La Federación de Funcionarios de OSE (FFOSE) ocupó este viernes la planta de Aguas Corrientes, tal como estaba anunciado, al no haber podido llegar a un acuerdo con las autoridades en una reunión mediada este jueves por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS). El sindicato tomó control de la planta durante todo el primer turno del día y a pesar de que el ministerio intimó a que desocuparan señalando el decreto que prohíbe ocupar los edificios públicos, los trabajadores mantuvieron la medida y la jornada se desarrolló sin conflictos.

A pesar de que las autoridades de OSE pidieron la intervención del MTSS y que este podría haber solicitado la presencia del Ministerio del Interior, la ocupación se llevó a cabo sin inconvenientes y sin perjudicar el servicio de agua, porque se mantuvo una guardia gremial, indicó a la diaria el dirigente Carlos Larrosa.

En la reunión de este jueves en el ámbito de la Dirección Nacional del Trabajo (Dinatra) entre el sindicato y representantes de OSE, la Oficina Nacional de Servicio Civil (ONSC) y la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) no se llegó a buen puerto: “No hemos avanzado como hubiéramos querido”, admitió Larrosa. “Nos quedó claro que el gobierno no va a respetar tal cual el convenio al que llegamos el año pasado, entonces en una asamblea informativa durante la ocupación de la planta se decidió profundizar el conflicto y nos sentimos con las manos libres para tomar cualquier tipo de medidas”.

Como primer paso se llamará a una mesa representativa para la semana que viene, mientras la dirección y el secretariado ejecutivo del sindicato se reúnen para analizar la propuesta de las autoridades, que, según adelantó Larrosa, es “totalmente insuficiente y no cumple con las expectativas que teníamos. Se va a analizar con responsabilidad, pero teniendo claro que este conflicto está lejos de terminarse”.

“Vamos a esperar a evaluar la propuesta; sinceramente, los ambientes de negociación los mantenemos abiertos pero no están funcionado, la propuesta que nos hicieron fue totalmente insuficiente y a destiempo, y nos dejó un malestar importante”, opinó el representante sindical.

Los motivos del conflicto

Los trabajadores de OSE reclaman el cumplimiento del acuerdo alcanzado con el directorio del ente el año pasado, por el cual se comenzaría el proceso de regularización de los cargos presupuestales de más de 3.000 trabajadores, que ahora están presupuestados en una categoría -la mayoría está en la tres- cuando en los hechos, por las actividades que realizan, reciben una remuneración de una categoría superior.

“No fue muy clara la propuesta de la OPP. Ofrecen regularizar algunos compañeros que están en la categoría tres, que es de las más bajas, y pasarlos a categoría presupuestal cinco, pero eso ni siquiera cumple con los puestos de retribución que hoy en día tienen los compañeros, que por ejemplo ya cobran por una categoría ocho por el tipo de tareas que desarrollan en el organismo”, explicó Larrosa.

“Esta falta de regulación “está complicando enormemente el funcionamiento de OSE. Esta situación de precariedad en la categoría de presupuestación impide tener una carrera de funcionario y empezar a ordenar con concursos para ascenso, que es lo que pedimos, pero no se puede hacer mientras las autoridades sigan en esta tesitura”, comentó Larrosa.

Otro de los reclamos del sindicato es la falta de personal, ya que tras aplicarse el Decreto 90/020, que establece que de cada tres vacantes se puede llenar sólo una, no ha ingresado gente. Larrosa adelantó que según les hicieron saber habrá un llamado para 40 puestos a nivel nacional, algo que el sindicato considera “totalmente insuficiente”. “Tenemos un mínimo histórico de personal genuino en el organismo que ronda los 3.900 trabajadores y entendemos que por lo menos, para mantener un servicio de calidad funcionando correctamente, precisamos cerca de 5.400 en áreas permanentes. Si cada vez somos menos, esto va a empezar a fallar”.