Este jueves se entregaron a 132 cuidadoras la certificación de competencias ocupacionales por haber culminado el proceso en el perfil personas que cuidan. Se trata de mujeres que trabajan con personas mayores en 42 centros de larga estadía en Canelones, Cerro Largo, Colonia, Florida, Lavalleja, Montevideo, Río Negro, Salto, San José y Soriano.

Las certificaciones fueron dadas por Uruguay Certifica y en el acto en el que anunciaron estas entregas participaron Pablo Mieres, titular del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), Pablo Darscht, director general del Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop), Daniel Pérez, director de Empleo y representante de la Comisión Uruguay Certifica, Marcelo Abdala, secretario general del PIT-CNT, José Pedro Derrégibus, director de Inefop en representación de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios, Juan Pereyra, director general de Educación Técnico Profesional-UTU, y Yanil Rojas, por la Secretaría Nacional de Cuidados y Discapacidad.

En su discurso, Mieres dijo que uno de los aportes que se hace con este tipo de certificaciones es reconocer los conocimientos que se “aprendieron en la cancha” y no en instancias de educación tradicional.

“Todas las tendencias demográficas y lo que tiene que ver con la evolución de la sociedades y de la concepción de los derechos de las personas indican que la tarea de cuidar va a ser cada vez más requerida y cada vez más prestigiosa, y debe ser cada vez más idónea”, dijo.

El jerarca destacó el rol de Inefop en el desarrollo específico de la formación profesional: “Después de ocho años el Estado vuelve a aportar su parte, porque una cosa es el discurso y otra son los hechos. Este año, por primera vez después de ocho años, el gobierno, el Estado uruguayo, vuelve a poner su parte en esta tarea, que supone sostener con el Fondo de Reconversión Laboral este instituto, que es fundamental para acompañar el proceso de recuperación del empleo”, sostuvo.

Por su parte, Darscht comentó que este tipo de programas facilita el reclutamiento, mejorando el sistema. “Esto es una apuesta a profesionalizar y humanizar un rol cada vez más necesario por cómo evoluciona la sociedad. Es un aporte sustantivo a la equidad, con una connotación de género muy importante, porque sabemos quiénes son las que llevan la mayor parte de los cuidados si no existen estos mecanismos”, que también redundan en una suerte de “amparo” para quienes “más lo necesitan, que son las personas cuidadas”, agregó.

En tanto, el secretario general del PIT-CNT sostuvo que “en un mundo en el que muchas veces todo se reduce al rol de mercancía y predomina una lógica que instrumentaliza al ser humano, aquí se está poniendo eje en una actividad que es clave, que es el cuidado de las personas”.

Abdala aseguró que ya no hay una oposición entre el saber académico y el que brinda la experiencia: “Lo que uno aprende en el trabajo se puede certificar y validar, generando una carrera profesional importante”, y destacó la importancia de un sector que, en su mayoría, tiene mano de obra femenina.

“En las estadísticas generales de desempleo hay un sector que está más castigado, el de las mujeres trabajadoras, por eso la importancia de esta actividad, más allá de todos los aspectos culturales que hay que cambiar, porque los cuidados deben ser corresponsabilidad de todos y todas”, afirmó el secretario general del PIT-CNT.

En tanto, Derrégibus dijo que hay decenas de empresas y personas desarrollando estas tareas, por lo que resulta “fundamental” la certificación. “Reafirmamos nuestro compromiso por el trabajo de calidad y por seguir haciendo acciones de este tipo”, concluyó.