Llamadas a legisladores, a autoridades del Ministerio de Desarrollo Social, al Poder Ejecutivo (PE), a integrantes del Sindicato Único de Trabajadores y Trabajadoras del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay y del Instituto Nacional de Inclusión Adolescente (Suinau). Concentración afuera y adentro. Ocho horas de discusión, de negociación, de espera. Y finalmente, un acuerdo. Así transcurrió, según José Lorenzo López, presidente del Suinau, la sesión de este miércoles del Directorio del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), acompañada de una manifestación de casi 500 trabajadores del instituto.

El reclamo principal: “Un reparto de economías por un valor de 20.000 pesos”. López explicó que los salarios del INAU -como de cualquier otro organismo público- se pagan desde el rubro cero, pero “por distintas circunstancias, sobre todo por jubilaciones, decesos y destituciones”, el instituto ha perdido muchos funcionarios, se han contratado muy pocos, y “la plata que había para contratar personal no se ha gastado, por lo tanto, se ha generado una economía rubro cero, que históricamente se vuelca en los trabajadores a final de año y en enero se paga una partida establecida por ese concepto”.

Para López, a ese marco se le suma que la mayoría de los trabajadores del INAU continuaron trabajando durante la pandemia “con un riesgo de contagio importantísimo y en una institución que tuvo mucho impacto directo en la pandemia”. En tal sentido, desde el sindicato entienden que eso debe contemplarse. Y en efecto, con tres propuestas distintas sobre la mesa, se contempló: a partir de enero el pago de economías será en torno a 13.000 pesos, pero se le suman 1.000 pesos en la partida mensual de presentismo. En total, serían 12.000 pesos más por trabajador. Por tanto, se llegaría a los 25.000 pesos.

“Llegamos a este acuerdo que nos parece satisfactorio”, valoró López. Si bien remarcó que “el monto de [el Ministerio de] Economía va a ser menor”, con el aumento del presentismo, y el 7% del ajuste salarial, van “a quedar por encima de la inflación, absorbiendo la pérdida del ajuste del Poder Ejecutivo con el convenio” que se firmó.

De las propuestas que el directorio discutía, la única que quedaba por debajo del monto solicitado era la del presidente del INAU, Pablo Abdala. López contó que planteaba 13.000 pesos sin “ningún otro complemento”, ya que entendía que “el lineamiento del Ministerio de Economía y Finanzas daba sólo para ese monto y no tenía margen para definir por encima de eso”. En diálogo con la diaria, Abdala mencionó que consultó al PE, que le brindó “una pauta tomando como referencia la distribución del 2019 y actualizando esos valores”. En función de ello es que se llegó a los 13.000 pesos.

Pero en cuanto al aumento del presentismo, Abdala estuvo de acuerdo: “Porque tenemos recursos. El mismo rubro cero de este año lo tendremos el año que viene, que buena parte se irá a los ingresos [de funcionarios]”. Asimismo, consideró que “es mejor para los trabajadores y para la institución, porque el presentismo está asociado a la asistencia. Es exigente porque el funcionario tiene que tener una asistencia perfecta, salvo determinadas excepciones de licencias”. Al igual que López, agregó que el acuerdo, finalmente, fue “satisfactorio”.

Entre medio de las negociaciones del directorio, poco después del mediodía, el Suinau se reunió con las autoridades del INAU y acordó otros dos puntos, en “una reunión muy dura, muy tensa”, según López. Por un lado, se concretó la instalación de una comisión para dar seguimiento a los centros de atención de 24 horas, y, por el otro, se acelerará el proceso de ingreso de 240 funcionarios de atención directa: educadores, psicólogos y asistentes sociales. El llamado es a nivel nacional y viene de tiempo atrás, pero se había “burocratizado”. Ahora, a partir de enero, se harán los procedimientos faltantes y en febrero comenzarán a trabajar.

Las partidas salariales fue lo que se terminó de resolver luego de esa reunión intermedia. Mientras, llegó a haber intervenciones del propio director de Convivencia y Seguridad Ciudadana del Ministerio del Interior, Santiago González: “Nos pidió que no nos quedáramos, que no ocupemos la calle, porque si no iban a tener que intervenir”, contó López.

Se reitera “la necesidad de reconsiderar el tema”

El mismo día, vía Twitter la directora del INAU por el Frente Amplio, Natalia Argenzio, hizo referencia a “irregularidades por parte de la Intendencia de Paysandú con relación a la modificación unilateral de los convenios firmados con INAU para la gestión de ocho CAIF [Centros de Atención a la Infancia y la Familia] y un centro Siempre”, y la necesidad de que el directorio reconsidere el tema. Argenzio solicitó que exhorte a la Intendencia de Paysandú a “cumplir en forma directa el contrato vigente, debiendo rescindir el convenio con la Fundación a ganar”.

La jerarca afirmó, a su vez, que durante la reunión propuso “una salida que regularice esta situación” y que “garantice la continuidad de la atención de las niñas/os acorde a derecho”, pero que el oficialismo “nuevamente” negó el pedido. Abdala especificó que no cree que haya “irregularidad alguna”.

“Contrataron a la fundación para que suministrara los recursos humanos, que generalmente terminaron siendo los mismos que ya estaban trabajando, y tercerizó la contratación. Pero eso, a mi juicio, no vulnera los convenios”, argumentó. En cuanto a la atención de los niños y niñas, Abdala aseguró que “ha mejorado sensiblemente”. Aun así, reconoció que hay que “seguir mejorando en algunos asuntos” relacionados, más que nada, a la administración. Para ello, aprobaron una resolución para conformar un equipo de trabajo junto a la Intendencia de Paysandú, a los efectos de analizar y trabajar los aspectos a resolver.