Más de 500 delegados, que son parte de los 49 sindicatos que conforman la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), participaron del XVIII Congreso Ordinario, que se realizó el jueves y el viernes en el Centro Pontevedrés, donde discutieron, evaluaron y analizaron las temáticas que más preocupan al sector. El encuentro también se enmarcó en el 60° aniversario de la Confederación.

Los votantes ratificaron a Martín Pereira como presidente, a José Lorenzo López como secretario general y eligieron a Iris Fregossi como secretaria general adjunta. El periodo de este Consejo Directivo es por dos años, hasta abril de 2027.

“El Estado debe garantizar derechos a la población, especialmente a los sectores más vulnerables, por lo que las políticas sociales son un eje central que preocupa a los/las trabajadores públicos”, expresó la confederación en un informe al que accedió la diaria. Según COFE, en la administración pasada “se profundizaron las políticas de corte asistencialista, que, aunque necesarias, no fueron suficientes si el objetivo era un desarrollo social real y sostenido”.

“Como Confederación, sostenemos que es hora de cambios y reclamamos que se implemente un proyecto de desarrollo económico nacional, que tenga como objetivos fundamentales reducir la extranjerización y la primarización de nuestra economía, minimizar la dependencia creciente de los vaivenes de la economía mundial y disminuir la vulnerabilidad de las políticas sociales, entre otros”, dice otro tramo del informe.

Asimismo, COFE reclamó por “políticas y recursos para mejorar la distribución del ingreso y la riqueza, así como para reducir la pobreza y la indigencia estructurales – necesidades básicas insatisfechas, niveles educativos, etcétera-. Particularmente, se debe atender a la infancia y la adolescencia que son el grupo etario que tiene peores condiciones de vida, y su futuro comprometido”.

La confederación rechazó, además, “las políticas económicas que reducen el número de funcionarios públicos, y utilizan el salario de los trabajadores como variable de ajuste de los resultados fiscales”, y consideró que “para superar la actual situación es fundamental cumplir de forma efectiva con la negociación colectiva, mejorando las relaciones laborales y las condiciones de trabajo, fortalecer la igualdad de género, enfrentar todas las formas de discriminación y violencia dentro y fuera de los lugares de trabajo, fortalecer la estabilidad laboral, dignificar el salario, y articular la carrera administrativa, la seguridad jurídica y la seguridad social”.

“Es necesaria una reforma del Estado que optimice los resultados de la gestión asegurando transparencia, eficacia, eficiencia, agilidad en los trámites, pero con garantías que salvaguarden el conjunto de la ciudadanía destinataria de los servicios”, señaló en otro fragmento del texto, y recordó que el Congreso de COFE se realizó en el marco de dos cambios fundamentales, que han ocurrido, como consecuencia de procesos electorales: a nivel nacional, el triunfo de Yamandú Orsi, mientras que a nivel internacional, destaca el retorno de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos.

Otros puntos que atiende el documento, tienen que ver con que para COFE se necesita un Estado que presente “políticas que enfrenten el grave problema de la inseguridad alimentaria (en 2024 un 13,7% de la población sufre inseguridad alimentaria grave o moderada), con programas eficientes que busquen la autonomía alimentaria de los hogares”, y que exista “una política pública seria y coordinada que aborde la problemática de personas en situación de calle, cuyo aumento exponencial pone en evidencia el fracaso de los programas que se han desarrollado hasta el momento”.

Foto del artículo 'COFE reclamó por un Estado con un rol más protagónico para atender las necesidades de los sectores más vulnerables'

Foto: Guillermo Legaria

COFE: “Es hora que el Estado asuma un rol protagónico”

Acerca de las conclusiones del encuentro, la diaria accedió a un texto que este viernes fue compartido por dirigentes de COFE, una vez finalizado el Congreso. En él la confederación señaló que “fue un Congreso donde el debate, la confrontación de ideas, la negociación y la más amplia participación, consolidaron, un balance positivo de lo actuado”, y agregó que “se definió un programa donde se marcan las líneas de acción de la Confederación, y una dirección amplia, plural y paritaria votada por amplísima mayoría y sin votos en contra”.

“El crecimiento, el accionar y la consolidación de nuestra Confederación como el sindicato más representativo del Sector Público, genera muchas expectativas y un gran compromiso para afrontar lo que viene, que es el acto del 1° de mayo y el Congreso del PIT-CNT”, expresó, y destacó que el 2025 es un año importante, donde se define el presupuesto quinquenal, luego de que el Frente Amplio volvió al gobierno. “Esto sucede en un contexto complejo y convulsionado por lo que pasa en el mundo, en la región y por cómo eso impacta en lo local”, expresa el mensaje.

Manifestó también que desde COFE se continuará reivindicando un Estado activo y democrático, “con presencia real en todo el territorio nacional, que no solo atienda las urgencias sociales, sino que sea capaz de planificar el futuro, y construir un modelo de desarrollo sustentable e inclusivo”.

“Es hora que el Estado asuma un rol protagónico, no solo como garante de derechos sociales y laborales, sino como actor fundamental del desarrollo nacional. Esto es, ocupando una posición preponderante en la planificación y en la inversión, siendo ejecutor y regulador en áreas estratégicas, y evitando que se sigan entregando y regalando las ganancias al lucro privado, entre otras cosas”, afirma el mensaje, y agrega que “el país necesita una nueva lógica de desarrollo que trascienda a la lógica de la inversión extranjera, como motor exclusivo del crecimiento”.

Los trabajadores del Estado consideraron que se “debe apostar por la construcción de capacidades estatales propias, de modo tal que puedan desarrollar una política industrial moderna y una infraestructura al servicio de las grandes mayorías”, y afirmaron que “continuarán trabajando por un Estado que asuma un papel central en el ordenamiento y la integración territorial, que diseñe políticas públicas tendientes a revertir la concentración del desarrollo en Montevideo y la zona Metropolitana”.