El abordaje periodístico que se hace en nuestro país de temas de infancia y adolescencia presenta problemas similares al del resto de América Latina. Del informe presentado por la Red ANDI (en base a las noticias publicadas en 130 periódicos latinoamericanos entre 2005 y 2007) la violencia es uno de los temas más abordados, en detrimento de otros importantes como políticas públicas, salud o educación. El cómo se trata también está en la mira, puesto que las agresiones cometidas por o hacia niños son vistas como hechos aislados, y en cuyos tratamientos predomina la descripción de hechos, sin análisis de causas y soluciones.

Organizaciones

Voz y Vos es una iniciativa de El Abrojo en convenio con UNICEF-Uruguay. Desde 2007 elabora informes anuales en que analiza el tratamiento mediático de la prensa escrita en temas de infancia y adolescencia y hace recomendaciones sobre el abordaje periodístico. La Red ANDI nuclea a organizaciones no gubernamentales de doce países de América Latina: Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Guatemala, México, Nicaragua, Paraguay, Perú, Venezuela y Uruguay (Voz y Vos). Desde el lunes 17 hasta el viernes 21 la Red ANDI desarrolla en Montevideo el V Encuentro de Periodistas, con comunicadores de los 12 países.

La utilización de términos peyorativos es otra de las críticas del informe de la red, y Uruguay junto a México fueron los dos países que utilizaron más términos negativos en el período analizado. En ese concepto se integran referencias como "menor" (no recomendada debido a su asociación con el menor infractor y su consecuente estigmatización) así como "asaltabuses", "ladronzuelos", entre otros. El Comité de Derechos del Niño de las Naciones Unidas, también señaló a Uruguay al momento de manifestar preocupación por los estereotipos y la estigmatización.

El informe de la red registró además que mayoritariamente se recurre a las fuentes oficiales y muy por debajo se encuentran las fuentes expertas, de la sociedad civil, documentales y el espacio para los aludidos es mínimo. La identidad develada es otra infracción mediática.

En foco

Voz y Vos presentó un nuevo informe analítico, que esta vez es semestral (enero-junio de 2011) y focalizado en los adolescentes en conflicto con la ley. La mayor presencia del tema en los medios uruguayos responde a la propuesta de reforma del Código de la Niñez y la Adolescencia (CNA) así como a la iniciativa de la baja de la edad de imputabilidad. El informe detectó que en más de 80% de los casos al tema “Medidas socioeducativas/Privación de libertad” se lo relacionó usando sólo dos temas de apoyo: violencia o bien, derecho y justicia. La asociación con temáticas como pobreza y exclusión social, educación, salud, y convivencia familiar fue mínima (6%); al respecto, Alejandro Albarracín, quien presentaba el informe comentó: “Eso habla claramente de la perspectiva focal del trabajo de periodistas que no contextualiza a otros temas” y que los encuadres expuestos muestran “sólo una parte del fenómeno de la violencia en la sociedad, el suceso emergente, el hecho extraordinario, quedando en lo oscuro los profundos entramados que la causan, que la reproducen y perpetúan”.

La escasa referencia a las normas en notas de prensa es algo que Voz y Vos ha mencionado en todos sus informes. El CNA sólo había sido mencionado en 2,5% de los textos analizados en 2007 y en el primer semestre de 2011 trepó a 58%; la Convención de los Derechos del Niño estaba en 1% de las narraciones de los informes previos, y en el semestre pasado alcanzó el 4%, pero Albarracín agregó que se trata de una “mención al pasar”, “burocrática”. Por otra parte, decreció la mención a las políticas públicas y llamó la atención el escaso tratamiento del tema en la sección Sociedad de los periódicos “donde generalmente este tipo de asuntos son complejizados, al vincularse con asuntos como la educación, la pobreza y la cultura”, dice el documento.

Se halló que el tema tuvo mayor presencia en los editoriales y columnas de opinión, pero se marcó que en 79 de esas 85 notas utilizaron términos peyorativos o estigmatizantes.

Respecto a las fuentes utilizadas, hay un predominio de las gubernamentales, una de cada cuatro notas consultó a alguien de la sociedad civil y una de cada diez a la comunidad educativa y a expertos.

El informe detectó que una palabra muy vinculada al CNA fue “obsoleto”, y Albarracín precisó que la referencia se hizo con respecto a todo el código, y no a algunos artículos, cuando la norma contó, en 2004, con el voto de todos los partidos políticos.

Finalmente, la agencia hace recomendaciones para el abordaje de temas. Proponen que los periodistas incorporen una perspectiva de derecho porque los adolescentes infractores continúan siendo sujetos de derecho; no sólo mostrar la faceta delictiva del infractor dado que, seguramente, además de ser victimario ha sido víctima; y respetar el derecho a la privacidad. Sobre este tema, la periodista Andrea Tabárez señaló que las imágenes que registran las cámaras de seguridad de los comercios se pasan tal cual, pudiendo claramente identificar al niño o adolescente, y mencionó que la identidad también es revelada al usar seudónimos o al describirlos.

La socióloga e investigadora Nilia Viscardi sugirió “construir una agenda real, tratada en los espacios que corresponda” de modo que el abordaje de los asuntos de la infancia incluyan distintas perspectivas y factores relacionados. Evaluó que hay una sobre exposición del tema de los adolescentes infractores, y que al hablar de ellos se silencian las infracciones cometidas por conductores de tránsito, por violencia doméstica y los delitos de cuello blanco, por ejemplo.

Julio Bango, diputado y sociólogo, remarcó que de 2000 a la fecha los delitos que involucran a niños y adolescentes no han aumentado y que la distorsión se produce al considerar los registros del Ministerio del Interior, que anota a todo el que ingresa a la seccional sin considerar si la Justicia lo encuentra culpable o lo absuelve. Respecto al informe, Bango opinó que el desplazamiento del tema seguridad de la crónica roja al campo político “no necesariamente indica un progreso”.