La selección de las seis familias que habitarán la pensión estará a cargo del Programa de Atención a Personas en Situación de Calle (PASC), que trabaja actualmente con 1.550 personas en diferentes refugios del país.

El inaugurado ayer "es un hogar de medio camino; una posibilidad para que mujeres con hijos puedan ir trazando su senda", comentó el ministro de Vivienda, Francisco Beltrame. La directora de PASC, Rosa de León, indicó que desde el programa "no se puede establecer un plazo estricto" que lleve a que, cumplido un año de permanencia en el lugar, la familia automáticamente deba abandonarlo. "El trabajo procurará que egresen entre los seis y 12 meses de haber ingresado. Tal vez las características de algún núcleo puedan llevar a que egrese antes o a que tenga que quedarse más tiempo", señaló. Añadió que incluso tras el egreso continuará el seguimiento; durará entre seis meses y dos años, "dependiendo del tipo y de la calidad" en que se da. Las familias aún no han sido seleccionadas, pero sí se estableció que, independientemente de que alguna pueda provenir de otro refugio, se priorizarán aquellas "que no ingresaron todavía al circuito", indicó De León. La directora Nacional de Vivienda, Lucía Etcheverry, subrayó que el equipo multidisciplinario que aportará el Mides "trabajará las 24 horas en la convivencia, en los procesos de fortalecimiento de oportunidades, en atención sanitaria, inserción laboral y en la estimulación y recomposición de los vínculos educativos de los niños".

El ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, destacó el aumento de refugios diarios; pasaron de ser 10% a ser 40% del total, explicó. Un patio español en el que llegó a haber un aljibe, y en el que aún persiste una esterilla de madera bajo las chapas, será el espacio social por excelencia en la casona que también tiene otro patio, forestado y en el fondo. La edificación, de la primera mitad del siglo XX, tiene altillo, una cocina amplia, dos baños, y un corredor con una enorme claraboya en punta. Los ambientes privados son seis. El inmueble es propiedad del MVOTVA desde 2009 y en su refacción se invirtieron 4.500.000 pesos. Podrá albergar en total a 25 personas. El Mides lo tendrá en comodato durante dos años, con opción a dos más para continuar implementando el PASC. Durante el proceso se trabajará en "la búsqueda de la inclusión con autonomía", explicó De León, que destacó que el inmueble, de un área de 460 metros cuadrados, "está cerca de todos los servicios, desde el punto de vista del transporte, la educación, sanitarios, etcétera".

El después viene con más

Olesker subrayó que la población que participa en los programas de tipo focalizado, a posteriori, comienza a empoderarse y por ende a reclamar más derechos; por eso se apuesta a la inclusión en programas universales. “Al ejecutar los programas prioritarios sabíamos que en éstos iba a haber una convergencia de demanda que implicaba que hacerlos por separados habría significado despilfarrar recursos y no ser eficientes ante la demanda. Sabemos también que cada vez que damos un paso más en el proceso de inclusión social, la demanda de la gente es exponencial. [...] Cuando recuperan sus derechos y se les da oportunidades para encontrar salidas a su situación, exponencialmente surgen demandas que van más allá de la salida de la situación de exclusión. Las políticas focalizadas deben ir acompañadas de políticas universales. Si nuestro pensamiento es de trayectoria, de salida, de autogestión de la salida hacia mejores formas de vida, es clave el vínculo entre lo focalizado y lo universal”, indicó. Subrayó que se observa que muchos de los participantes en los programas prioritarios “nacieron a comienzos de los 90 y tuvieron sus niños después de la crisis de 2002; nacieron en la exclusión, cuando las políticas económicas, sociales y habitacionales no daban soluciones sino que trasladaban el problema eludiéndolo”. Beltrame añadió: “Gran parte de esa población nació o se crió en la década en la que las políticas públicas se caracterizaban por el falso igualitarismo; en vivienda fue la época del talle único, un talle 31 para los zapatos de todo el mundo, así calzasen 28, 35 ó 40. A algunos les quedaban grandes y a otros les quedaban chicos”.