“El alimento agroecológico mejora la vida de las comunidades que lo producen y de las que lo consumen, ahora y en el largo plazo, ya que implica relaciones justas y equitativas entre las personas”. Esta cita forma parte de la declaración emitida el 3 de setiembre por la Red de Semillas Nativas y Criollas, la Red de Agroecología del Uruguay, la Red de Grupos de Mujeres Rurales y la Red de Huertas Comunitarias. Las organizaciones, integradas por personas comprometidas con la acción social para promover alternativas al actual sistema alimentario, decidieron este año que esa fecha fuera el Día Nacional de la Agroecología.
Invitan a festejarlo con un evento que será en el parque Roosevelt este domingo de 10.00 a 18.00. Habrá charlas, talleres, mercado de productos, mercado gastronómico, intercambio de semillas, espectáculos en vivo y actividades infantiles.
Sin embargo, no todo es festejo. En el comunicado sostienen que “a pesar de que hoy en día, una gran parte de los predios y de los alimentos del mundo provienen de las agriculturas indígenas y campesinas, avanza un modelo globalizado, basado en transformar los alimentos en mercancía, orientado por la búsqueda de ganancia en el corto plazo. Esto provoca conflictos en los territorios, agravando el hambre, las guerras y la aparición de pandemias. Este sistema no logró una forma sostenible, justa y segura de alimentar a la población. Es parte de una crisis múltiple, climática, de pérdida de biodiversidad, de afectación sobre la salud, contaminando suelos, agua, aire, alimentos y cuerpos”.
Frente a esta problemática, aparece la agroecología, que propone “formas de producir alternativas y también cambios en la distribución y consumo, promoviendo una mayor cercanía, conocimiento y solidaridad entre el campo y la ciudad, a través de ferias y mercados de cercanía, organizados en grupos de consumidores, cooperativas y asociaciones de agricultores para comercializar en conjunto”. Según explican, en ella se incorporan “los avances de la ciencia y la tecnología”, además de plantear que “el cambio de paradigma implica repensar el sistema agroalimentario actual de forma crítica, buscando que las distintas ciencias trabajen respetando y dialogando con el conocimiento popular de quienes sostienen con su trabajo y experiencia la producción de alimentos”. Asimismo, recuerdan que la producción de alimentos agroecológicos se basa en principios como el cuidado de la salud del suelo, la biodiversidad y de las personas.
Alberto Gómez, integrante de la Red de Agroecología, contó a la diaria que “además del festejo y el encuentro, porque viene gente de todo el país y es para todo público, la idea del evento es empezar a articular a otras personas y organizaciones que están afines con la causa y quieran sumarse”. “Vemos que a la agroecología, a nivel de la sociedad y las políticas públicas, a pesar de todo el camino que tiene, le cuesta mucho escalar. Hay muchas experiencias interesantes, hay mucha innovación, pero hace falta difundirlas más”, expresó. Una de las mesas que habrá en el evento versa sobre el Plan Nacional de Agroecología; allí diversos representantes de organizaciones harán una evaluación y presentarán nuevas propuestas.
“Se avanzó mucho con la Ley 19.717, que declara de interés general la producción agroecológica, se llegó a hacer con bastante dificultad la formulación de una propuesta del plan, que es bastante completa e integral, pero hemos avanzado poco en los resultados, por lo menos en base a lo que nosotros esperábamos. Hay gente en todos lados trabajando estos temas que todavía no llega a tener la fuerza que tendría que tener. Parte del encuentro es conversar entre nosotros y con la gente sobre propuestas para los nuevos períodos”, relató Gómez. En este año electoral, luego del festejo, la idea es elaborar una carta junto con más organizaciones y enviársela a todos los precandidatos.
La misiva de las organizaciones dice que “los cambios son tan necesarios como desafiantes” y, por esta razón, “se necesita el compromiso del conjunto de la sociedad para lograrlos”.