Deporte
El puerto de los sueños
Nueva Palmira le ganó 1 a 0 a Durazno casi en la hora. Fue una final inmensa, gigantesca, honorable, en la mejor acepción que uno pueda encontrarle a la honra deportiva, a la honra de los pueblos. Fue lo que tenía que ser, una final del mundo, de nuestros mundos, del pueblo de Nueva Palmira, y de aquellos cientos de duraznenses que hicieron kilómetros a lo loco en excursiones, autos y capaz que hasta en algún mionca.