Este viernes el Ministerio de Salud Pública (MSP) presentó el primer asistente virtual público para dejar de fumar, un chatbot al que se accede a través de Whatsapp, con el número 091 365 724, donde se despliegan varias opciones: asesoría, estrategias comportamentales, planes completos y materiales descargables, para quienes están pensando en dejar de fumar, para quienes ya lo hayan decidido y necesiten asistencia, y también para ayudar a alguien cercano a dejar de hacerlo.

Laura Llambí, la directora del Programa de Control de Tabaco del MSP, explicó que la herramienta se fundamenta en que el tabaquismo y las enfermedades que genera siguen siendo una de las primeras causas de muerte prevenible; además, es un problema de salud pública y dejar de fumar es “algo que muchas personas quieren hacer, pero enfrentan barreras”. Por esto, el asistente virtual, creado en colaboración con la Agencia de Gobierno Electrónico y Sociedad de la Información y del Conocimiento (Agesic), “tiene el potencial de aumentar la tasa de éxito en la cesación”.

En el chat, el usuario solicita ayuda, luego responde preguntas y va tomando distintas opciones en tiempo real; se instaura una conversación personalizada que adapta el contenido a lo que el usuario responde, agregó Llambí. Los materiales descargables y la información son sobre hábitos saludables, tabaquismo y vapeo. También permite denunciar infracciones a la política antitabaco y ayuda a las personas a encontrar los centros de tratamiento de tabaquismo en su prestador de salud. La plataforma no guarda datos personales.

Por su parte, la ministra de Salud Pública, Cristina Lustemberg, agregó que avanzar en esta agenda, que es “central para la actual gestión y para el país”, es importante debido a que el tabaquismo “es un problema de salud grave, la principal causa de enfermedades prevenibles; en el mundo fallecen 8 millones al año por consumo de tabaco, en Uruguay 18 por día, lo que al año suma 6.500 uruguayos”.

Por otra parte, es la causa del 45% de los infartos agudos de miocardio y de entre el 80% y el 90% de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y del cáncer de pulmón.

Desde 2004, Uruguay construyó una política pública de tabaco que se consolidó como ejemplo internacional, que resultó en un cambio cultural y nos posicionó como pioneros en el mundo, agregó la jerarca. Promover y ayudar a dejar el consumo de tabaco es una de las medidas de reducción de demanda del Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que tiene “fuerza de ley” en Uruguay y desde hace más de 20 años se transformó en un pilar de la política antitabaco del país, agregó.

“Estamos retomando liderazgo en la agenda internacional”, finalizó la ministra, quien este sábado viajará a Ginebra, Suiza, para participar de la 11ª Conferencia de las Partes del Convenio Marco para el Control del Tabaco, que este año tendrá tres grandes ejes, según informó la OMS: la reducción del consumo de tabaco mediante políticas, la protección del medioambiente y la responsabilidad de la industria tabacalera y la interferencia en las políticas públicas.

En junio, el Poder Ejecutivo derogó dos decretos del gobierno de Luis Lacalle Pou que habían flexibilizado la política antitabaco. El primero es el decreto 87/021, que modificó lo dispuesto en 2009 por Tabaré Vázquez en el marco de la ley que protege el derecho a un medioambiente libre de humo de tabaco y habilitó la venta de “dispositivos electrónicos para la administración de nicotina que emplean una tecnología de tabaco calentado”. El segundo es el decreto 282/2022, que flexibilizó la ley antitabaco (18.256), reglamentada por el decreto 120/2019, en materia de empaquetado neutro y etiquetado de cigarrillos.