La Sociedad Uruguaya de Tabacología (SUT) alertó al Ministerio de Salud Pública (MSP) sobre la promoción de cigarrillos en distintas playas del país. Según supo la diaria, en principio la situación llegó al organismo sin “pruebas”, pero en los últimos días comenzaron a recibir imágenes de vendedoras con vestimentas de colores históricamente asociados a las marcas de cigarrillos más conocidas.

En diálogo con la diaria, Diego Rodríguez, integrante de la SUT, explicó que lo que se denunció es la promoción, no la venta, porque “no está prohibida”, y, según dijo, se puede ir a la playa a vender cigarrillos, pero “sin colores alusivos y sin las cajillas a la vista”. “Lo único que se puede tener” es una lista de precios en blanco y negro, con los nombres de las marcas, sin resaltar ninguna. Lo que se está denunciando es diferente y si bien “se sabía”, ahora llegan fotos, indicó.

Al momento de la venta “no se puede ir por grupo ofreciendo”, porque eso es promoción, reiteró. Además, sostuvo que la situación no está vinculada a empresas ilegales, porque se trata de productos registrados y de “marcas conocidas”, incluso en cuanto a los colores. Rodríguez recordó que tiempo atrás, cuando se reguló la publicidad de estos productos, en principio se quitó la marca, pero luego también los colores.

Rodríguez detalló que los vendedores que fueron fotografiados en la playa visten remera verde y bermudas blancas. “Te podés vestir de los colores que quieras si es una situación casual, pero si estás vendiendo productos de tabaco, esos son dos colores que están asociados a la marca Nevada”, agregó.

Falta de fiscalización

El organismo que debería fiscalizar la “promoción y venta de estos productos” es el Ministerio de Salud Pública (MSP). De hecho, la necesidad de acentuar los controles fue uno de los planteos que la SUT le transmitió a la ministra de Salud Pública, Karina Rando, en julio de 2023.

Según Rodríguez, cuando había más fiscalizadores, durante el verano “lo que se hacía era reforzar el control, sobre todo en los principales balnearios del país”. Pero desde que durante la gestión del exministro de Salud Pública, Daniel Salinas, “por una decisión política”, no se le renovó el contrato a un grupo de fiscalizadores extrabajadores de Philips Morris, hay menos capacidad de control, incluso durante el año.

En la gestión de Rando “se contrataron diez fiscalizadores” que controlan de forma “genérica”, y el control quedó centrado sobre todo “en Montevideo”, aseguró. Si bien la SUT ya alertó al ministerio sobre la promoción y venta en playas, prevé establecer una denuncia “formal” a fines de este mes.

Para la SUT, durante los últimos años la política antitabaco ha perdido fuerza, sobre todo por la flexibilización de algunos aspectos, entre ellos, el empaquetado del producto. la diaria intentó sin éxito comunicarse con el MSP para esta nota.