La tarde arrancó primaveral y terminó invernal en el Centenario. Empezó con todo, eso sí, porque a los tres minutos, tras un córner, el Kily González metió un cabezazo y la mandó a guardar. 1-0 para River y baldazo de agua fría para Peñarol. Ya tenía pinta de buen partido. Después no fue así porque ninguno de los dos equipos jugó bien, pero para los espectadores presentes seguro que fue apasionante.

A los 13 minutos el equipo del Polilla da Silva no sólo perdía por un gol sino que pasó a jugar con diez por la expulsión de Damián Macaluso. Roja directa y partido cuesta arriba para Peñarol. Cualquiera podría pensar que la dársena iba a manejar el encuentro a su antojo con la ventaja en el resultado y con un futbolista más, pero no supo 
aprovecharlo.

Peñarol, a puro corazón, metiendo, con pelotazos a Juan Manuel Olivera y Marcelo Zalayeta, se fue arrimando al arco de Damián Frascarelli. De a poquito le generó peligro a River y el empate llegó porque Juan Manuel Olivera encontró un balón en el área que vino de un rebote en el cuerpo de Darío Rodríguez. El Flaco se barrió y se la puso rastrera al ángulo inferior derecho de Frascarelli. 
1-1 pero faltaba otra situación importante: la expulsión directa de Marcelo Zalayeta. Se tiró al piso frente a Santiago Carrera y Prudente le sacó una roja absolutamente inmerecida.

Tablas

En el segundo tiempo Guillermo Almada mandó dos cambios para tratar de abrir la cancha y aprovechar la ventaja numérica. Entraron el colombiano John Varela y Bruno Montelongo. El Kun Varela cada vez que entra complica a medio pueblo con sus enganches, y Montelongo, que entró por la derecha, no pudo hacer los surcos a los que nos tenía acostumbrados pero intentó por ese sector y en algún momento puso a Peñarol contra su arco. Los carboneros atinaron al ataque solitario de Olivera, que luchó todas y corrió un disparate. Ya sin Zalayeta, se tuvo que multiplicar y terminó siendo una de las figuras de la cancha junto con Leandro Gelpi, de gran desempeño. Estuvo muy seguro el juvenil golero aurinegro. En los últimos minutos el partido estaba para los dos y para ninguno, se estancó, se entreveró y el que terminó arrinconando a River fue Peñarol, con el empuje de la gente y metiendo pata a lo loco. Olivera obligó a los defensores darseneros y sacó un par de tiros de esquina sobre el final. River, de contra, tuvo la última jugada pero tampoco supo aprovecharla.

Con nueve, Peñarol se llevó un punto que puede ser valioso en el final. De todos modos, ya perdió cinco puntos y el arranque del Apertura no es bueno. River llegó a cuatro puntos y a pesar de no haber aprovechado los dos jugadores de más que tuvo, no es un mal resultado el empate en el Centenario.