La noticia cayó como una bomba en las primeras horas de la tarde de ayer y fue Martín Charquero quien la dio: Diego Aguirre renunciaba a la dirección técnica de Peñarol porque continuará su carrera en Qatar, desde donde le llegó una oferta suculenta que aceptó, poniendo abruptamente fin a su tercer ciclo en el cargo. A las 7.00 Aguirre confirmó su nueva vinculación con el Al-Rayann, el club qatarí de camiseta roja y negra. La especie no había circulado hasta que Charquero sacudió el ambiente.

El tercero

La de ayer fue la tercera despedida de Aguirre de la dirección técnica aurinegra. La primera se dio en los primeros días de diciembre de 2004, luego de perder el clásico del Clausura 3-2 tras ir ganando 2-0. Tomó su puesto un tiempo después Fernando Morena. Antes había ganado el Uruguayo 2003 y había relegado a Pablo Javier Bengoechea. En el final de la temporada 2009-2010 y luego de haber consagrado campeón a Peñarol en el ámbito local, Aguirre se fue de nevo. Faltaba poco para el Mundial de Sudáfrica, y era un secreto a voces que Aguirre era el principal candidato para reemplazar a Óscar Tabárez, dado que su contrato expiraba en el Mundial. Así fue que tras el breve pasaje de Manuel Keosseian, el héroe de la final de la Copa Libertadores de 1987 volvió al club hasta este último adiós, o más bien hasta luego.

De ahí en más el centro de la cosa estuvo en Los Aromos, donde los carboneros harían su primer entrenamiento tras la victoria del sábado contra Defensor Sporting. La confirmación de la noticia vino de la mano con la especulación del nuevo entrenador, que tomará a este Peñarol puntero e invicto del Apertura.

Gregorio Elso Pérez fue confirmado en las primeras horas de la noche como el sustituto del renunciante.

No fue una práctica

Cuando Aguirre llegó ayer a Los Aromos la decisión estaba tomada y comunicada. También ya a esa altura se sabía que junto al ex goleador se irían el ex arquero de San Ramón, Enrique Carreras y el profesor Fernando Pignatares. Se sabía que se iba y por ello los periodistas llegaron en masa, propiciando una conferencia de prensa donde Aguirre contestó con soltura y emoción.

“Fue bastante inesperado y sorpresivo para mí también, no es sencillo de entender, pero a veces las circunstancias conducen a eso” fue lo primero que expresó, aclarando que la decisión se había tomado entre otras cosas “porque en realidad hay una posibilidad de vincularme a un proyecto muy importante en lo deportivo y económico. Surgió y no es una decisión sencilla para nada”. Según algunas versiones, el Al-Rayann, por intermedio del grupo económico que lo maneja -que es el mismo que conduce al París Saint Germain-, le ofreció un contrato de seis millones de dólares por dos años. “Fue muy rápido, hablé con el presidente y obviamente no estaba de acuerdo. Quería que continuara, pero también nos dimos un abrazo porque hay un agradecimiento mutuo por todo lo que hemos vivido juntos. Entiendo a los hinchas, que haya gente que no lo pueda entender. Eso es algo bastante personal y mi idea no es molestar a nadie”, confesó el ex técnico aurinegro.

Consultado por la reacción de una parte del público mirasol, que ha rechazado y descalificado la ida del entrenador, Aguirre manifestó: “Entiendo que haya gente que no comprenda esto, pero mi idea no es agradar a nadie, sino hacer lo mejor. A veces lo habitual no es que se vayan los entrenadores, lo normal es que los echen. Esto es algo distinto, así como se han ido muchos de los jugadores. Han surgido posibilidades muy fuertes para todos”.

Cuando le preguntaron acerca de si Peñarol había cumplido con los términos del último acuerdo La Fiera enfatizó: “En Peñarol se me cumplió todo lo que estaba en el contrato. Juan Pedro Damiani es un fenómeno y los dirigentes me han tratado de forma increíble. No hay nada raro ni diferencias de ningún tipo. Hemos disfrutado dos años espectaculares. No me olvido de cuando llegué, de cómo eran las cosas y de cómo son hoy. Me siento feliz por las cosas que se lograron”.

Habló también de Juan Figer, el empresario que lo lleva: “Él me conectó con la misma gente que llevó a Lugano. Es un empresario amigo de muchos años, no es que me quiera sacar de Peñarol. Son temas de fútbol.”

El empresario uruguayo, que desde hace décadas está radicado en Brasil, donde ha hecho las más grandes transacciones deportivas, fue el que llevó a Aguirre cuando era el héroe del Peñarol del 87 a la Fiorentina, Olimpiakos y San Pablo, entre otros, y ya a principios de año lo había intentado conectar con el Atlético Paranaense. Consultado acerca de si ya había recomendado a Jorge Gonçálvez, Aguirre dijo: “Yo no recomendé a nadie y las opciones que tengan serán las mejores”.