Este lunes Casmu entregó al Ministerio de Salud Pública (MSP) un nuevo plan de reestructuración. El documento es un requisito que estableció la ley que el Parlamento aprobó hace dos meses para que la empresa accediera al Fondo de Garantía de las Instituciones de Asistencia Médica Colectiva, por la suma de hasta 56 millones de dólares.

La ley encomienda que la mutualista presente un plan de reestructuración de sus pasivos y que en un plazo de 180 días luego de la presentación del documento el Poder Ejecutivo se pronuncie al respecto. En julio, previo a la aprobación de la ley, Casmu había presentado otro plan, pero luego de varias semanas de análisis las autoridades de la cartera declararon que lo que recibieron no era un plan de reestructuración con objetivos claros.

En diálogo con la diaria, Julio Pontet, gerente de Proyectos de la mutualista, afirmó que “con el acceso al préstamo lo primero que se hizo fue revisar la estructura de deudas y algunas renegociarlas, cambiar los plazos y tasas de interés”, porque uno de los objetivos principales del plan es “el fortalecimiento financiero y reestructurar el pasivo”, agregó.

En cuanto a los recursos humanos, días antes de entregar el plan al MSP, la mutualista firmó acuerdos tanto con la Federación Uruguaya de la Salud como con la Asociación de Funcionarios del Casmu, así como con el Sindicato Médico del Uruguay, a través de los cuales pautó que no habrá despidos médicos ni no médicos durante la reestructuración.

Aun así, el gerente explicó que el objetivo general es lograr un ahorro, algo que “no va a generar despidos sino redistribución”, con previa evaluación de procesos, desempeño y productividad. “El plan es gradual, con medidas progresivas”, y pretende llegar a ahorrar “90 millones de pesos de ahorro en un año y en total”. Las medidas “se enfocan más en los procesos” y no en acciones puntuales, explicó.

Algunas otras pautas que integran las secciones del documento, de 77 páginas y nueve anexos, son “un organigrama bien definido” de la empresa y un presupuesto para 2025, que este martes fue aprobado por el Consejo Directivo, con presencia de los interventores.

Otro apartado se enfoca en todo lo relacionado a estructura, el soporte informático y la automatización. Según Pontet, la empresa también apuntó a la mejora del modelo de ingresos a través de acciones comerciales y la venta de productos dentro y fuera del Plan Integral de Atención en Salud.

Según supo la diaria, el Banco República ya le liberó a la empresa un porcentaje del último préstamo concedido porque la ley no pautó como regla que el Poder Ejecutivo aprobara el plan para acceder a las primeras cuotas.