A medida que pasan los días, la Liga Uruguaya de Básquetbol (LUB) ingresa poco a poco en su etapa más caliente. Esta noche comenzarán las semifinales. A las 21.15, en el Palacio Peñarol, Malvín y Atenas abrirán la primera serie, en busca de las finales del torneo. A priori los malvinenses dirigidos por Pablo López son los favoritos en esta llave, en la que pretenden avanzar para jugar nuevamente una final, algo que nunca hicieron en la LUB los albicelestes de Palermo, que intentarán dar el batacazo. Mañana no hay básquetbol, pero el miércoles las emociones volverán al Palacio Peñarol con el primer duelo semifinal entre Aguada y Defensor Sporting.
Los cuatro mejores
Las semifinales de la LUB quedaron establecidas y ya se conocen los cuatro mejores equipos de la temporada, que, una vez más, son los que consiguieron estas posiciones en la temporada regular. Es así que las llaves están más que dadas.
Malvín va con Atenas, en una serie que promete y mucho. El playero fue el mejor en el enfrentamiento de todos contra todos y quiere revalidar esa ubicación en el rectángulo de juego. El elenco de Pablo López fue el único en barrer en su serie de cuartos de final, contra Goes, y por eso mismo hace algunas semanas que no juega. Malvín tiene el plantel más largo del medio, con jugadores desnivelantes que pueden cambiar el trámite del partido en cualquier momento. Por su parte, Atenas tiene herramientas para lastimar y también hace bastante que no compite en el suelo del Palacio Contador Gastón Güelfi. La dupla de extranjeros compuesta por Michael Sweetney y Johwen Villegas es la carta en ofensiva.
La otra llave de semifinales la protagonizarán los últimos dos finalistas del certamen, Aguada y Defensor Sporting. Los dos equipos se conocen de memoria. Si bien los planteles cambiaron, mantienen su esencia y una base sólida, por lo que esta serie promete ser más que emocionante, y se espera una gran concurrencia a los partidos.
Cabe recordar que esta semifinal sigue siendo al mejor de cinco juegos y solamente la final se disputará al mejor de siete partidos.
En final cerrado, te liquida
En el partido definitorio del sábado, los dos equipos sabían que no había mañana, que era ganar o despedirse. Con esa convicción salieron a jugar el partido, que más que partido fue un partidazo. Se vivió con entrega, emoción y con mucha gente que se hizo presente, y el resultado final fue triunfo de Aguada sobre Hebraica y Macabi por cifras de 79-76.
El partido fue muy parejo desde el vamos. Los macabeos estuvieron arriba en el marcador, pero nunca lograron quebrar al último campeón -aunque en el transcurso de la noche manejaron diferencias de 8 puntos-, con una buena labor de su extranjero Kyle Lamonte, quien bancaba en ofensiva. Por su parte, el conjunto aguatero tuvo un buen primer tiempo de Rodrigo Trelles, lo que, sumado a los aportes de Jeremis Smith, les permitió a los rojiverdes estar siempre estar a tiro en el marcador.
En el segundo tiempo, en Aguada apareció Leandro García Morales, mientras que en tiendas macabeas Jorge Trindade hizo de las suyas en la zona pintada para ponerle una cuota más que emocionante al cierre. Como ocurre desde hace mucho tiempo, Aguada está acostumbrado a jugar finales cerrados, en los que aparecen sus figuras, a quienes parece que la pelota no les pesa. Por lo general, cuando esto sucede termina ganando. Esto fue lo que acontenció el sábado de noche. Con un par de dobles de Greg Dilligard más libres de su máximo goleador y figura, el intratable Leandro, los dirigidos por Javier Espíndola dieron vuelta el resultado para festejar y seguir camino a una nueva semifinal.
El goleador en el ganador fue García Morales con 21 puntos, pero también rindieron de muy buena manera Smith (19), Dilligard (14) y Rodrigo Trelles (12). De esta manera, una vez más, Hebraica quedó fuera de competencia, quizá antes de lo que algunos esperaban. La parcialidad aguatera está más que emocionada: sabe que no tiene una llave fácil por delante, pero la fe en el equipo, por todo lo que ha dado, está intacta.