casos activos tuviera únicamente diez contactos, se necesitarían 130.000 hisopados”, y la cantidad de test hechos a diario “está muy por debajo de esa cantidad, manifestó Cardoso. Agregó que los laboratorios con los que trabajan las instituciones de salud han incrementado su capacidad de recibir muestras y dar resultados en el entorno de 50%, pero lo han hecho “sobre la base de extender el plazo de entrega de resultados”.
A principios de diciembre de 2020 el Ministerio de Salud Pública había emitido un decreto para limitar a 48 horas el tiempo de los laboratorios y prestadores habilitados para la entrega de los resultados de los estudios por coronavirus. Cardoso sostuvo que, en este momento, la resolución del Poder Ejecutivo “no se corresponde con la realidad”. “Estamos hablando de un decreto ministerial que se dictó en un momento en que no se superaban los 4.000 casos activos, y ahora la cifra es tres veces mayor”.
La infectóloga e intensivista Daniela Paciel, docente honoraria de la Cátedra de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de la República, dijo a la diaria que hay lugares que todavía “tienen una buena respuesta y otros que están muy complicados con un retraso de dos a tres días para que vayan a hisopar a personas con síntomas” y el mismo tiempo de espera para obtener el resultado. “Eso está complejo, y estamos hablando de lugares en los que antes tenías el resultado al otro día”. En ASSE particularmente está complejo en el interior, sostuvo Paciel.