La historia del fútbol en gimnasios cerrados de Uruguay se divide entre dos escenarios: la Federación Uruguaya de Fútbol de Salón (FUFS) y la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF). Ambas entidades están integradas por equipos representativos de la capital del país, que juegan sus respectivos torneos metropolitanos, y tamdel interior, que suelen participar de los torneos regionales, nacionales y/o uruguayos dependiendo de la confederación que integren. Comúnmente es muy confuso para quien no esté cercano al tema.
La FUFS, que tiene como fecha de fundación el 8 de setiembre de 1965, aunque difunde el deporte desde 1930, está disputando el Campeonato Uruguayo 2013. En este momento se están desarrollando los play off por cuartos de final. Ya están dentro Río Branco, Jave de Treinta Tres (que se cruzarán en semifinales) y Solís. La primera que se resolvió por esta instancia fue la que ganó Río Branco a Independencia de Florida (¿o Florida El Tanque?) que repitió victorias de 11-9 en el 10 de Julio de Florida y 14-4 en Río Branco.
El sábado se resolvieron las llaves de Urupán contra Jave y Solís frente a Los Abstemios. El Jave olimareño volvió a ganar, esta vez 5-4 (en Pando había triunfado 6-4), y es semifinalista al igual que Solís, que logró avanzar por diferencia de goles tras caer en Mercedes 4-1 con Los Abstemios. En Pando Solís había triunfado 9-5, y por ese gol siguen adelante. Sólo queda por resolver la llave entre los salteños de U 5 y Deportivo La Amistad, que había ganado 6-4 en Salto.
La AUF está atravesando los juegos definitorios en los campeonatos Metropolitano y Regional. En Montevideo, el Metropolitano terminó con Nacional y Peñarol, pero resta por resolver si habrá final o no. Lo cierto es que ya están adentro en la Súper Liga junto con Malvín, Boston River, Banco República, Racing, Dolores y Rampla Juniors.
A nivel regional la competencia está subdividida entre oeste y este, con cinco equipos cada serie. Los cuatro primeros pasarán a la Súper Liga, cuyo comienzo está previsto el 31 de agosto. Florida El Tanque salió campeón del Regional Este y entró en la Súper Liga al ganarle 7-6 a Defensor de Maldonado. El sábado jugaron Juan Luján, Gonzalo López, Esteban Lorier, Martín Colombo, Federico Cabral, Joaquín Rama, Juan Montero, Giovanni González y Joaquín Batista, y fueron dirigidos por Pablo de Palleja. El último partido que había jugado Independencia de Florida en fútbol sala también había sido dirigido por Pablo de Palleja y jugaron Diego Martínez, Gonzalo López, Federico Cabral, Martín Colombo, Esteban Lorier, Juan Luján, Santiago Bruno, Giovanni Gónzalez, Joaquín Batista, Pablo Montero, Joaquín Rama e Ignacio Colombo. Mismas personas, distintos cubles y distintos deportes.
Un mismo escenario, dos modalidades. No es lo mismo, porque no todo es lo que parece. Los intereses no son solamente nacionales; internacionalmente el tema fue y es muy complejo, entre cambios reglamentarios y tergiversaciones en las siglas o nombres. Conviene repasar el pasado del deporte inventado por un uruguayo.
La historia profana
El profesor Juan Carlos Ceriani creó el fútbol de salón en 1930, en la sede de la Asociación Cristiana de Jóvenes (ACJ), como una respuesta para saciar el hambre de fútbol que imperaba en un país que acababa de consagrarse campeón mundial de fútbol. Inspirado por los inventores del básquetbol y del vóleibol, James Naismith y William Morgan, y con base en la esencia del fútbol, Ceriani redactó las primeras reglas: del básquetbol tomó la cantidad de jugadores, las faltas personales, el tiempo de juego y las sustituciones de hombres; del balónmano la dificultad de no poder tirar al arco desde cualquier lado, sino desde cierta distancia; y del waterpolo la reglamentación relacionada con el arquero. En el mismo sentido, buscó que el balón tuviera cierto peso y menor dimensión, para que no picara mucho. Un visionario que pensó en todo, don Ceriani.
Si bien y merced al impulso que la ACJ le dio a nivel mundial el fútbol de salón fue un éxito desde temprana edad, debió esperar varios años para estar institucionalizado a nivel internacional y nacional: en Brasil nació la primera organización en 1955, y en Uruguay diez años después.
Desde entonces todo fue más rápido, y en 1969 se fundó en Asunción del Paraguay, junto con Brasil, Argentina y Paraguay, la Confederación Sudamericana de Fútbol de Salón. Curiosamente, dos años más tarde nació, a instancias de un tal João Havelange, la Federación Internacional de Fútbol de Salón. No sería un hecho casual.
En 1985 la FIFA, coincidentemente presidida por João Havelange, pretendió que todas las instituciones de salonismo pasasen a depender de ella por el mero hecho de utilizar la palabra fútbol en la conformación de su sigla, y comenzó un plagio al fútbol de salón, que llamó fútbol 5.
La relación se llevó al extremo cuatro años más tarde, cuando en “1989 el fútbol de salón le dio un rotundo no a la integración con FIFA por una amplia mayoría. Ello trajo aparejado el alejamiento de Brasil por compromisos asumidos con Havelange pasando a formar parte de una comisión de FIFA casi todos sus dirigentes, quedando solos en el mundo sin rumbo ni competencia”.
Los caminos en el plano internacional se pretendieron acercar, pero no hubo éxito. La FIFA impulsaba a todas sus asociaciones afiliadas a reclamar formalmente que donde existieran asociaciones de fútbol de salón se reconocieran sus independencias (jurídica, técnica y deportiva) para torneos locales, pero para competencias internacionales deberían utilizar la afiliada a FIFA. ¿Cuál fue el primer lugar en que firmaron esto? Sí, Uruguay. En el resto del mundo la ordenanza no fue acatada y se siguió manteniendo los dos deportes en forma independiente. La FIFA nunca cumplió tan siquiera lo pactado.
En Uruguay llegó a disputarse un torneo integración con la intención de acercar posturas, pero la AUF no respetó las cláusulas exigidas por el salonismo y se dejó sin efecto ese convenio. Además, y apoyando la causa del fútbol de salón, en abril de 2008 la Suprema Corte de Justicia emitió una sentencia definitiva que dio la razón a la Federación sobre la AUF ante la demanda por el uso de la palabra futsal, patente que tiene la FUFS desde 1998. El verdadero y único progenitor, niño prodigio de la escuela de don Ceriani, sigue consolidando el deporte del fútbol en espacios reducidos, aun ante el poderío económico y prepotente de la FIFA.