En un partido que debía ganar para no perder pie en la carrera en pos del Torneo Clausura y el Uruguayo, Nacional derrotó a Central Español y llegará al clásico del 8 de mayo en la cima de las dos clasificaciones.

Tras caer el fin de semana ante River Plate y eliminado de la Copa Libertadores luego del magro empate ante el América mexicano, el equipo tricolor tenía en la tarde de ayer en el Parque Central la necesidad  de sumar de a tres para recuperar la tranquilidad y la sonrisa perdidas a causa de los dos reveses sucesivos, y consiguió el objetivo. Los dos primeros goles de Nacional, uno logrado en el inicio del juego y otro en el amanecer del segundo tiempo, encarrilaron el juego a favor de los locales, que fueron amplios dominadores ante el limitado equipo palermitano, metido de lleno en la pelea por no perder la categoría.

Una vez más, Carrasco metió mano en el plantel y Nacional salió ayer con una alineación novedosa, en la que tuvo lugar por primera vez el juvenil Nicolás López, quien con tan sólo 17 años se estrenó de buena manera con la camiseta tricolor. El delantero apodado Conejo -al ver el lozano rostro del adolescente se despeja cualquier pregunta acerca del origen de su mote-, esmirriado y aparentemente zurdo cerrado, jugó muy bien e incluso metió el tercer gol de su equipo, destacándose en la ofensiva tricolor junto con Tabaré Viudez, ayer, figura una vez más. El jugador nacido en las inferiores violetas fue un azote para sus rivales y además tuvo el plus de haber abierto el marcador con un muy lindo gol de tiro libre. Esa anotación tempranera le dio cierta tranquilidad a Nacional. Si bien el escueto 1-0 se mantuvo hasta los primeros  minutos del segundo tiempo, siempre estuvo más activo el arquero palermitano De León que el tricolor Burián. Antes de los 30 minutos de partido Carrasco mandó a la cancha a Gallardo y sacó al brasileño Carlão, pero el aporte del argentino se vio en cuentagotas porque en el inicio de la segunda parte se sintió y debió retirarse de la cancha. Sin dudas la salida del Muñeco es la consecuencia más negativa que quedó para los tricolores tras el partido; hasta el día del clásico habrá especulaciones sobre el estado sanitario del jugador argentino, cuyo talento -junto con el aporte goleador del Morro García, ayer ausente por lesión- ha sustentado los mejores momentos  de Nacional en el semestre. El gol del batallador mediocampista Facundo Píriz clausuró una parte del juego e inauguró otra. Con más espacio en la cancha por el adelantamiento rival, los locales dispusieron de muchas  chances de anotar, en una de ellas el debutante López decretó el 3-0 parcial y después los palermitanos llegaron al descuento cerca del final, aunque ya a esa altura y desde hacía rato la mayoría de los presentes en el Parque Central había empezado a pensar en el enfrentamiento ante el rival tradicional, que tendrá lugar en dos semanas.

En el triangular que empezará en la próxima fecha, que disputarán en las próximas tres etapas los grandes y Defensor Sporting, se definirá el Clausura y la tabla anual.