“Que cese la emergencia sanitaria no implica para nada que la pandemia haya terminado”, dijo a la diaria Mónica Pujadas, epidemióloga, pediatra, infectóloga pediatra y experta en vacunas sobre el anuncio del Poder Ejecutivo de que en pocos días cesará la emergencia sanitaria.

El ministro de Salud Pública Daniel Salinas explicó que la decisión se tomó porque es “un momento epidemiológico muy favorable para el país”, en base a “criterios objetivos: muy particularmente lo que es la incidencia de casos nuevos semanales, la repercusión a nivel sanitario, tanto en camas de cuidados moderados como en camas de CTI, y lo que tiene que ver con la gravedad de la afección, en cuanto a la cantidad de fallecidos por 100.000 habitantes”. El nivel de vacunación y la inmunización que generó la ola de ómicron también animaron al gobierno a dar el salto de la obligatoriedad a la recomendación, señaló.

Para Pujadas “es positivo” el avance hacia “una nueva normalidad con cada vez menos restricciones”, pero ello igual implica que “como sociedad toda tenemos que seguir cuidándonos”, continuar “muy atentos a la vigilancia epidemiológica, que nos permitirá ver si en algún momento hay que volver para atrás”, y avanzar con la vacunación en niños, “cuyo porcentaje de cobertura todavía no alcanzan los promedios de toda la población adulta”.

Por otro lado, Pujadas afirmó que el cambio de la obligatoriedad a la recomendación “no debería incidir” en el uso del tapabocas de las distintas poblaciones con más riesgos: “No es lo mismo un adulto mayor o una persona con una enfermedad previa que una persona sana”, como tampoco lo es “una bien vacunada que una que no lo está”.

Como conclusión, la epidemióloga indicó que “venimos por un buen camino, pero debemos seguir trabajando, no tener la sensación de que ya pasó todo el riesgo”.