“¡Uh, ah, Chávez no se va!”, gritaron ayer los seguidores del presidente de Venezuela, que llevaba una campera con los colores de la bandera de su país y una boina roja. En el último día para inscribir candidaturas a la presidencia, el oficialismo realizó un acto multitudinario, en el que puso fin a la remarcada ausencia pública de su líder en la previa de la campaña.

Chávez lucha desde hace un año contra el cáncer y la información sobre su estado de salud es difusa, lo que alimenta las especulaciones al respecto. Ayer un alto funcionario de su administración dijo a la agencia de noticias Reuters que el presidente había descansado y se había preparado para el acto de ayer y que “se está recuperando”, lo que justificaría su ausencia de las últimas semanas en la campaña. El sábado Chávez dijo que le fue “absolutamente bien” en una serie de estudios médicos a los que se sometió en los últimos días en su país, después de dos meses de radioterapia en Cuba.

Los venezolanos eligen presidente el 7 de octubre, y ayer la inscripción de Chávez como candidato a su tercera reelección fue una oportunidad para mostrar fuerzas, tanto las del presidente como las del oficialismo, que sigue encabezando los sondeos.

Un día antes había registrado su candidatura Henrique Capriles, el candidato detrás del cual se encolumnan los distintos sectores opositores. Llegó a pie al CNE, en medio de otra multitud. Allí Capriles opinó que el 7 de octubre está en juego la elección “no entre dos hombres, sino entre dos opciones de vida”.

Desde el camión que lo transportaba, Chávez saludó a miles de seguidores que lo esperaban a su paso. Estuvo acompañado por sus hijas Rosinés y Rosa Virginia, su vicepresidente, Elías Jaua, el presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, entre otros dirigentes del oficialismo. El vehículo lo llevó desde el Palacio de Miraflores hasta la sede del CNE en el centro de Caracas. Si Capriles destacó su buen estado físico al llegar caminando, el presidente lo hizo con su posición como gobernante por el recorrido elegido.

En el interior del país, en las plazas Bolívar de cada municipio se instalaron pantallas gigantes para que la población pudiera ver el acto. “¡Uh, ah, Chávez no se va!”, “¡Chávez, te amamos!”, “¡Pa’lante, comandante!”, gritaban sus seguidores en Caracas al tiempo que intentaban estrechar su mano.

En tanto la oposición denunció que los empleados públicos habían tenido el día libre y que algunos habían asistido al acto obligados.

Chávez entregó también ayer su plan de gobierno 2013-2019. Según el canal TeleSur, sus principales metas serán “avanzar en la satisfacción de las necesidades sociales, reimpulsar la economía nacional y mantener el crecimiento de la inversión social” en el país. En el acto solemne de entrega de su candidatura para los comicios en manos de la presidenta de la Corte Electoral, Tibisay Lucena, el mandatario prometió “ante Venezuela y ante el mundo reconocer los resultados de las próximas elecciones presidenciales del 7 de octubre”, destacó el diario venezolano El Nacional.

También dijo que “las elecciones tienen que ser más que el tradicional carnaval electorero”, declaró su intención de “seguirle dando cada vez más solidez a las instituciones de la República”, al tiempo que insistió: “Nunca antes en toda la historia política venezolana un árbitro electoral había tenido el tamaño y transparencia del de hoy; yo me rindo ante ustedes como árbitros”.