La Asociación de Funcionarios Registrales del Uruguay (AFRU) comenzó esta semana a detener las actividades, luego de declararse en conflicto días atrás en reclamo de ingreso de personal. El sindicato anunció que no se atenderá al público –sólo ingresarán vencimientos y caducidades–, no se realizarán cierres de documentos ni de certificados, no se entregarán documentos y no se evacuarán consultas presenciales ni por correo electrónico.

En un comunicado, AFRU sostuvo que actualmente se atraviesa “una situación crítica” en materia de recursos humanos. “Hay menos de 220 funcionarios, y de esa cantidad más de 50 tiene causal jubilatoria al 31 de diciembre próximo”, detalló.

El sindicato apuntó además que hay 57 trabajadores “prestando servicio en formato de contratos de arrendamiento de servicio o tercerizados, y diez funcionarios en comisión de servicio realizando tareas fuera de sus funciones”.

Según AFRU, “la única forma que se encontró para que el organismo continúe funcionando y seguir brindando un servicio de calidad es la reestructura”, que “ponía fin a inequidades salariales, de grado y, por sobre todo, regularizaba los 67 puestos que aún no cuentan con la categoría de funcionario de la Dirección General de Registros”; sin embargo, “la administración decidió que no”.

La secretaria general de AFRU, Ana María Ibarra, dijo a la diaria que el sindicato aguarda tener una reunión con las autoridades del Ministerio de Educación y Cultura para avanzar en este tema. Está previsto que el encuentro tenga lugar la próxima semana.

En cuanto a las medidas de lucha, Ibarra dijo que “en esta primera instancia van a ser sorpresivas y diarias”. “Por el momento no vemos posibilidades de ir disminuyendo las medidas, porque todavía no hemos tenido ninguna reunión. Si hubiese una reunión que permita evaluar que hay una voluntad de buscar una solución al conflicto, se puede ir pensando en disminuir las acciones, pero, por el momento, nada”, planteó.