Los casos positivos de covid-19 disminuyeron levemente y las personas fallecidas aumentaron en la misma medida, según el último reporte semanal emitido por el Ministerio de Salud Pública (MSP) este lunes. Los nuevos casos confirmados en el período que va del 5 al 11 de junio fueron 8.916, mientras que la semana anterior habían sido 9.184 casos. Esa misma semana, la cantidad de personas fallecidas había sido 24, mientras que ahora murieron 28 personas a raíz de la enfermedad.

La cantidad de camas de CTI ocupadas y el porcentaje de estas personas con covid-19 también se elevaron, aunque los pacientes con la enfermedad continúan siendo un porcentaje bajo. Según el último reporte, 68,3% de las camas de CTI están ocupadas, cuando la semana anterior eran 66,2%. De ese porcentaje de camas, en la última semana 5% estaban ocupadas por pacientes con covid-19 y, en la anterior, 4,7%. Hasta el sábado 11 habían ingresado al CTI 40 personas con test de covid positivo.

Por otro lado, la cantidad de test realizados aumentó en comparación con los efectuados la semana pasada, pero el porcentaje de test positivos descendió: en la última semana se realizaron 39.172 test y 22,8% fueron positivos. Entre el 29 de mayo y el 4 de junio se hicieron 34.072 test, con 27% de resultados positivos. Los casos activos en la actualidad suman 8.214 y las muertes acumuladas desde el inicio de la pandemia 7.290.

El crecimiento de fallecidos abrió el interrogante sobre en qué punto de la pandemia está Uruguay. Hablar de una tercera ola ya no es algo lejano: de hecho, la infectóloga e integrante de la Comisión Nacional Asesora de Vacunaciones Victoria Franchetz aseguró a la diaria que, dada la dinámica de crecimiento de casos positivos, “estamos en la tercera ola, claramente, desde hace varias semanas”. Henry Albornoz, infectólogo y asesor del MSP, habló en cambio de una “probable nueva ola”.

Esta tercera ola, como un hecho o como una probabilidad, es atravesada ‒a diferencia de la primera y la segunda ola‒ por un “adelantamiento” de infecciones respiratorias, particularmente de la gripe o virus influenza, según afirmó Albornoz. La cocirculación “concomitante” de ambas enfermedades –influenza y el covid– hace que haya “demandas en el sistema de salud tanto a nivel hospitalario como ambulatorio”.

Por otro lado, tanto Franchetz como Albornoz dijeron que las muertes por covid-19, que vienen creciendo, están dentro de lo “esperable” si se considera el tiempo desde que los casos positivos se mantienen en aumento. “Sabemos que después de dos a cuatro semanas de aumento de casos, también es esperable que se incrementen los casos que ingresan a cuidados intensivos y las muertes”, explicó el asesor del MSP.

Albornoz comentó, además, que si bien ha habido un aumento progresivo de los casos entre mayo y junio, “parece que hay una estabilización”. Según dijo, hay varios factores que respaldarían esa hipótesis, aunque no lo puede asegurar por completo porque los testeos se redujeron, a diferencia de antes de las nuevas disposiciones, cuando “el aumento de casos era muy representativo de lo que estaba pasando [por la cantidad de test que se hacían]”. Aun así, remarcó que el factor que más se acerca a la idea de una estabilidad es que “se venía en un aumento progresivo de la positividad de los test y eso se estabilizó”. Sin embargo, subrayó que “es difícil saber lo que va a pasar” hacia adelante.