Muy de vez en cuando la distancia entre las expectativas y los hechos es tan grande como la que resultó de la disputa del partido entre Peñarol y Wanderers. No porque Peñarol no pudiera ganarlo. Más bien, por cómo derrotó a uno de los equipos más respetables del Clausura. La victoria fue incuestionable pero, más que eso, sorprendió la disparidad de los rendimientos.
El 5-1 definitivo se instaló a los 88 minutos. En el final de un segundo tiempo que sobró: el primer período terminó 4-1. En 45 minutos, Peñarol acumuló pasajes de buen fútbol atados a una gran tarde del Lolo Estoyanoff, desnudó enormes dificultades del arquero y de la defensa de un Wanderers desconocido y aseguró tres puntos que cambian las caras en la sala de espera del clásico de la semana que viene.
Su fútbol mantuvo la línea ascendente de los últimos días. El Lolo puso en debate continuo el sistema que en la ficha adjunta figura como 4-4-2. Bien pudo decir 4-3-3. Arrancó desde atrás, pero sus subidas por la derecha fueron continuas y lo pusieron a la misma altura que Zalayeta y Mora. A los 10 minutos recibió de Novick para poner el 1-0 y a los 20 combinó magistralmente con Mora para definir mejor y marcar el segundo. Alcanzó para evidenciar que la defensa de Wanderers había salido a jugar al distraído, más que al fútbol.
Ya eran muchos los balones mal jugados que, sobre el cierre del partido, se volverían innumerables. Raro en un equipo amigo de la pelota como pocos, en el que los centrales Méndez y Lago parecieron cualquier cosa menos los buenos y experimentados jugadores que son. El arquero Britos, que desde la fecha pasada desplazó al banco a Martín Rodríguez, estuvo a kilómetros de distancia de aquel que surgió con fuerza en el Bella Vista de Pablo Alonso. Falló en goles, en jugadas que perfectamente pudieron costarle más y también al sacar. Demasiado error junto ante la lucidez del Lolo y sus amigos. Mora estuvo muy despierto para jugar y también definió. Zalayeta y Aguiar acompañaron bien y Novick habló en cada quite: “Che, Polilla, quiero jugar el clásico”.
Pese a la alta y rápida efectividad de Peñarol, la sensación de victoria holgada recién llegó a la media hora. Aguiar marcó el tercero cuando ya hacía un buen rato que la defensa aurinegra se diferenciaba de su similar bohemia. No fue siempre así. Porque el primer Wanderers de la tarde complicó gracias a que Maxi Rodríguez encontraba socios para combinar tras trasladar, como el subidor Sandoval, Pacheco y el grandote Mercado, que llegó a empatar transitoriamente. Pero Alejandro González lideró las respuestas y tapó baches para proteger más al arquero Gelpi, cuyo comienzo no fue bueno. De a poco, el funcionamiento del equipo de Arias empezó a decaer, al punto tal de que hubo futbolistas importantes que casi no incidieron: ¿alguien supo algo del Chapita Blanco?
Tras el 4-1 que Mora mereció y marcó antes del entretiempo, el complemento fue puro protocolo. Con más llegada que un desconocido Santiago Martínez, el volante Gagnebin arrimó alguna brasa que no evitó que Wanderers fuera apenas tibio. Cabrera fue más incisivo, tanto por la derecha como por la zurda. Pero Santiago Silva se entendió bien con el ingresado Pedro, que mientras se sacudía la escarcha del freezer lo puso rumbo a un quinto gol ratificatorio: Peñarol peleará por esa tabla anual que vuelve a guiñarle un ojo. Una pizca más de condimento en la olla clásica del domingo que viene.
Detalles
Estadio Centenario. Árbitros: Andrés Cunha, Muniz, Sebastián Silvera y Andrés Martínez.
Wanderers (1): Seba Britos (no); Jonathan Sandoval; Marcelo Méndez; Alejandro Lago (46’ Hernán Menose); Diogo; Santi Martínez (46’ Gagnebin); JR Curbelo; Tony Pacheco (algo); Maxi Rodríguez (un poco); Chapita Blanco (sin peso; 57’ Cangrejo Cabrera, puso ganas); Richard Mercado. DT: Alfredo Arias. SUP: Martín Rodríguez, Guzmán Pereira, Diego Riolfo y Maxi Olivera.
Peñarol (5): Toto Gelpi (+ o -); Emi Albín; Milito Silva; Ale González (manda); Darío Rodríguez; Lolo Estoyanoff (clap, clap; 79’ Monoco Zambrana); Marcel Novick (sí); Cristóforo; Lucho Aguiar (sentido; 46’ Pedro, desde el freezer); Zalayeta (65’ Santiago Silva); Pulga Mora (bien). DT: Jorge da Silva. SUP: Lerda, Amodio, Ñol Álvez y Hormiga Valdez.
Goles: 10’ Estoyanoff (P) recibió un gran pase de Novick, remató fuerte y al medio, pero el arquero Britos no pudo detener la pelota, que se le coló por arriba; 14’ Mercado (MW) cabeceó desde lejos un centro de Maxi Rodríguez y la metió alta y en caída; 20’ Estoyanoff (P), que definió bajo y contra un palo tras una gran combinación con Mora; 30’ Aguiar (P) con remate bajo, lejano y cruzado; 44’ Mora (P) tocó en la línea luego de una incursión de Albín por la derecha; 88’ Santiago Silva (P) con remate cruzado posterior a un pase de Pedro.