Mucha agua caía a las 11.30, momento en que la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes) había convocado a movilizarse en la puerta del edificio del Consejo de Educación Secundaria (CES), en la Ciudad Vieja de Montevideo. A esa hora eran pocos los que llegaban, no sólo por la intensa lluvia sino porque muchos se habían acercado hacía rato. Los representantes de la Asociación de Docentes de Enseñanza Secundaria (ADES) arribaron a primera hora y ocuparon la sede sobre las 9.30. La medida acompañó el paro de 24 horas propuesto por Fenapes. En el interior del país también se realizaron acciones concretas. En algunos liceos, por ejemplo, se convocó a asambleas de padres y alumnos para informar la situación que llevó a resolver un paro de alcance nacional.

Los carteles instalados a la entrada del CES prácticamente no podían leerse porque los docentes que apoyaban la ocupación se agolparon debajo del alero que los protegía de la lluvia. Cerca de la esquina de Rincón y Juncal unos pocos profesores se guarecían bajo el techo de un restaurante. Uno de ellos era José Olivera, secretario general de Fenapes.

En diálogo con la diaria el dirigente se refirió a los dichos del ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich, sobre el paro de 24 horas propuesto para ayer, al que catalogó como una “medida extrema”. “Creemos que es una apreciación apurada por falta de información y hay que ubicarla en el contexto en el que estamos, que es de año electoral”, comentó. Luego agregó: “Se equivoca al decir que es ‘exagerada’ la situación cuando la venimos planteando desde mediados de noviembre del año pasado”.

Silencio

Consultado por la diaria sobre las medidas tomadas ayer por los sindicatos de la enseñanza, el integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT Fernando Pereira, dijo que ese órgano consideró el conflicto en Secundaria pero también evaluó que no era conveniente hacer pública una postura. Por su parte, Beatriz Fajián, que también integra el Secretariado, dijo que en la última reunión únicamente se informó acerca de las medidas adoptadas por los gremios. Consultada sobre su postura personal ante el conflicto, consideró que la sociedad tiene que darse cuenta de que “con falta de profesores y edificios que se caen a pedazos” no se puede tener una buena educación. En ese sentido, señaló que es necesario que se cuente con mayor presupuesto y reclamó que además de que los docentes ganan más que hace algunos años, también se analice si éstos cuentan con las herramientas adecuadas para ejercer su tarea. Consultado al respecto, otro integrante del Secretariado, Richard Read, se excusó de hacer declaraciones y dijo que no ha seguido el tema de cerca.

En relación a que está transcurriendo un año electoral, sostuvo que la educación será “uno de los temas centrales” en la campaña, y que hay autoridades que “no quieren hacer público que tenemos problemas”. A modo de ejemplo, citó los dichos de las autoridades educativas, fundamentalmente las de la directora general del CES, Celsa Puente, a pocos días del inicio de clases, quien aseguraba que el arranque sería “normal”, cuando “no fue así”. Remarcó que fueron varios los liceos que empezaron en forma escalonada por tener problemas administrativos, edilicios o de infraestructura. “Si no esclarecemos ante la opinión pública cuál es el estado verdadero de situación, siempre se termina cortando por el lado más fino, que es el del trabajador que está al frente de la institución educativa, cuando hay un conjunto de autoridades que no asumieron responsablemente el estado de situación”, resumió.

Por su parte, Emiliano Mandacen, presidente de ADES, también consideró que debería existir “honestidad intelectual” entre las autoridades educativas al momento de brindar información sobre la realidad. Sostuvo que la destitución del ex director general del CES, José Pedro Tinetto, reflejó que existían problemas en la administración aunque no los terminaran de reconocer.

Desde el CES consideraron “extraña” la medida tomada ayer, porque consideran que el ámbito de negociación colectiva está funcionando “correctísimamente”, explicó la consejera Ema Zaffaroni. A la instancia de negociación le sumó la participación de delegados de Fenapes en comisiones específicas, como ser la de Asuntos Laborales, Infraestructura y Elección de horas. Recordó además que el viernes se reunieron en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) y el lunes hubo una bipartita de dos horas y media.

En relación a las horas que quedan por designar, Zaffaroni remarcó que están “más o menos igual” que otros inicios de año, aunque hay diferencias porque la elección de cargos para el Consejo de Formación en Educación fue tardía y hubo muchas renuncias a otros cargos.

Siempre que llovió...

A las 16.00 los dirigentes de ADES seguían dentro del local pero se aprestaban a desocupar el edificio, tras haber recibido la intimación para hacerlo. Mientras labraban el acta de desocupación con un escribano, afuera permanecían varias personas resguardándose de la lluvia. Después de un rato, varios dirigentes pasaron por debajo de la pancarta que bloqueaba el acceso al edificio y llamaron a los medios de comunicación. Inmediatamente los manifestantes comenzaron a aplaudir, cantar y lanzar volantes al aire.

Bajo agua, Mandacen, en tono vehemente, explicó que se tomó la decisión de desocupar y que el objetivo de la medida fue el de “denunciar lo que está pasando” a la búsqueda de que el MTSS “esté a la altura de las circunstancias y convoque un ámbito de negociación real en las próximas horas”. Según señaló, ADES está desconforme con la actitud que asumió la cartera durante el conflicto y sus autoridades se quejaron de que la intimación al desalojo no llegara con una fecha y hora de una próxima mesa de negociación entre Fenapes y el CES.

Por su parte, el dirigente Luis Martínez acusó a Puente de no conocer la realidad y afirmó que pese a que la jerarca afirma que todo está en vías de solución, las soluciones no llegan y se siguen atrasando. En respuesta a dichos de Puente, que señalaron que por culpa de la ocupación se había perdido un día para seguir con la adjudicación, Martínez dijo que se perdieron más días por “desidia y falta de responsabilidad” de las autoridades y que ayer se ganó un día de defensa de los derechos de los trabajadores y de la educación pública.

En este sentido, Julio Moreira afirmó que si bien las autoridades dicen que hay 20.000 horas sin asignar, según el recuento de ADES al menos 40.000 horas no han sido adjudicadas. “Los trabajadores que mandan a sus hijos a la educación pública saben que están entrando más tarde, se están yendo más temprano, tienen puentes a mitad de turno”, señaló. Además, dijo que considera “irresponsable” decir que se pierden clases porque los sindicatos paran ante la falta de respuesta de las autoridades.

A seguir

Mandacen explicó que ADES continuará en conflicto, y en los próximos días convocará a los docentes integrantes de los núcleos de cada liceo montevideano para que realicen una evaluación más exhaustiva de la realidad en cada centro. Después de Semana de Turismo ADES convocará a asamblea y empezará a tomar “otras medidas”. El sindicalista se mostró preocupado porque aún no hay una fecha para negociar con el CES “porque el criterio del Ministerio de Trabajo fue muy preocupante: llegó, tiró un papel y salió corriendo”.

Además, entre los docentes estaban presentes varios funcionarios no docentes, entre ellos Pablo Gadea, que dijo a los medios que estaba ahí por el “principio de solidaridad entre trabajadores”. Además, aprovechó para sumar los planteos de su gremio a las reivindicaciones y se quejó de la poca cantidad de funcionarios que trabajan en todas las dependencias de Secundaria. Según dijo, tanto en oficinas como en liceos se trabaja con menos de la mitad de los funcionarios necesarios para cubrir las tareas, entre ellas la asignación de horas docentes.

Después del diálogo con la prensa, los militantes de ADES arrancaron la pancarta que estaba desde la mañana en la puerta de Secundaria y por el medio de la calle y en contra del sentido del tránsito comenzaron a marchar cantando “Arriba los que luchan”.