La Mesa Nacional de la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) recibió este lunes a una delegación de trabajadores despedidos por la empresa Claldy, todos ellos integrantes del sindicato Trabajadores Unidos de Claldy (Tucla). En la instancia, los trabajadores informaron a la organización que, como parte de la profundización de sus medidas de lucha, y ante la falta de soluciones, están decididos a comenzar una huelga de hambre el 1º de diciembre con instalación de una carpa frente a la Torre Ejecutiva.

Sobre la reunión, el dirigente de la FTIL, Enrique Méndez, dijo a la diaria que están “ante una clara situación de represión antisindical, con una insensibilidad brutal de la empresa para con los trabajadores, quienes pusieron de sí mismos para que la empresa durante estos años no quebrara”.

Agregó que durante el proceso de despido, la empresa actuó de tal forma que, según denuncian los trabajadores, dentro del establecimiento tienen “miedo hasta de solicitar ir al baño, de cumplir con los 30 minutos reglamentarios de descanso, esto por la forma de represión y arbitrariedad que ha utilizado la empresa en esta situación, al margen de ser una empresa beneficiada por el Estado en parte de este proceso”.

Méndez agregó que “los trabajadores han vivido una situación de extrema preocupación que en algunos casos afectó su salud mental, por la forma como se originó el despido, la comunicación y todo lo que se desarrolló después”. “Desde la FTIL siempre pretendemos que las medidas tomadas no atenten contra la integridad física de los trabajadores, con la decisión que tomaron ellos; esta es una situación de angustia. Y si bien no orientamos ni guiamos a iniciar estas acciones, no los dejaremos solos y respaldaremos el esfuerzo de los trabajadores, en un hecho bien claro: denunciar y exigir la recomposición de los puestos de trabajo”, dijo el dirigente.

Acerca de Claldy, expresó que “es una empresa integrante y socia de la Cámara de la Industria Láctea del Uruguay (CILU), por lo que la FTIL ha planteado esta situación la cámara”. “La pregunta es hasta dónde la gremial empresarial respalda que uno de sus socios esté actuando de esta forma, ya que ellos señalan que reprueban el accionar de Claldy, pero terminan respaldándolo al no hacer nada en este proceso”, sostuvo.

Comunicado de FTIL

Un texto difundido este lunes dice que “los trabajadores despedidos de manera antisindical en Claldy mantienen desde hace casi 100 días la instalación de una carpa frente a la planta de Young, en Río Negro”. “Claldy se vio beneficiada con el cobro de recursos de la ciudadanía, fondos del Estado, que deberían haber sido destinados a la reconversión de la industria, con el natural compromiso de que no habría despidos. Claldy cobró los recursos públicos y, de todos modos, decidió echar a decenas de trabajadores sindicalizados, pasando por arriba a la Constitución de la República y a la Ley de Libertad Sindical”, agrega el comunicado.

“La FTIL expresa toda la solidaridad a los compañeros despedidos que defienden sus puestos de trabajo y se compromete a acompañar este proceso junto a ellos y, al mismo tiempo, a realizar los máximos esfuerzos posibles para encontrar soluciones que eviten llegar a una medida de tal magnitud”, concluye la declaración.