Félix, un chico pelirrojo con muchas pecas en la cara, esperaba con aparente tranquilidad que comenzara la ceremonia de entrega de premios de "Animate II". Junto a él estaba su padre, que con orgullo lo abrazaba y le acariciaba la cabeza, y dos por tres Félix se alejaba porque el exceso de afecto lo fastidiaba. La explicación de tanto abrazo y caricias estaba en el orgullo que sentía por su hijo en ese momento, quien fue único ganador del departamento de Rocha por la escuela Nº 52 de La Paloma.

Al ser consultado por la diaria el padre de Félix contó que su hijo se enteró del concurso cuatro días antes de que cerrara el plazo para presentar las propuestas y en esos días resolvió su corto con ayuda de la familia. "Fue toda iniciativa de él; se lo propuso y lo armó solo. Agarró a los abuelos, a los hermanos, a toda la familia, usó sus voces y nunca nos esperamos que fuera a ganar, aunque en realidad siempre lo motivamos y siempre le tuvimos fe porque él es capaz", señaló. El diseño y la diagramación del corto en la Ceibalita los hizo sin ayuda del padre: “¡Él me da una mano a mí en lo que es tecnología y comunicación!”, compartió.

Cuando Félix se unió a la conversación habló sobre la consigna y el proceso creativo desarrollados. El tema propuesto por Efecto Cine y por Plan Ceibal fue “¿Cómo te imaginas al Uruguay en 200 años?”, con motivo de las celebraciones del Bicentenario.

"Yo me imaginé un Uruguay con avances tecnológicos, con robots que juegan, que te sirven la comida, y autos voladores que van a ser muy rápidos", contó Félix. En relación al proceso de trabajo, dijo que en los cuatro días de trabajo fue agregándole información al archivo y que no le contó a ningún compañero que se presentaría al concurso. De hecho tampoco tuvo tiempo de contar en la escuela que resultó ganador porque le avisaron el lunes y ya habían comenzado las vacaciones de invierno.

El rostro de Mary Rodríguez, la madre de Antonella, también reflejaba el orgullo que sentía por su hija, ganadora por la escuela Nº 31 del departamento de Treinta y Tres. Ella sí ayudó en la creación del corto y le enseño a usar la XO. Al ser maestra, ese trabajo le resultó fácil.

"Yo pensé en las mejoras que podría haber en Uruguay, en lo positivo", contó Antonella. Fue así que planteó un Uruguay con energías renovables y con alternativas. "Hizo el corto en casa, le fue armando y guardando las ideas, y entre todos la fuimos ayudando a programar", recordó Mary, quien valoró las XO por las capacidades que brindan a los pequeños. "Yo trabajo con ellas porque los chiquilines avanzan en el manejo de la imagen y del movimiento; lo que ellos pueden crear es maravillo. En el caso de mi hija, tiene impecable y cuidada la Ceibalita justamente porque le encuentra provecho". El representante de Rocha, dijo que mantenía su computadora, aunque apuntó que no siempre hay un buen cuidado de las máquinas ni siempre las aprovechan. Mencionó a su hermana, quien se conecta a Facebook mientras la maestra da la clase.

Por su parte, Darío Grenni, director de una escuela rural ubicada en Barrancas Coloradas, en Canelones, y a la cual asisten 40 alumnos, también se refirió a las posibilidades que brindan las Ceibalitas. "La herramienta se aprovecha mucho, trabajamos bastante con las XO porque es un recurso muy bueno, más aun en una escuela rural, porque no tenés medios para conseguir información", comentó a la diaria.

Sostuvo que las computadoras les han abierto muchas puertas a los chicos y que les tienen "prohibido" utilizarlas solamente para entretenimiento. "En la escuela, por ejemplo, no pueden utilizar juegos, además les pedimos que no carguen algunos en las máquinas porque se estropean, ellos saben que en la escuela es una herramienta de trabajo, que les sirve ahora y para el futuro".

Los alumnos de cuarto año de la escuela rural fueron quienes se presentaron al concurso y resultaron ganadores. Entre varias alumnas explicaron el proceso: "Primero trabajamos con el Bicentenario, después, en ideas que junto con los compañeros pensamos: autos voladores y pantallas táctiles", detalló Julita. "Pensamos que no había que venir a la escuela porque era todo por computadora", agregó Soledad. Y remató el cuento Aldana diciendo que también imaginaron robots que hacen las tareas domiciliarias.

Todos los chicos describieron cómo son sus cortos, mientras que los asistentes los imaginaron puesto que no se proyectó ninguno de los trabajos premiados, aunque se mostró un clip que compilaba todas las propuestas.

Efecto contagio

Diego Parodi, director de Efecto Cine, explicó a la diaria que el rol de los maestros es fundamental, ya que promueven el uso de la XO y el desarrollo de este tipo de propuestas. Son referentes. “La maestra o el maestro, en algunos casos los directores, influyen enormemente, al punto que hay dos chicos premiados en la ciudad de Rosario, pero son de dos escuelas diferentes. ¿Cuál es el factor común? La maestra, quien da clases en ambas escuelas y en los dos turnos, y quien incentivó a los dos grupos a trabajar bajo esta consigna”, señaló.

En cuanto a las animaciones, Parodi, quien participó en la elección de los cortos, expresó: “Es muy bueno; los niños dan una visión muy optimista del Uruguay en 200 años”.

En tanto, Roberto Elizalde, director de Centros MEC, reflexionó sobre los beneficios de generar contenidos. Destacó que si bien es importante ver y acceder a imágenes de otras comunidades, saber cómo piensa y cómo viven esas personas, es igual de importante “que seamos capaces de producir nuestras propias imágenes, para no convertirnos en consumidores eternos de imágenes que producen otros”.