Al Democrata FC, el albirrojo equipo local, que descendió a la Tercera División del campeonato mineiro, le dicen Jacaré, y es por eso que a su estadio lo llaman Arena do Jacaré. Llegar hasta el Joaquim Henrique Nogueira -ése es su verdadero nombre, en agradecimiento a quien donó el terreno en el que en 2006 se hizo el actual estadio- no es fácil.

Está lejos de la zona céntrica de la ciudad, donde estaba su anterior estadio, y se ubica entre pequeñas ondulaciones que permiten cercar sus accesos y limitar su visibilidad. Es el único escenario que utiliza Uruguay en esta ciudad y, por lo tanto, es ahí donde uno puede apreciar de qué manera entrena, con qué formación juega o qué esquema táctico se usa.

Uruguay, amparado por el propio Reglamento FIFA de los Mundiales, permite el ingreso de la prensa por un cuarto de hora, fundamentalmente favoreciendo la toma de imágenes de los protagonistas. Más allá de eso, poco se puede descubrir acerca de quiénes ensayan como titulares o cómo juegan, porque ese cuarto de hora con ejercicios de calentamiento o recreativos no revela pistas de estrategia ni de titulares. No revelar datos o informaciones tiene su lógica explicación: no permitir al futuro antagonista, en este caso Inglaterra, preparar con exactitud la forma de neutralizar el juego individual de tal o cual jugador, o contrarrestar la estructura táctica y la estrategia pensada para ganar. Es absolutamente comprensible, en tanto implica no facilitar una herramienta, ya no a los periodistas -cuya tarea es acopiar la mayor cantidad de información fiable y certificada- sino a los futuros rivales.

Así, en ese marco de cuarto de hora abierto para nuestros sentidos, mirando todo lo posible, escuchando lo imposible y cargando en el compartimiento del sentido común y el conocimiento la mayor cantidad de datos fiables y verificables posible, es que se puede armar un probable equipo que, siendo puristas, ni nosotros acá en Brasil, ni ustedes allá, necesitamos como información definitiva para hacer nada antes del partido.

Fue así que la selección uruguaya realizó ayer por la mañana su último entrenamiento en Sete Lagoas antes de partir rumbo a San Pablo, donde mañana se juega casi toda su chance de clasificación ante Inglaterra en el Arena Corinthians, en un partido correspondiente a la segunda fecha del grupo D. Los celestes llegaron pasadas las 10.00 -aunque la convocatoria para la prensa y sus 15 minutos de imágenes era para las 9.30- y allí estaba buena parte de la prensa para sacarle el jugo a lo que se podía ver. Los celestes entrenaron a grupo completo con los 23 futbolistas en buen estado sanitario, pero con uno de ellos- el lateral Maximiliano Pereira- excluido por estar sancionado. Como está dicho, no se pudo apreciar más que el calentamiento, por lo que de ninguna manera se pudo confirmar la especulación acerca de las variantes en la oncena que enfrentará a Inglaterra, en un encuentro decisivo para los dos. Luis Suárez, casi un mes después de su artroscopía de rodilla, volverá a jugar oficialmente, con seguridad como titular del ataque uruguayo. Este dato se sostiene por las propias palabras del delantero a la diaria, cuando señaló que estaba al cien por ciento y a disposición para jugar todo lo que pudiera. Para que entre Suárez hay que reformular la delantera y volver varios partidos atrás, cuando los salteños jugaron de puntas. En ese caso, todo se remite a que si adelante jugarán Suárez y Edinson Cavani, quien quedaría fuera de la oncena inicial sería Diego Forlán.

Además, es muy posible que haya por lo menos un par de variantes más sin considerar. En primer lugar, la del lateral derecho, posición en la que no podrá estar Maximiliano Pereira producto de la suspensión por la expulsión sobre el final del partido ante Costa Rica. Está claro y entendido que Óscar Washington Tabárez afirmó que esta vez no dará el equipo hasta horas antes del encuentro en San Pablo, ni dato alguno acerca de variantes, pero existen por lo menos dos posibilidades claras para ocupar el lateral derecho: el ingreso de Jorge Fucile, cuyo único punto en contra es que estuvo todo el último semestre sin jugar oficialmente porque Porto lo retiró de su plantilla de jugadores utilizables, o bien que esa posición la pase a ocupar el Pelado Martín Cáceres, ingresando en el equipo por el carril izquierdo el Palito Álvaro Pereira. Esta última alternativa también tiene sostén si nos apoyamos en la observación de la rapidez de los delanteros ingleses a la que hizo referencia Tabárez en su último contacto con la prensa.

Las otras novedades podrían estar en la zona de volantes, donde tanto Álvaro González, como Nicolás Lodeiro, que ingresaron durante el segundo tiempo del partido inicial, podrían ser esta vez titulares en lugar de Christian Stuani y Walter Gargano.

Una posible oncena entonces podría ser con Fernando Muslera; Fucile, Diego Lugano, Diego Godín, y Cáceres; Pereira, Egidio Arévalo Ríos, Cristian Rodríguez y Lodeiro; Suárez y Cavani.

Ayer a las 17.45 la selección partió rumbo a San Pablo y llegó a destino una hora y media más tarde. Hoy a las 14.30 el técnico Óscar Tabárez y un jugador estarán presentes en la conferencia de prensa oficial de FIFA en el Arena São Paulo, y sobre las 15.15 se hará el entrenamiento en el terreno de juego del estadio mundialista.El jueves después del partido ante Inglaterra la delegación retornará a Sete Lagoas, vía Belo Horizonte.